Maldición Asesina

Capítulo 6

                           ETHAN

Cambié mi opinión acerca de Elara en el mismo momento en el que se disculpó conmigo por haber comenzado las cosas mal. Ya se que detrás de ese físico rudo y esa cara de mala chica hay una buena persona.

Los problemas en casa empeoraron y mi padre cada día está peor, mamá no puede pagar las medicinas ella sola, lo que cobra no alcanza bien ni para comer. Después de haber llevado días buscando trabajo llegó ella como un angel caído del cielo para ayudar.

El problema de esto será la reacción de Emily y de Georgia al contarles que Elara nos conseguirá trabajo en su casa

                              ***

—No me lo puedo creer después de lo que me hizo no quiero ningún acercamiento a está chica.—dijo Emily cruzando los brazos y poniendo mala cara.

Mire a mi hermana, que aunque se que no le agradaba la idea aceptaría por mi padre.

—Yo si acepto trabajar para ella.—dijo Georgia suspirando.

—Venga Emily es el único trabajo que vamos a conseguir.—le miré suplicando.

Ella me miro de mala cara y suspiró derrotada.

—Esta bien, pero solo lo haré porque tengo que ayudaros.

Le di un fuerte abrazo y ella soltó un pequeño chillido.

—Sueltame animal.—grito dándome en la espalda.—Aaa otra cosa es que si ella se mete conmigo dejo el trabajo y no vuelvo nunca más a esa casa ok.

Mi hermana y yo nos miramos y comenzando a reír como tontos burlandonos de Emily.

—Venga ya que no es gracioso.—cruzó los brazos y hizo un puchero.

Después de todo no fue tan difícil convencerla.

                              ***
Sono el timbre del instituto y todos los alumnos comenzaron a salir, me dirigí a la salida en donde pude ver a Elara recostada de un auto esperando a alguien.

Me acerqué a ella y con una enorme sonrisa le saludé:

—Holaaa.

—Holaa...¿que tal estas?—dijo devolviendo el saludo.

—Bien gracias.

—He hablado con mi madre.—sonrío.

—Dime que nos dará el trabajo.—dije con hilo de voz por los nervios.

—Pues sí, hoy deben ir a la casa a que conozcan las reglas y pues mañana comienzan si todo va bien.

—Gracias, muchas gracias.—intenté abrazarla pero se apartó rápidamente.—Disculpa, no al contactó físico.—sonreí.

—Deben estar en casa a las tres de la tarde, a mi madre le gusta que las personas sean puntuales.

—Está bien allí estaremos.—le sonreí.

Se acercarán dos chicos al auto y sin decir una palabra entraron en esté. Elara me miro con una última sonrisa y se subió a la parte trasera del auto. Nos despedimos y me senté en un banco de los de afuera al instituto a esperar por mi hermana y mi mejor amiga.

                            ***
Ya a las tres de la tarde estábamos justo entrando a la mansión. Toque el timbre y una amable chica nos invitó a entrar.

La mansión por dentro tenía muchas decoraciones, todo estaba en colores negros, grises y rojos oscuros. Tiene un montón de escaleras como para perderse por horas.