Capítulo 2

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Cuando Tania llegó al local apenas podía controlar sus nervios. No había ni cruzado la puerta y ya se estaba arrepintiendo. Se miró en el reflejo de la puerta de cristal: Vestido negro corto, tacones plateados, pelo recogido en una coleta, y maquillaje de noche. Se dio cuenta de que por primera vez en mucho tiempo se había arreglado de verdad. Soltó una bocanada de aire y trató de recordar que tan solo estaba allí por diversión.

Cuando entró sintió el perfume dulzón que flotaba en el aire y la romántica música que sonaba de fondo. Una delgada y alta chica de labios rojos la saludó y la llevó hasta la recepción.

-¿Primera cita?-Tania asintió tratando de no parecer demasiado nerviosa.-Pues relájate y disfruta.-Tania volvió a asentir y se sentó en unos mullidos sofás. Toda la decoración era roja y había corazones por todos lados: Corazones en las paredes; corazones colgando del techo; corazones en las alfombras; en los manteles, ropas, velas, cuadros e incluso en algunos tatuajes.

De pronto apareció un señor en traje:

-Buenos días; ¿Tania?

-Sí.

-Bien; acompáñame.-Ella lo siguió por un pasillo de madera iluminado tenuemente.-Qué joven, ¿no?

-¿Cómo?

-Digo que eres muy joven para estar aquí; normalmente vienen los viejos que ya están desesperados. Pero tú... es imposible que tengas menos de cincuenta pretendientes.-Tania rió y rezó porque no se le notara el rubor.-En fin, tú no te preocupes porque el chico que te ha tocado es muy guapo. Pero bueno, si no te gusta, yo siempre estaré libre.-Tania volvió a sonreír y por un momento se olvidó del nudo que sentía en el estómago. 

Pasaron al restaurante, donde habían muchas mesas, prácticamente todas ellas ocupadas por parejas que charlaban relajadamente.

-Tu chico te está esperando sentado.-Le anunció el señor señalando una mesa a lo lejos. Tania siguió su dedo hasta que se topó con la mesa en la que pasaría el resto de la noche. La joven no pudo evitar abrir la boca: ¿Era posible que entre todos los chicos guapos el más guapo también se encontrara desesperado y tuviera una cita con ella?

Recuerdos compartidosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora