30 - FINAL

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-"Omi, viste algo?!" Ryo gritó a su hermana, quien la vio de pie paralizada frente a unos escombros, sujetando su pecho, parecía que no podía respirar

Se acercó pronto a ella para observar la misma escena que ella estaba presenciando, el cuerpo de su madre yacía en el suelo sin vida.

Itadori se apresuró para ir con ellos, hasta que se dio cuenta de el cuerpo de su amigo tirado a pocos metros del suceso, de alarmó y no dudó en ir a verlo.

-"Fushiguro!" Dijo en voz alta poniéndose de rodillas y cargandolo en su regazo, apoyando su cabeza en su pecho para ver si tenía latidos

Sonrió emocionado al oír su corazón.

-"No siento la presencia de nuestro padre..." Omi dijo con sus labios temblando y sus ojos llenándose de lágrimas

Su hermano apretó los dientes, sabiendo bien lo que había ocurrido, no se detuvo en palabras, abrazó con fuerza a su hermana antes de que ella empezará a romper en llanto.

-"Deberíamos ir a reunirnos con los demás... para terminar con las maldiciones que andan sueltas... La mayor amenaza ya ha desaparecido..." Ryo dijo sujetando a su hermana

-"No la podemos dejar aquí! Hay que llevarla! Es nuestra madre!" Respondió en angustia queriendo lanzarse sobre el cuerpo de aquella mujer

Ryo intentó sujetarla con fuerza e impedirle que se mueva, hasta que vieron de pie a Tsumiki, mirándolos atentos.

La chica caminó lentamente hacia Kyomi.

Se puso de rodillas frente a ella, colocó su cabeza en su regazo, y la hizo abrir la boca, sacando su lengua, notando un símbolo en ella.

Pronto tomó una navaja escondida en el vestido de la difunta, rompió en un instante sus prendas para despejar el vientre de la mujer y apuñalarlo, recreando el mismo símbolo que en su lengua.

Omi empezó a gritar en una mezcla de rabia y confusión, pero su hermano pudo notar que la marioneta solo intentaba seguir un ritual, así que mantuvo firme a su hermana.

Dentro de poco el hechizo de control a esa mujer se va a romper porque mamá está muerta... Quizás le encargó algo antes de que eso ocurra...

Ryo pensó observando atento.

Mientras tanto, Fushiguro abría lentamente sus ojos y pudo ver el rostro de su amigo, se sentía extraño, alzó sus manos y empezó a mover los dedos, conmovido por haber recuperado su cuerpo, pero desanimado por todo el caos y destrucción que permitió.

Itadori lo abrazó con fuerza en lágrimas de alegría, al notar que ya no se encontraba bajo el control de la maldición.

Tsumiki al finalizar el símbolo, tomó el rostro de Kyomi y la ayudó a tragar algo que se encontraba dentro de una bolsa ensangrentada.

Cuando el cuerpo pudo tragar hasta el último bocado de lo que le dieron, este empezó a temblar, su cuerpo curandose poco a poco.

La chica no tardó en caer al suelo sin vida, como un muñeco que soltaron.

Luego de varias convulsiones, el cuerpo de Kyomi se sentó, queriendo volver a respirar, y allí se escuchó, el primer suspiro de esa mujer de nuevo.

Sus hijos la vieron con sorpresa, al ver como ella volteaba lentamente a verlos.

-"No quieren darle un abrazo a mamá?" Ella sonrió  "Qué clase de necromante sería si no sé cómo revivirme a mi misma?"

Ambos no tardaron en lanzarse a abrazarla entre llanto mientras ella los consolaba.

-"Shh... shh... No es tiempo para lágrimas, aún tenemos muchas cosas que hacer mis niños..." ella susurró palmeando sus espaldas mientras observaba al chico pelirosa y al pelinegro de pie a unos metros "Estoy segura de que algunos quieren a sus amigos de vuelta" terminó diciendo aquello con una gran sonrisa

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Se escucharon unos golpes en la puerta, por lo que la mujer fue a ver quién era.

-"Satoru Gojo, que agradable sorpresa" Kyomi comentó sonriente "Qué te trae por aquí?"

-"Ah, no hay forma de agradecerte todo lo que hiciste, así que te traje un regalo~" dijo mostrandole un ramo de flores dragón "Sus favoritas, verdad?"

-"Veo que has estudiado mucho sobre mi" rio levemente para recibir las flores

-"Qué hay de los niños? Se encuentran bien?"

-"Si... Luego de quitarles su maldición, se han vuelto unos bebitos recién nacidos, son un encanto... Me dan la chance de verlos crecer y poder criarlos" comentó y se puso a jugar con los pétalos de las flores "Y tus niños?"

-"Están bien" sonrió "Gracias, por salvarlos... a todos"

-"Creo que aún estoy a tiempo de redimirme, no es así? Si necesitas algo... estaré aquí para ayudarles"

-"Lo mismo digo"

-"Ya me han ayudado demasiado. Me dieron un hogar, me dieron una cantidad exagerada de dinero, y la chance de vivir como alguien normal" el sonido de un llanto llamó la atención de ambos "Parece que Omi ha despertado, gracias por las flores. Nos vemos otro día" dijo para cerrar la puerta

Caminó para dejar las flores en un jarrón, al acomodarlas, estás se marchitaron enseguida, lo cuál la hizo sonreír.

Abrió la nevera, tomando un trozo de carne para empezar a cortarla en filetes grandes y cocinarlos.

Se dirigió con la bandeja con carne hasta el sotano.

En las paredes, a medida que baja las escaleras había varios sellos pegados, y la puerta del sótano estaba medio abierta.

Kyomi suspiró y luego negó con la cabeza, para abrir la puerta y ver allí a la maldición, atada de todas sus extremedidas con cadenas pesadas, incluido su cuello, y con la pequeña bebé en sus brazos, meciendola.

-"Omi quería ver a su padre?" Ella preguntó dejando la bandena con carne cerca de su alcance, mientras caminó hacía él para acariciar la cabecita de la bebé

-"Un día voy a conseguir la última pieza de mi que tienes escondida de mi, y todos esos amiguitos que te has hecho van a desaparecer" Sukuna dijo riendo

-"Ojitos lindos lo tiene bien asegurado, y yo no te dejaré salir de aquí cariño mío" le dijo besando sus labios "Quieres cargar a Ryo también?"

Hizo una mueca pero al final asintió lentamente, ella fue rápido a buscar al niño para entregarselo en brazos, ahora ambos siendo mecidos por su padre.

-"Te traje algo delicioso!" Le mostró la bandeja con carne "Abre grande~ ah~" empezó a alimentarlo

-"Me tratas como una mascota"

-"Tú me trataste así por mucho tiempo también cariño mío" Kyomi rio levemente "Ahora... Yo soy tu Reina y tu Diosa, no puedes hacer nada sin que yo te lo permita"

Comentó mirándolo a sus ojos mientras lo seguía alimentado.

Kyomi terminó cumpliendo su sueño, teniendo a su amada familia junta, para siempre.

La Reina Ha Vuelto - Kyomi (OC JJK)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora