-What the Dark Hides-

-Cap 21-

ーLevántateー la voz del entrenador hizo eco, mirando al jóven tirado en plena pista de patinaje. ーSasha...levántate, ¿quieres ser un perdedor?, entonces sigue como estas ahoraー reprochó.

Dash, apenas un chiquillo de nueve años, negó, luchando por levantarse, su cuerpo dolía, las caídas se sentían, su cuerpo estaba a punto de seder. Pero ahí estaba, dando lo mejor que puede, su pelirrojo cabello desordenado cubría su rostro, el cual reflejaba su dolor. Ama el patinaje sobre hielo, pero su cuerpo estaba por colapsar de horas de patinaje y sin descansó.

ーDueleー murmuró, apoyándose donde pudo.

ーPerder duele másー fue la respuesta a su queja. ー¿Quieres ser un perdedor?, si no entrenas, me sera claro que esto es un juego oara tiー añadió, mirando al niño apoyarse con la barra de apoyó.

Sus ojos picaron, se alejó de la orilla y volvió al centró, haciendo giros y tratando de perfeccionarlos, ya no caía como antes, podía dar un salto sin caer de bruces al frío piso congelado. Su cuerpo colapsa en pleno aire al dar un salgo, choca contra la barra de seguridad plástica, mira a duras penas a su entrenador que a entrado a auxiliarle.

ー¿Donde te duele?ー "todo" pero no se atreve a contestar y cierra los ojos.
ーDejaremos esto por hoy, cámbiate y ve a casaー su cuerpo fue ayudado a ir hacia afuera.

Dash hace el esfuerzo sobrehumano que su cuerpo de ocho años puede darle, se quita los patines con cansancio, su cuerpo esta al máximo, logra ponerse sus zapatos, guarda sus cosas y se pone su abrigo largo y cálido para el frío fuerte de afuera. Es noche, mira el cielo y la nieve cae.

Dash tiene que esperar a que su mamá fuera por él, así que se queda sentado en la banca de enfrenté, hay algunas tiendas aún abiertas, Dash observa su entorno, las farolas iluminando el lugar, los autos pasando ya eran pocos, alguna que otra persona afuera disfrutando de la nieve. En la calle de enfrente se habré con el ruido de carcajadas, Dash se acurruca sobre si mismo mientras los ve, lo que más sobresalta es una peculiar cabellera que Dash puede ver a la perfección, el grupo de cuatro ríen y hablan con mucho ánimo.

Dash los sigue con la mirada, pasan donde un par de niños están jugando quienes tal vez vivan en la residencia de al lado, no sabe qué, solo apartó la mirada un momento, al otro momento el chicos mayores están teniendo una lucha de bolas de nieve con los cinco niños quienes tal vez eran de su edad. Una pequeña sonrisa crece en sus labios, los ve reír y jugar, con esa chispa divertida y juguetona, Dash los contempla simplemente, cuando menos se da cuenta, sus vistan chocan, debido a la distancia no podría decir el color de sus ojos, pero ese cabello es tan...

ー¡Sasha vamos!ー la voz de su madre le hace reaccionar.

Se levanta de un brincó y fue con ella en el auto aparcado a unos cuantos pasos, Dash los sigue viendo atrvez de la ventana del carro, pasan frente a ellos y quiere unirse al juego.