Myoui Mina y Son Chaeyoung tenían sentimientos mutuos, sin embargo ningúna de las dos tomó la iniciativa. Al tener demasiadas dudas sobre sus sentimientos y de no dar el siguiente paso, esa magia podría llegar a desaparecer y otra persona llegaría a...
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Maratón 1/3
Cuarto día, desde el día de ayer todo me iba perfectamente bien, era totalmente extraño. Chaeyoung había estado todo el día conmigo, hablamos, jugamos y solo estábamos recostadas viendo el techo agarradas de la mano. ¿Agarradas de la mano? Así es, al ser mejores amigas teníamos ese extraño hábito, yo no me quejaba, me gustaba demasiado sentir su mano cálida entrelazada con la mía.
Chaeyoung me había dicho que no estaría en toda la tarde, pero creo que se le olvidó o solo quería pasar tiempo conmigo, eso me hizo muy feliz y aceleró mi corazón.
— Chaengie. — Llamé dulcemente a la coreana y me giré a verla.
— ¿Uhm? — Me sonrió dulcemente.
El aliento de Chaeyoung chocaba con mi rostro, estabamos tan cerca que podía escuchar su respiración. Podía arriesgar todo y besarla, pero sería muy arriesgado el hecho de que podia perder su amistad o ser algo más
— Nada, solo estoy feliz de pasar tiempo a tu lado.
— Yo también estoy muy feliz, Mina. — rápidamente dejó un beso en mi mejilla. — Lamento no pasar tiempo contigo, extraño las salidas que teníamos como amigas.
"Amigas", "simplemente amigas". Aún me afectaba, pero ya no le daba tanta importancia, aunque luego mi mente me jugaría sucio.
— Lo sé, pero lo bueno es que saldremos a cenar, ¿verdad?
Al yo decir esto, Chaeyoung se tensó un poquito y empezó a tartamudear. Oh no, aquí venía la mala noticia, sabía que este día no podía ir tan bien, el destino tenía que jugarme sucio.
— Mina... — Chae se sentó y aún sostenía mi mano. — Quería tanto salir contigo, pero Zion me invitó a conocer a sus padres. En serio perdóname, no debí haber hecho planes. Podemos salir otro día.
Ouh... Parecía que iban demasiado serio, su relación parecía estar estable, eso es bueno, pero aún así no era de mi agrado.
— Uhm... — Yo me puse un poco triste. — Yo entiendo, ve y arréglate bien, supongo que ya casi es hora. Nosotras podemos salir otro día.
— Te lo recompensaré, mañana podemos ir al cine. Te quiero mucho, Minari.
— Yo también te quiero, Chaeng.
Fui una completa tonta, yo sabía que Chaeyoung solo estaba siendo amable y cariñosa con su "mejor amiga". Odiaba tanto ser su mejor amiga, solamente ser etiquetada con eso.
Una tonta que se emocionaba porque su amiga le demostraba cariño, porque besaba su mejilla, y porque le decía cosas bonitas.
Mis ojos se llenaron de lágrimas y no quería llorar, solo me vería como una estúpida y sensible, parecería que no estoy de acuerdo en su relación, solo me tiré a sus brazos de Chaeyoung y escondí mi cara en el hueco de su cuello así evitando que mis lágrimas salieran.
— ¿Podemos quedarnos un tiempo así? — Asintió y lentamente fuimos cayendo hacia el suave colchón.
Ahora nos encontrábamos abrazadas, podía escuchar como su corazón latía muy rápido y no entendía porque, estando en su cuello mi respiración chocaba en el, solo podía sentir como se comenzaba a tensar.
Poco a poco fuimos alejándonos, podía sentir mi rostro arder, era un leve rubor e igual la coreana estaba así, nuestros rostros estaban tan cerca que podíamos ver cada facción de nuestros rostros. Sus bellos lunares, su nariz, sus labios rosados y esponjosos que eran mi debilidad e igual sus grandes y brillosos ojos, podía verla tan cerca...
Una leve atracción fue haciendo que cada vez nos quedemos más cerca, podía sentir como se rozaban nuestros labios, tanto que nuestras respiraciones se mezclaban. Un fuerte ruido hizo que nos espantemos y nos alejamos rápidamente, salvadas por la campana, no se que hubiera pasado si no hubiera llegado esa llamada. Podía ver su rostro de Chaeyoung rojo, lo más rápido que pudo contestó y yo solo me quedé mirando el suelo.
Eso hizo que el ambiente se tornará un poco tenso, era normal, dos mejores amigas casi se besaban y una de ellas tiene novio. Solo podía escuchar como Chaeyoung tartamudeaba un poco e intentaba lucir normal ante la llamada de su novio.
— Eh... M-me tengo que ir a ducharme, te aviso cuando me esté yendo. — Parecía que se acercaría para dejarme un beso en la mejilla, pero no hizo nada, simplemente se alejó y salió de la habitación.
Una vez que salió de mi habitación mi corazón latió como nunca, sentía que saldría de mi pecho en cualquier momento. Estuvimos tan cerca de nuestros labios, no entendía porque quedamos así, solo pude pensar que tal vez se sentiría culpable de casi engañar a su novio.
— Eres una estúpida, Myoui. — Me golpeé la frente y me tiré en mi colchón. — ¿Qué carajos me pasa? Debo dejarla en paz...
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Holaaaa, aquí les traigo un pequeño maratón, espero les guste.
