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< Capítulo 12: Saga de Conan (2) >

La ficción de género se considera baja cultura.

Especialmente cuando se publica por entregas en revistas baratas como 'Mitad y mitad', es precisamente eso: un breve respiro, un entretenimiento decente, un poco de dopamina. La ficción pulp es un pasatiempo para aquellos con poco tiempo y ocio, muy parecido a los cortos que inundaban YouTube en una vida pasada.

Como resultado, su contenido también es directo, sencillo y fácil de entender.

"Sion."

"Sí, mi señor."

"A partir de ahora, llevaremos a cabo una sesión de lectura de cartas de fans."

"...¿Sí?"

Así, las novelas "de apariencia fácil" naturalmente atraen a los críticos.

El resultado fue una bolsa mágica llena de cartas de fans.

"Léelas y separa las que ofrecen críticas racionales, coherencia y consejos investigados de las que son acusatorias sin fundamento".

"...Entendido".

Sion parecía desconcertado, pero no se molestó en preguntar por qué y empezó a leer las cartas una a una.

Por el ceño que de vez en cuando cruzaba por su cara, parecía que había bastantes acusaciones sin fundamento.

"Señor".

"¿Qué?"

"Aquí... '¿No es esto un plagio del Quijote?'. ¿Dónde pongo esta carta?"

"¿Crees que es un plagio?"

"En absoluto, señor".

"Entonces va al montón de las acusaciones infundadas".

"Entendido."

En efecto, las críticas se presentan de diversas formas.

Las acusaciones de plagio seguían siendo relativamente educadas. Había cartas que eran casi ataques personales.

Habiendo reunido todas esas cartas, pudo clasificar un número significativo.

"Mi señor. ¿Planea demandar a los lectores que escribieron estas cartas acusadoras?"

"No. Tengo en mente algo mucho más interesante".

"¿Algo interesante, señor?"

"Sí."

En la serie de Conan el Bárbaro, aparecen muchos villanos.

Nobles codiciosos y cobardes, ladrones que robaban llaves, piratas violentos, rufianes que desafiaban a la civilización... todos condenados a ser vencidos por el protagonista. Se necesitaban nombres para papeles tan secundarios.

Afortunadamente, funcionó.

"Ser encasillado como un villano barato en las novelas que ridiculizaban como baratas, ¿no sería la máxima humillación para ellos?".

"... En efecto. Sería bastante exasperante para ellos."

"Y divertido, ¿verdad?"

"Sí."

"Jeje..."

Bien.

Era un quebradero de cabeza intentar inventar nombres para personajes secundarios rebuscando en listas de nombres, pero ahora teníamos los chivos expiatorios perfectos.

Tú, el troll.

¡Conviértete en el forraje de la misma novela que desprecias!

* * *

Sobrevivir Como Plagiario En Otro MundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora