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< Capítulo 20: Las penas del joven Werther (3) >

Los aspirantes a escritores que se enfrentaban a los "relatos cortos" que yo había preparado veían cómo sus reacciones cambiaban con el tiempo.

¡"Huhuh! Esto, ¡esto es un relato corto inédito de Homero!".

"Estoy tan contento de estar vivo... Huhuh..."

"¡Homer es un dios!"

Al principio, todos estaban encantados.

Los aspirantes a escritores, todos amantes de la ficción, empezaron a leer con brillantes sonrisas ante la idea de poder leer manuscritos inéditos.

Sin embargo, con el tiempo, cada vez más estudiantes empezaron a sentirse desconcertados.

"Huhah... Esto, esta cosa insoportable es una novela... ¿Qué es exactamente escribir...."

"Hoo, este trabajo también fue increíble... Pero, ¿eh? ¿Todavía queda esto...?"

Las historias cortas que había preparado fueron seleccionadas especialmente para la halterofilia literaria.

Había muchas piezas no aptas para esta época, y bastantes eran incluso vanguardistas. Era difícil que todos se disfrutaran de forma divertida.

"Tengo los ojos secos... Huhuh... Mis ojos... Por favor, llamen al cura..."

"¡Podría leer todo el día!"

Al final, cuando la conferencia se acercaba a su fin, más de la mitad de los estudiantes se habían agotado.

Sin embargo, no es que no hubiera alumnos destacados.

Unos cuantos lectores ávidos, como si fueran a lamer los caracteres del papel, leyeron todos los manuscritos y, aún sintiéndose insatisfechos, volvieron a empezar desde el principio.

Miré la hora y asentí, refrescando el ambiente.

"Todos han trabajado duro. Podéis llevaros los manuscritos. Está bien aunque se filtren fuera... Hmm, siempre que no sea para fines como publicarlos bajo tu propio nombre".

La mayoría de ellos eran escritos que no encajaban en esta época, pero tales escritos aún podían contribuir al desarrollo de la literatura a su manera. De todos modos, no eran lo suficientemente influyentes como para ser considerados grandes clásicos.

Pero la prioridad era el crecimiento de estos "aspirantes a escritores".

"Huh, Huhuh... Manuscritos inéditos de Homero..."

"Quiero leer un poco más..."

"¡Necesito un bolígrafo! Quiero organizar esta inspiración en escritura!"

Incluso ahora, algunos alumnos chispeaban con ganas de escribir. Nuevas semillas de obras brotaban en este otro mundo.

Aunque las obras nacidas de este modo quizá no se ajusten a los gustos del gran público actual...

Con que me parezcan interesantes, me basta.

Sonreí satisfecho. Tenía la agradable sensación de que estos individuos escribirían novelas agradables.

* * *

"Las penas del joven Werther" era, en efecto, una serie melodramática.

Un joven involucrado en un romance con una mujer casada, la amistad con su marido, la angustia y el conflicto subsiguientes, el romance. La posición de la protagonista, atrapada entre dos hombres, era estructuralmente similar a la de los dramas románticos de su vida anterior.

Sobrevivir Como Plagiario En Otro MundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora