Capitulo 13

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Abby P.O.V.

La cabeza me da vueltas, siento todo mi cuerpo adolorido y me cuesta respirar; intento moverme, pero el dolor tan intenso de mis costillas me detiene y mientras hago una mueca siento como todo mi cuerpo y mi cuero cabelludo sufren y piden a gritos un calmante, abro los ojos lentamente y siento una mano sobre la mía.

- Adrien... - apenas sale un suspiro que creo no escucho, pues esta dormido y yo estoy en... ¿un hospital? oh, no... - Adrien - lo llamo con una poco mas de voz, mas áspera que nada en este mundo.

- ¿Que? ¿Que pasa? - se levanta muy deprisa y sus ojos recorren todo hasta posarse en mi, me ve y parece que llorara, juraría que lo hará. - ¡Oh, Abby! - me dice antes de acercarse con mucho cuidado y dejar un beso en mi frente para después darme una linda y tierna caricia en la mejilla.

- Adrien, se que debí decírtelo, pero... - antes de que pueda continuar pone un dedo sobre mis labios.

- Eso no importa ahora, Abby. - me da un dulce beso en la nariz. - Posiblemente te molestes pero quisiera pedirte que te fueras a vivir conmigo, ¿aceptas? - me suelta de golpe, mi rostro debe ser un poema.

¿Irme a vivir con él? esperen, ¿que? Dormir. Los dos. En una casa sola. ¡Santo dios! Mi cerebro que es un total y completo idiota, se bloquea y deja a mi cuerpo reaccionar, no se de donde coño saque la enorme sonrisa sin partirme de nuevo el labio, asiento lentamente con la cabeza y Adrien pone cara de idiota.

- ¿En serio? - vuelvo a asentir como tonta y me abraza con cuidado. - ¡Oh, gracias! prometo cuidarte y si quieres puedes tener otra habitación, o dormimos juntos, como gustes. Te cuidare, iremos a la escuela juntos, comeremos juntos, hablaremos, estaremos juntos... - comienza a divagar mientras lo observo emocionarse.

Tocan a la puerta y Adrien sigue en su trance, entra una enfermera y Adrien aun esta hablando tonterías, creo que va donde nos casamos y tenemos hijos, no se perdí el hilo cuando entro al enfermera, checa unas cosas mientras oculta su sonrisa por las cosas que dice Adrien, luego sale.

- Adrien, tranquilo... - le digo para que deje de hablar y en ese momento entra un doctor.

- Señor Maddox, señorita Abernathy. Soy el doctor Westfal - nos regala una cálida sonrisa, la cual devuelvo con mucho cuidado. - Tuvo una contusión y tiene una costilla astillada, deberá guardar reposo y todo eso ya lo sabe su novio. Yo solo vine para informarles que ya pueden marcharse, dejare la hoja de su alta con la enfermera en recepción, la cuenta esta a nombre del señor Maddox.

Se retira y nos deja solos, me levanto con ayuda de Adrien y con mucho cuidado me conduce al pequeño baño que hay en la habitación, me pongo el vestido que traía ayer y no me pongo los tacones, pues Adrien a llamado a alguien para traer una silla con rueditas, era eso o que me cargara.

Llegamos a recepción entre una conversación tranquila, firma en mi nombre y vamos al auto que afortunadamente esta en un lugar un poco apartado y parece que llego un loco en él, me levanto para sentarme a lado del conductor y Adrien vuelve a ayudarme.

- No estoy muriéndome sabes... - le digo con la voz un poco ronca, aun me cuesta respirar. Subo y corre al lado del conductor, lo enciende.

- Por tu voz diría que si, anda déjame ayudarte. Mañana iremos a tu casa por ropa, ¿o prefieres ir hoy? - realmente no se que seria bueno, tal vez cuanto antes mejor.

- Sera mejor ir hoy, claro si no parece muy apresurado... - le digo bajando la cabeza y poniendome roja, tal vez suene muy apresurado, pero, sinceramente, no quiero permanecer mas tiempo en esa casa.

- De acuerdo... - me dice dando un giro para volver a mi casa.

Llegamos bastante rápido, me bajo un poco débil de su auto y caminamos a la entrada, podemos escuchar un poco de ruido, tal vez haya venido una tía o algún primo de visita, puesto que no tengo hermanos, eso seria lo mas cercano a una familia.

Abro la puerta y mi madre junto a mi tía Isabell, nos reciben, saludo educa mente y me subo a mi habitación; llegamos y no tarde mucho en meter todas mis pertenencias en maletas, por suerte Adrien bajo hace un momento por un par de cajas y entre los dos metimos todas las cosas como si fueran basura, todo quedo revuelto, pero después me preocuparía de eso.

Adrien hace una llamada un poco antes de terminar y cuando me doy cuenta un par de señores vienen y comienzan a bajar mis cajas y maletas, dejan todos los muebles, pues no son necesarios y se llevan hasta la ultima caja, maleta o cosa personal.

Me llevo todo, no dejo absolutamente nada para mi madre o Robert... Estoy agotada de acomodar todo, Adrien aun no se quita la ropa que traía en California y bueno yo, yo aun traigo el vestido y voy descalza.

- ¿A donde vas con tanta prisa? - esperen es... ¡OH, POR DIOS!

- ¡Blacke! - corro a abrazar a mi primo favorito de todo el mundo, tiene 22 y me saca como bastantes centímetros, es del tamaño de Adrien, un poco mas bajo. - pero, ¿que haces aquí? - le pregunto cuando me separo de él.

- Solo vine de visita, pero veo que ya te vas... - me dice observando mi cuarto vació y algunas cosas tiradas por ahí.

- Bueno, tuve un par de problemas con Robert y ahora mismo me iré a vivir con Adrien... - le digo acercándome a Adrien que mueve un poco mi cama intentando salvar a mi hermoso peluche que él me regalo hace bastantes años. - Adrien, quiero presentarte a mi primo Blacke.

- Hola, un placer. Adrien Maddox, novio de Abby... - se presenta mi amado novio y yo sonrió como idiota.

- ¿No eras el mejor amigo, por el cual se paso llorando casi cuatro meses? - pregunta mi primo con una ceja lazada, quiero matarlo.

- Ahm... Supongo que si, creo... -responde algo nervioso Adrien, él no tenia que saber eso.

- Bueno, ¿te parece si nos vemos mañana para comer? - le pregunto a mi estúpido primo, el cual aun ve mal a Adrien.

- Claro, ¿donde nos vemos? - pregunta con una sonriendo muy dulcemente hacia mi, claro.

- Podrías ir a nuestra casa, esta al final de Forks, cerca del bosque... - dice Adrien con una sonrisa hermosa y ahí me percato de que menciono la palabra bosque y mitad, entonces recuerdo la casa que tenían, era muy grande y estaba al final de todo Forks, escondida prácticamente.

- ¡Oh, si! ya recuerdo, estaré ahí como a las 3 de la tarde... -me da un enorme abrazo y se despide de Adrien para irse, termino de rescatar a mi amado peluche y bajo con Adrien, es hora de irnos.

Bajamos y me encuentro a mi madre con su semblante serio y un poco apagado, me despido de mi tía Isabell, me acerco a mi primo y me despido de él, por ultimo me pongo delante de mi madre y antes de que haga cualquier cosa, se da la vuelta y le susurra algo a Adrien, este asiente y mi madre me abraza como hace mucho no hacia.

- Adiós, madre... - susurro con un poco de lagrimas en mis ojos.

- Adiós, Abby... - después de eso salgo de esa casa y nos vamos en el auto de Adrien, mi auto lo llevaran en un rato mas a la casa de Adrien. espero no le hagan nada, es mi bebe.

Nos vamos guiando al camión de mudanza, pues tenia muchas cosas, sobre todo ropa o pertenencias. Llegamos casi 40 minutos después y nos ponemos a bajar todo, bueno Adrien me dejo sentada en el sofá mientras todos metían cajas y maletas.

Estoy tan cansada que no alcanzo a escuchar bien lo que sucede, siento que me quedo dormida y creo que así lo hago, solo se que el sueño esta delicioso, pero tengo frío, mucho frío, no quiero tener frío. Comienzo a sollozar por frío como un bebe y siento unos cálidos brazos levantarme mientras creo caminan.

Sigo con frío y me acurruco a un cómodo y muy fuerte pecho, esta calentito, expulsa calor y me quedo pegada a él sin ningún problema, estoy abrazando el cuello de mi fuerte de calor cuando me dejan sobre una cama o algo muy cómodo.

Después me quedo profundamente dormida abrazada a la deliciosa fuente de calor, que huele malditamente bien, huele a Adrien y a bosque, ese era su olor desde que lo conocí, siempre esta con él, no lo deja nunca.



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