15. Lo que Hira sabe

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Yo no era alguien que lloraba, en absoluto no, sin embargo, esa noche no pude evitar las lágrimas que se apoderaron de mis ojos.
Compré algo de alcohol y en medio de mi soledad lloré como un idiota por todo lo que estaba pasando en mi vida.
Era un tonto; me seguía aferrando a alguien que ni siquiera era mía ya.

Con el dolor en mi corazón y las ganas de hundirme en un sueño profundo, me obligué a levantarme por la mañana e ir a trabajar como de costumbre.
En la escuela me aseguré de hablar con Jungkook respecto a lo que planeaba hacer con Big Music y aunque se decepcionó un poco dijo entender y apoyar mi decisión.
Yo estaba apenado porque gracias a él había conseguido el empleo, sin embargo, no creía poder soportar la situación por mucho tiempo.

Recién llegué a la empresa fui a la oficina de Hoseok.
Me observó confundido.

—¿Qué sucede? No te ves muy bien.

Tomé un poco de aire antes de empezar a hablar.

—Hoseok, solo quiero decirte que he venido a renunciar.

—¿Qué? ¿Por qué?—estaba aturdido. —¿Por Sooyoung?

—De ninguna manera—me apresuré a decir. —Agradezco mucho la oportunidad y por hacerme trabajar con artistas de la talla de Seokjin, sin embargo, mi trabajo en la escuela me está requiriendo mucho más tiempo y, aunque parezca extraño, es un trabajo que disfruto hacer y quisiera continuar haciéndolo. De verdad lamento mucho todos los inconvenientes que te he causado.

No hubo respuesta de inmediato, él parecía no creer lo que yo le había dicho.

—Yoongi, de verdad que es una lástima; haces un trabajo maravilloso, sin embargo, no puedo obligarte a quedarte y entiendo perfectamente tus razones. Está bien, pero espero poder volver a verte pronto.

Tras unas últimas palabras de despedida, salí de la oficina con una rara sensación.
Irme no era lo que realmente quería, pero no había encontrado otra solución.

Fui a mi estudio a recoger mis cosas y me llevé una gran sorpresa cuando unos minutos después alguien tocó a la puerta.
Abrí y lo que menos esperaba era ver a Hira con un rostro demasiado serio.

—Hola—dije casual al no haber ninguna palabra de su parte.

—¿Quieres decirme por qué renunciaste?

—¿Qué? ¿Cómo lo sabes?

—Eso es lo de menos. ¿Fue por la señorita Kim?

—Cállate—advertí porque ella estaba casi gritando. La hice entrar a la oficina y ella parecía no estar muy contenta.

—No es por eso. Tengo otro trabajo y quiero dedicarme a él.

—No me mientas, te conozco.

—Hira...

—Tengo algunas cosas que hacer, pero necesitamos hablar. Vamos a cenar más tarde.

—Yo no–

—No acepto un no. Ya tengo tu número, te mandaré la ubicación.

—Hira, ¿cómo diablos te enteras de las cosas?

—Demasiadas preguntas. Te veo en la noche, Min Yoongi.

Sin dejarme decirle más, salió de la oficina molesta.
Me quedé estupefacto, Shin Hira quizá sabía más de lo que yo creía.








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⏰ Última actualización: Jul 27 ⏰

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