Blood Moon -Monster High AU-

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Las primeras semanas del semestre pasaron volando, y Cleo apenas podía respirar entre las clases y los encuentros furtivos con Deuce. Cada momento libre lo aprovechaban para verse, ya fuera en la universidad o en la habitación del campus de la princesa, siempre con la sombra de Nefera acechando, ya que se había cambiado de universidad solo para mantener vigilada a su hermana.

Una noche, viernes para ser exactos, Cleo decidió que ya era hora de contarle todo a detalle a Deuce. Lo invitó a su habitación después de la última clase del día. El campus estaba tranquilo, y la mayoría de los estudiantes ya se habían retirado a sus dormitorios. Cleo esperaba ansiosa, mirando el reloj y escuchando cada pequeño sonido en el pasillo.

Finalmente, se escuchó un ligero golpe en la puerta. Cleo abrió rápidamente y dejó entrar a Deuce, cerrando la puerta detrás de él.

-Gracias por venir, Deuce -dijo Cleo, con una sonrisa nerviosa.

Deuce se acercó a ella y la tomó de la mano-. No es nada cariño. Ya estoy a aquí... De que querías hablar?

Cleo asintió y lo guió hacia la cama, donde ambos se sentaron. Tomó una respiración profunda antes de comenzar su relato.

-Mi hermana y mi padre... Han estado haciendo todo lo posible para separarnos. Quieren que me case con el príncipe Amenhotep, como lo sabes... -Cleo hizo una pausa, buscando las palabras adecuadas-. Nefera ha estado manipulando todo a su favor, y ha utilizado su influencia para mantenerme alejada de ti, me habia arrebatado mi celular, ese chico se la pasaba en casa o me obligaban a ir a esas cenas tontas que el planeaba -solto un suspiro de frustración- No he tenido manera de contactarte, tampoco a las chicas, y me sentía atrapada. Ella está siempre sobre mi, como te habrás dado cuenta, se cambió hasta de universidad para saber hago -se jalo el cabello de la desesperación- y conociéndola se que va a manipular a Amenhotep para que haga lo mismo. Yo no se que obsesión tiene ese chico conmigo para aceptar todas las estupideces que le dice mi hermana -se paro de la cama y comenzó a dar vueltas por la habitacion- No se que más hacer, he hecho de todo para mantenerme alejada de ese chico, pero es imposible. El no es malo, simplemente es un tonto que se deja manipular por idiotas como mi padre y Nefera.

Deuce la miró con tristeza, pero también con comprensión. Todo lo que estaba pasando su novia era completamente innecesario, sabía que su hermana estaba loca, pero no a ese nivel.

-Sabía que algo así podría estar pasando. Siempre he sabido que tu familia tiene grandes expectativas para ti. Pero Cleo, no puedo permitir que te sacrifiques tu sola por ellos. -Deuce tomó su rostro entre sus manos-. Ya saldremos de esta, acuérdate que estamos unidos por la luna.

Cleo sonrió con lágrimas en los ojos.

-Deuce, no quiero perderte. Con todo lo que esta pasando, me había olvidado de la Luna... Espero que realmente su poder al unir monstruos, sea tan fuerte como dicen

Deuce la abrazó con fuerza, sintiendo una mezcla de alivio y determinación. Sabía que su amor por Cleo era más fuerte que cualquier obstáculo.

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Mientras tanto, en otro rincón del campus, Draculaura y Clawdeen Wolf se encontraban en una situación completamente diferente. Desde la fiesta de Frankie, su relación había tomado un giro inesperado. Lo que comenzó como una amistad íntima se había convertido en algo más profundo y apasionado.

Esa noche, Draculaura había llamado a Clawdeen, como de costumbre.

-Clawdeen, ¿puedes venir a mi habitación? -susurró Draculaura por teléfono.

-Claro, Lala. Estaré allí en unos minutos -respondió Clawdeen, sintiendo un escalofrío de emoción.

Cuando Clawdeen llegó, Draculaura la esperaba con una sonrisa tímida pero traviesa.