「Mi Única Razón」

194 42 10
                                    


—Les juro que esa es la verdad —Insistió con la mandibula tensa y una mirada casi suplicante por credibilidad a la chica de cabello rubio.

Killian considero este plan un completo éxito, Cora le dio instrucciones especificas y todo marchaba de maravilla hasta que el destino le jugo una mala mano y ahora se encontraba amarrado al tronco de un arbol con los resonantes pasos de un ogro acercándose.

—Dinos porque quieres ir a Storybrooke —Demando Emma por segunda vez al no conseguir una respuesta clara y eficaz.

—Mi esposa esta ahí —Respondió luego de vacilar unos segundos —Tal vez la conocen, Verónica Van Helsing.

—Repite tu nombre —Pidió Graham dando un paso al frente y con el entrecejo fruncido.

—Killian Jones.

Graham soltó un suspiro y apretó los labios en una línea recta, si el capitán iba al pueblo con ellos estaba seguro que no le gustaría lo que descubriría.

—¿Verónica es tu esposa? Pero si ella -

Emma fue rápidamente interrumpida por el cazador pues no deseaba dar explicaciones qué ni ellos entendían ahora con el tiempo medido.

—La conocemos —Graham se acercó para desatarlo, en caso de que Verónica recuperara la memoria estaba seguro que querría a su esposo en una pieza y no en el estómago de un ogro —Puedes venir con nosotros pero nos ayudarás y dirás todo lo que sepas.

Killian asintió en silencio pero Mulan protestó, sin embargo, después de discutir sus razones del porqué no se debía confiar en un pirata y mucho menos en el Capitán Garfio dada su reconocida reputación fue ignorada.

Graham estaba decido a llevarlo y Emma, aunque no estaba segura, lo aceptó por lo que Blanca también lo hizo.

El pirata los llevo al tallo que los dejaría subir a las nubes y así obtener la brújula, solo faltarían las cenizas del armario mágico.

Killian supo leer la mirada de Emma y por lo poco que había descubierto en una conversación con ella mientras escalaban, la rubia le recordaba de cierta forma a su esposa, era fuerte y con decisión pero de algo impulsiva e imprudente en cuanto a sus decisiones.

Un pequeño detalle que espera no sea alarmante después

—Creo que hacemos un buen equipo —Dijo luego de haber dormido al gigante con éxito —Ahora entiendo porqué tu y Verónica son amigas.

—¿Como sabes que somos amigas? —Interroga mirando con detenimiento al gigante solo para asegurarse que este no despertara y los polvos mágicos funcionaran.

—Las personas son fáciles de leer —Sonrió con un toque de arrogancia, después de todo, su intuición era su mejor talento.

Con cada acción se sentía más cerca de su esposa y de su venganza hacia Rumplestiltskin, hacia el cocodrilo qué se interponía de su felicidad.

Lamentablemente Emma tenía otros planes, después de conseguir la brújula traicionó al Capitán y lo dejó encadenado en el santuario del gigante.

—Emma por favor —Pidió algo desesperado, no queria que esto se le fuera de las manos, si perdía esa brújula Cora lo matará o peor aún, lo dejará ahí para continuar por su cuenta —Te ayude y te dije toda la verdad.

Si lo dejaba ahí las probabilidades de llegar al pueblo eran bajas y no iba a darse por vencido.

—No me quiero arriesgar —No confiaba del todo en él, si Verónica no lo recordaba debía ser por algo —Pero si te puedo asegurar que ella está bien.

—¡Eso no me sirve Swan! —Le gritó —Por favor... No me dejes aquí.

Negó suavemente y se marchó rápidamente hacia la salida qué el gigante le había mostrado ignorando los gritos del Capitán por ser liberado, él sentía que todas sus oportunidades se esfumaban.

[...]

El sol entraba por la ventana y pegaba justo en la cara adormilada de Jefferson, el cual, a regañadientes tuvo que abrir los ojos y enderezarse en la cama pero en seguida notó el espacio vacío a su lado.

Luego de levantarse y caminar hacia la cocina se encontró a Verónica sentada en la encimera con una taza entre sus manos.

—Buenos días  —La saludo mientras se acercaba a ella y dejaba un beso en la coronilla de su cabeza —¿Estás bien?

—No lo sé —Admitió con una mueca en sus labios —Tengo un presentimiento extraño.

Estaba preocupada por sus dos amigos y tenia la necesidad de hacer algo para ayudarlos, frente a ella, al otro lado de la habitación estaba el sombrero de Jefferson, si lo reparaba, podria ir al bosque encantado.

—No es reparable —Menciono Jefferson leyendo su mirada para despues servirse café —O al menos no es tan fácil como piensas.

—¿Entonces se puede? 

Jefferson no respondio, solo la miro en completo silencio, no importaba lo que dijera, ella era lo suficientemente terca para intentarlo.

Luego del desayuno compartido Verónica se marcho a la tienda de antigüedades de Rumplestiltskin esperando encontrar una respuesta mas concisa pero en su lugar encontró al espectro muy ocupado buscando herramientas ahí mismo.

—¿Ocupado? Necesito un favor —Exclamo caminando hacia la parte trasera de la tienda donde el espectro buscaba entre muchos de sus artefactos.

—¿Acaso ustedes creen que voy por la vida haciendo favores? —Cuestiono con severidad sin detenerse a mirarla —Ahora no es momento para tratos o favores señorita Van Helsing.

—Es para traer a Emma, Blanca y Graham devuelta, quiero que arregles el sombrero y a cambio te daré mi-

—¿Corazón? —Las palabras de la castaña fueron abruptamente interrumpidas —¿Como me daras algo que ya poseo?

El se giro para finalmente encararla, en sus manos tenia un collar protector para Henry y un corazón latente que por su respuesta dedujo que era su corazón e instintivamente se llevo una mano al pecho.

No pudo formular una oración pero por su expresión exigía una respuesta a lo que Rumple contesto con calma. —Ya hicimos un trato antes, tu corazón me pertenece hasta que el trato se venza.

—¿Que trato? —Tendría que ser uno muy importante o drástico como para haber tomado esa decisión, no habría dado su corazón a menos que sea para salvar la vida de otra persona pero ¿quien?

—Ya habrá tiempo para hablar de esto pero ahora tus amigos no podrán regresar o al menos no solos si no hacemos esto —La expresión confusa de la castaña aumento, estaba perdida en los hechos y sumamente dudosa sobre todo —Cora, quiere venir a Storybrooke quitandoles asi la oportunidad a tus amigos.

Solo esa oración y ese nombre basto para hacer a un lado sus dudas por ahora y centrarse en el presente, la reina de corazones y madre de Regina no era una bruja que deseara ver dada la reputación que mantenía.

—Nosotros nos encargamos pero en caso de que esto fracase quiero que protejas a Bella sin importar lo que tengas que hacer —No fue una petición, era una orden a la que ella no podia negarse aunque quisiera por lo que la cazadora asintio sin decir una palabra.

Ahora comprendía mejor porque siempre obedecía al espectro aun cuando no lo deseara.



































𝗛𝗨𝗡𝗧𝗘𝗥 ━━━━ OUATDonde viven las historias. Descúbrelo ahora