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Para los que vengan de tiktok gracias por el apoyo, me encanta que pongáis comentarios y que votéis. Y os agradecería que compartierais mi cuenta y siguieras comentando, lo leo todo y acepto todo tipo de consejos. Era eso, que disfrutéis la lectura. 🩷

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Kacchan 💥
Nerd.

Kacchan 💥
No le cuentes a nadie
del beso.

Kacchan 💥
Ya sabes, por si acaso. Tus amigos
son unos entrometidos

Perdedor #1
Como quieras.

La indiferencia de Deku lo molestó, le hizo sentirse mal por lo que le dijo. Pues Izuku le había dicho lo mal que lo había pasado por que lo escondieran, y fue justo lo que él hizo. ¿Pero desde cuando le importaban los sentimientos de Deku?

Ya era lunes, había hablado con jirou y pasarían por ellos a la hora del almuerzo. Izuku no le había dirigido la palabra a Katsuki, ni siquiera lo miraba. Y dice eso, porque usualmente era Deku quién daba los buenos días y quién sacaba tema de conversación constantemente. Ahora el entorno se sentía vacío. Estaban almorzando en mesas distintas. Deku llevaba puestos auriculares, se sentía tan distante que era triste.

- Deku. — El nombrado no respondió.

- Deku. — Volvió a llamar, esta vez le quitó los auriculares.

- ¿Qué quieres Katsuki? — Katsuki se estremeció al oir su nombre.

Lo había llamado Katsuki. Él no recordaba algún otro momento en el cual Deku lo había llamado por su nombre. Izuku de pequeño no sabía pronunciar la palabra "Katsuki" por lo que tomó Kacchan como referencia, y hasta ahora así lo había llamado siempre. Su nombre sonaba jodidamente raro cuando era él quién le llamaba así.

- ¿Katsuki? ¿Desde cuando me llamas así?

- ¿No es tu nombre?

- Tsk, olvídalo. — dijo yéndose a zancadas, en cuánto sintió a sus amigos abriendo la puerta.

Al tener llaves entraron sin avisar, aunque ya se les oía gritar y reir desde antes. Eran muy ruidosos, es por eso que Katsuki apenas pasaba tiempo con ellos. Ambos ya tenían sus cosas preparadas. De igual manera no se llevarían mucho, puesto que al terminar las vacaciones lo tendrían que llevar todo de nuevo. Izuku terminó su desayuno y cuando sus amigos entraron él estaba en la cocina.

Pudo identificar a los que estuvieron esa noche en su casa la noche que le pusieron el reto. A diferencia que shoto también había ido. No tenía idea de dónde podría estar Katsuki, y no le importaba mucho. Recogió sus cosas y se fue con Uraraka, Tsuyu, Iida y Shoto. Lo estaban acompañando a su casa cuando sacaron el tema de los dormitorios.

- Deku, ¿cómo fue estar con Bakugou durante 3 días? — preguntó Uraraka.

- En realidad estuvo bien, hicimos cosas juntos y creo que nuestra relación mejoró.

Cuando dijo eso último se acordó de cuando compartieron sus experiencias amorosas, y de cuando se besaron. Oh, el beso. Se sonrojó, su cara ardía de sólo acordarse del beso.

- Midoriya, ¿que acabas de recordar que te has puesto rojo? — preguntó el delegado moviendo los brazos como solía hacer siempre.

- Uh n-nada.. — dijo tapándose la cara, rojo de vergüenza.

- Vamos deku-kun, ¡escúpelo! — exclamó Uraraka presionándolo.

Él sabía que no iba a ser buena idea decirlo, además de que Kacchan le había dicho claramente que no le dijera nada a sus amigos. Y peor aún, estaba Shoto ahí, y si realmente gustaba de él no quería hacerle pasar un mal rato. Él mismo había vivido de antemano gustar de alguien que no te corresponde, y no era nada agradable.

- ¿De qué me he perdido estos 3 días? — dijo cambiando de tema rápidamente

- Haremos como que no nos estás ocultando algo. Pero el sábado hubo una fiesta en casa de... — comenzó Uraraka a parlotear.

Después de llevar sus pertenencias a su casa fueron por un helado. Mientras Uraraka y Iida iban a ordenar, Shoto y Deku elegían mesa.

- Al final si pudimos comer el helado...

- Si, aunque yo hubiera preferido estar a solas, ya sabes...

Justo llegaron sus amigos con los comandos y no pudo responder. Pero no evitó pensar en si eso tenía algo que ver con lo que le había dicho Kaccan. Se tomaron los helados y se despidieron. Cuando Izuku llegó a su casa su mamá estaba preparando la cena.

- ¡Manzanita! — Inko se abalanzó sobre su hijo. Era una mujer bajita, igual que Izuku. Estaba rellenita y tenía el pelo corto. Era la mejor madre del mundo a ojos de Izuku, se contaban todo. — te extrañé — dijo dándole besos por toda la cara.

- Mamá — se quejó izuku intentado zafarse del agarre y limpiándose la cara. — yo también.

- Bueno qué. ¿Tienes algo para contar? — dijo sacando un trapo del delantal y limpiando las salpicaduras de la mesa.

- Mmm, puede... ¿Cómo supiste que querías estar con papá? — dijo Izuku, sentándose en el sofá sin dejar de mirarla. En su casa el salón estaba unido a la cocina con una barra, por lo que desde la cocina Inko podría hablar con Izuku estando él en el sofá. Inko sonrió por la pregunta, le hizo acordarse de su juventud.

- Tu padre era muy coqueto. Siempre me invitaba a salidas y yo lo rechazaba porque según no era mi tipo. Al final por insistente le acepté una sola salida y me enamoré. ¿Porqué me preguntas, pasa algo zuzu?

- Yo..eh. B-besé a alguien, bueno él me besó a mi. Y creo que me gusta pero no es mutuo y realmente disfruto su compañía pero él no me ve de esa forma ni lo hará nunca.

- Entiendo. — respondió. Salió de la cocina y se sentó a su lado. Izuku estaba sentado como indio. — Lo que yo creo es que tienes un corazón muy grande como para que sufras de esa manera. Sal, conoce gente nueva y enamórate. Eres muy joven como para estar pensando en eso. Confío en que sabrás que hacer, y si no, estaré para apoyarte. Te quiero manzanita. — dijo revoloteandole el pelo — Va siendo hora de cortarte el pelo.

- La verdad es que sí — dijo, ido de la conversación. Estaba pensando en lo que le había dicho su madre.




él es mi... ¿mi qué? [bkdk]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora