Un revelde amor .Cap .13 cuando me retiré, empeze mi negocio. y tu madre se puso en contacto conmigo. Por que me dijo que le interesaba el rumbo . qué había tomado mi vida, después de mi carrera deportiva. Yo creí que solo era una escusa. comentó terry. Y por fin esbozo una sonrisa, que hizo que Candy sintiera una emoción extrañamente agradable, que le recorría el cuerpo. - pero cuando nos conocimos le comentó terry a candy...- candy trago saliva. - ¿Estas Diciendo... Estas diciendo que mi madre y tu...? Los ojos azules de Terry se encontraron con los de candy, y terry se reía, entre sorprendido y divertido. - por supuesto que no - le contesto - : tu madre quería conocerme, pero no quería nada conmigo. Lo cual, para mi, era algo inusual.- Candy resoplo - a claro por que lo más natural para ti es que las mujeres, acudan a tu lado como las abejas a la miel. Algo muy masculino se asomo por los ojos brillantes de Terry. - algo que hizo a candy sentirse acalorada por todo el cuerpo. Candy bajo la vista a su plato y rogó para que no se diera cuenta. Que ni siquiera había tocado ni un bocado, y de lo que estaba sintiendo. - terry le respondió te sorprenderías en un forma de murmuró. Y por su tono seductor era evidente que si se había percatado de la reacción de candy. - y terry le comentó aveces estoy en mi trabajo o ocupado en lo mio, cuando llegan las mujeres solas a desnudarse delante de mi, te imaginas, terry lo dijo provocando a candy. A candy le costaba crecer qué terry tenía sentimientos y algo de humanidad que le gustaba bromear. A candy, le hubiera gustado que todo ese humanidad y ese sentimiento lo hubiera mostrado todo el tiempo atrás todos esos años de encierro en un internado, lleno de soledad, y todas sus cartas, nada más si acaso para recordarle que alguien allá fuera le importaba, si estaba viva o muerta nada más.- Candy le contesto pero mi madre no fue una de las que se desnudanban - no no lo fue, coisidimos en berlin y nos caímos bien y, los las importate, nos dimos cuenta de que nuestras ideas de negocios eran muy similares. Y no pareció predestinado y decidimos fucionarnos, - concluyó terry. - encogiendose de hombros,. - Yo pensaba, que el gran terry granchester, creía en sí mismo, y en su propia gloria, no en el destino lo observaba candy. -¿ por que le sonaban amargas sus palabras.? Se preguntó terry. ¿ Podría ser que Candy se sintiera celosa por una cena que el tuvo cuando candy era nada más que apenas una niña? ¿O es algo que dices para que otros se sientan mal consigo mismo, o algo en lo que creas de verdad.? Terry la escucho en silencio. Si te sientes mal candy puedo darte un buen consejo, - terry tomo su copa y fijo los ojos en candy-:deja de sentirte así. Candy contesto pues vaya, gracias - murmuró irritada. Se sentía mezquina, por sentir celos de su madre, pero no parecía poder, para. Ni controlar la esperezas de su tono-. Es un consejo muy útil. Es justo la clase de consejos que das a las personas que no nacieron con los dones y privilegios que nosotros tenemos. Terry parpadeo y sus rostros se endurecio molesto. {{ ES culpa suya }}, le dijo su voz interior a candy {{ haz hecho que vuelva a convertirse en el terry frío e inflexible}}. Terry... Murmuró, arrepentida de como había hablado, pero terry la corto con una mirada fulminante, que la hizo encojerse. Terry le respondió no se que pasa por esa cabeza tuya, - le dijo con esa voz tan fría - y dura como el hierro, - pero para mi es más que un insulto que la heredera, andry swayt. Se siente a mi mesa y pretenda darme lecciones sobre dones y previlegios- terry soltó una risa agria -. Yo nací en la celda de una cárcel, candy. Y fui hijo de una mujer soltera, de una época donde una mujer soltera, si quedaba enbarazada sin estar cansada se consideraba, pecado. Mayor pecado que por el delito del que la habían acusado, tráfico de drogas. Por lo que habían mandado a mi madre a la cárcel, mi madre salió de la cárcel cuando yo tenia dos años y ella me crió, si es que podía llamarse así su constante negligencia, en taugurio, y en las calles, hasta que me abandono. Yo tenia cuatro años, y mi tío se hizo cargo de mi con renuencia, se hizo cargo del hijo de la hermana de la que siempre había renegando. Y solo por que era lo correcto, no por que su esposa o el quisieran un niño salvaje, {{un pequeño indomable }} como me solían decir. - candy dijo yo no pretendía... Balbuceó ella. Terry la ignoro. Tenía los labios apretados y sus ojos llamaban. Tenía un balón ese era mi único juguete y pasaba el día dándole patadas contra el muro de la casucha de mi arrogante tío cuando lo que quería hacer era tirarla contra su cabezota. Iba dándole patadas por la calle a mi balón. Mientras huia de la policía del padre de la iglesia o de quien fuera. Persiguiendome por haber roto, algún cristal: era lo único que tenia mis pies la furia qué llevaba por dentro, y aquel condenada balón. Terry se veía tan irritado tan tenso... Que Candy no sabía como detener la furia de Terry. Que ella misma había propiciado. Terry le dijo todo lo que tengo lo he propiciado con mi esfuerzo y el sudor de mi frente, me sacrifique en cuerpo y alma, en el terreno de juego, y luego cuando me hice polvo la rodilla, volvi a empezar de cero. Un hombre crea su propia suerte, y yo lo e hecho dos veces, ¿qué has hecho tu aparte de darme problemas? Por favor terry... Le suplico candy avergonzada de si misma-. Siento lo que he dicho antes lo he dicho antes lo dije sin pensar.- Terry le dijo si ya me he dado cuenta que seguido lo haces las cosas sin pensar. - candy se aclaro la garganta, estaba temblando por dentro. Tomo un sorbo de vino antes de preguntarle. Y estar calmada, y que fue de tu madre. Le miró con cautela candy. Pero al ver su seño fruncido, se arrepintió de haber, preguntado, candy añadió con cautela, si no te molesta la pregunta le dijo. Terry con voz molesta y fría no tengo la menor idea, jamás la volví a ver, ni siquiera se si esta viva. Puede ser que allá muerto de una sobre dosis, no se si la identificaron si traía consigo papeles, sea lo que sea de ella, no puedo decir que me, importe. Tras todas esas palabras. No hubo más conversaciones. Solo se escuchaban el sonido de los cubiertos, en el comedor y la música clásica qué había puesto terry de fondo en el comedor.- Era el silencio incómodo que evidencia a él que debería de ser una hermosa cena a la luz de las velas, candy no podía soportar el silencio incómodo y hablo. Me alegra mucho que tu y mis padres se llevarán tan bien le dijo. Terry siguió callado y cuando finalmente contesto no la miro. Para mi eran muy buenos amigos muy buenos amigos, dijo terry. Mientras untaba un poco de paté en una tostada. No hay un solo día donde no sienta su perdida. No había motivo para que sus palabras la sintieras como una bofetada, ni tampoco había motivo por que sentirse mal. - Pero a candy le dolía mucho pensar que tal vez su actitud era el de una niña caprichosa y berrinchuda, y egoísta. Por que jamás se había puesto a pensar que también para - terry, la muerte de sus padres se ignificaba una pérdida también para el . Ni se le había ocurrido pensar que podían ser amigos y socios, y tampoco se había puesto a pensar en la confianza que tuvieron sus padres para nombrar a terry tutor legal. La cena siguió su curso lenta y incómoda, terry seguía tenso. Se disipo un poco y de repente empezó a inteelgara candy. Con sus preguntas incómodas. Con todos esos requisitos que quería que tuviera, candy. Después de aquel momento tan difícil a candy le dio a alivio, volver a la rutina. No se como le haces terry, con tanto trabajo tener tiempo de aprender todo lo de modales y etiqueta, estoy intentando evaluar, si valió la pena, a verte enviado a ese colegio, por que pague mucho dinero. Pero estoy viniendo qué no sirvió de nada. Tanto dinero para nada. Quizás hubiera dejado que anduviera en las calles de Europa, para que te las apañaras tu misma, a lo mejor aprendas más. Conseguir que me. Continu
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Un rebelde amor
RomanceUn fanfics de Candy y terry. Es una adaptación. Sin fines de lucro, los derechos de los personajes no me pertenecen son de keiko nagarita. Es una historia donde el recuerdo del rencor, y el resentimiento y el anhelo de la libertad, llegará a límite...