La semana paso volando, en instantes ya era el día de su fiesta, prácticamente había logrado entender un poco su magia, prácticamente logra hacer que las plantas crezcan y/o broten como quiera, pero también puede hacer que se pudran o sequen, si eso lo pudiera utilizar como arma, sería tan fuerte como sus hermanos.
En la mañana sus empleados, se encargaron de ayudarlo a vestirse y arreglarse, pese a que dijo que podía solo.
- Se ve espectacular -. Comento su dama Revena.
- Gracias.
- Sabe, hoy puede ser un buen día para disfrutar de la compañía de otras personas -. Si bien le alegraba que el príncipe Kasim le invitará a bailar, no era una persona para fiarse, después de todo era extranjero y se le conocía por ser frío y distante.
- No creo que sea buena idea -. Le respondió.
- Pero está es...
- Ni siquiera van a venir muchas personas -. Le cortó a lo que Revena se sorprendió. - Solo vendrán amigos cercanos y no tengo muchos.
- Pudo invitar a más personas, de último minuto -. Sugirió. - Es una oportunidad para que usted haga amigos.
- Gracias, pero, me gusta así -. Antes pensaba que si en su casa daba una gran fiesta para los nobles finalmente le darían su lugar, pero nunca lo aceptaron, siendo conocido como la vergüenza de la casa Melet y era su cumpleaños, no quería desperdiciarlo tratando de encajar.
Al momento llegó su mamá.
- Te ves increíble -. Corrió a abrazarlo.
- Mamá cuidado -. Tenía preocupación de que se golpeara el estómago.
- No te preocupes -. Sonrió sin soltar un brazo de él pero quedándose de lado. - Él está bien -. Se tocó su estómago. - Todavía no se ve -. Gin miro el vientre de su mamá con calma, si había algo que está otra vida le había dado era la oportunidad de proteger a este nuevo hermano y dejaría que nada le pasará. - Bueno es hora de bajar.
Hablando de verse bien su madre una era la excepción su cabello había sido peinado de manera espectacular, adornado con broches de mariposa color plata, teniendo un estilo levantado un poco la parte derecha de enfrente, su maquillaje también era bello, sus sombras eran color verde y plata sus labor eran ligeramente rosas y alrededor de sus ojos había algo de lápiz y rimer en las cejas, su atuendo no era la excepción un verde hoja con algunos adornos color plata en sus mangas y cuello, los zapatos eran del mismo color.
Los 3 se dirigieron a la sala, donde su papá y hermanos lo estaban esperando, todos tenían trajes elegantes, su padre tenía un traje azul con camisa blanca y botones dorados, su hermano mayor usaba un traje azul con algunos adornos de plata y su segundo hermano tenía una camisa blanca estilo pirata con una chaqueta torera color negro, en juego con sus pantalones con adornos de plata.
- Bien, estamos listos -. Dijo su mamá. - ¿Invitaste a tus amigos?
- Si invite a algunas personas -. Al segundo siguiente Blue entro al salón principal, adornado con glos y listones rojos y negros con la na barra de comida en el medio, los manteles más finos rojos de seda con bordes dorados.
- ¡Señores! - Hablo fuerte. - ¡Presento a Sus majestades el primer príncipe de Tarum Kasim Lux Keisen y al segundo príncipe Yulson Lux Keisen -. Los dos entraron, ambos radiantes con Sus trajes rojos con adornos negros, los destacaba como miembros fuerte.
- Un gusto -. El hermano menor hizo una reverencia, seguida por su hermano.
- Un gusto -. Los miembros de la familia regresaron el gesto, al levantarse Kasim sintió la mirada seria y algo amenazante del jefe de familia.
- Es un placer para nosotros ser invitados a esta celebración -. Yulson mostró una amable sonrisa.
- El placer es nuestro -. La jefa de la casa le respondió.
Ambos se acercaron a Gin, al verlo Kasim parecía embobado con su apariencia.
- Hola -. Hablo Gin.
- Hola -. Le contesto con una sonrisa, quedandose mirando un rato, para sorpresa de Gin no pudo evitar pensar que Kasim se veía muy guapo. - Amp - Kasim saliendo de su pensamientos miro a un confundido Yulson. - Es pero que no te importe -. Hizo que su hermano se colocará enfrente. - Traje a mi hermano menor conmigo.
- No es molestia -. Sonrió, estirando su mano -. Mucho gusto -. Le dio una sonrisa sincera al menor, acepto el gesto aunque le pareció raro.
- Gracias.
Al entrar encontraron el pasillo y el comedor estaba adornado con globos negros con rojo, al igual que el mantel el más grande era negro y los pequeños eran tus rojos, siendo muy temprano para comer, sugirió dar un paseo por el jardín, también adornado con algunas actividades.
- ¿Cuál es tu actividad favorita? - Preguntó algo nervioso el segundo príncipe.
- Me encanta montar y cultivar flores-. Contesto emocionado. - ¿A ti?
- A mi me gusta conocer lugares -. Genuina, usualmente, solo se acercan a él para después hablar de favores, con su hermano.
- ¿Qué lugares has visitado?
- Bail, Xiankui, Eros, Vilay y Neza -. Contesto.
- Vaya, son muchos.
- ¿Tú has viajado?
- Solo a Bail, realmente mi familia es la que viaja.
- ¿Tú no vas con ellos?
- Solo hace unos días fui con mi mamá a Bail.
Poco tiempo después apareció Lain está vez llevaba un atuendo más llamativo color rojo intenso y no tan afeminado.
- Buenas tardes -. Dijo con dificultad.
- Hola -. Saludo Gin con sorpresa pero seguro. - Si pudiste venir.
- Si, bueno -. Tenía un tono tímido. - Tú me invitaste.
- Si, vamos -. Con una gran confianza agarro a Lain del brazo y lo guío.
Las actividades consistían en hablar de los viajes de Yulson y las citas de Lain, en dado momento decidieron montar, observando que Lain no podía ni siquiera subirse a la silla, a lo que Gin pidió una escalera, en un segundo intento casi voló hacia el otro lado.
- ¡WOW! -. Al verlo se sorprendieron de que el no sabía montar - Bien -. Trato de sonar seguro. - Vamos.
Al tratar de imitar los movimientos de los demás no se movió su caballo, y al darle una patada en los costados provocó que se callera a un lado, afortunadamente los empleados estaban al pendiente evitando un accidente más fuerte.
- ¿Estás herido? - Gin se acercó a la banca donde Lain descansaba.
- No -. Se escuchó decepcionado.
- Oye -. Tocó su hombro. - Nadie lo logra a la primera -. Al verlo el peli morado observó verdadera comprensión. - Vamos -. Le extendió su mano.
Él la acepto, era extraño era la primera vez que se sentía confiado en darle la mano a alguien sin sentir desconfianza.
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Mi Destino
Diversos¿Qué harías si tuvieras la oportunidad de corregir tus errores del pasado? Gin Melet la oveja negra, siendo un Omega dominante en una familia de alfas sintiendose todos los días inferior y creyendo que su familia lo despreciaba, cambia después de mo...