Te Quiero a ti [Mechoa]

Capítulo XV

Cuando Guillermo despertó la mañana siguiente, lo primero que vio fue la pequeña figura de su esposo al otro lado de la cama durmiendo profundamente.

El omega no había dormido prácticamente en toda la noche, estando atento a las necesidades del alfa; si tenía sed, si necesitaba ir al baño o si era hora de tomar sus medicamentos. Había logrado conciliar el sueño casi al amanecer.

Guillermo lo observó a detalle, Lionel era hermoso incluso durmiendo, inconscientemente se le escapó una sonrisa al ver esa pijama rosada de seda que se ceñía a su bonito cuerpo de manera perfecta, acentuando delicadamente sus curvas.

Se sentó con mucho cuidado de no lastimarse y tomó su celular respondiendo algunos mensajes, entre ellos el que Andrés le había mandado comentándole que David Beckham estaba esperando para la firma del contrato. En los días que él alfa estuvo en coma, Andrés se había hecho cargo de los pendientes que había dejado Guillermo, además de todo lo relacionado con el accidente.

Había puesto una denuncia contra el responsable y ese asunto aún no se resolvía pues Guillermo estaba imposibilitado por obvias razones para declarar. Los únicos testigos eran Javier y Kun pero no había más pruebas que probaran la inocencia de Cristiano Ronaldo.

Después de responder los mensajes importantes, escribió a su personal de servicio para que cocinaran un desayuno para él y su esposo y lo llevaran a la habitación. No sabía que era lo que le gustaba a Lionel por lo que pidió de todo un poco. Se extrañó al saber que ni las personas que trabajaban en la casa conocían los gustos del omega pues este era el que se encargaba de cocinarse e incluso le dijeron que él mismo aseaba su habitación y lavaba su propia ropa.

Lionel despertó al sentir movimiento en la cama y un delicioso aroma que invadió sus fosas nasales. No sabía si era el olor que abrió su apetito o que no había comido muy bien los últimos días que sintió un hambre tremenda.

- No sabía que te gusta desayunar y pedí varias cosas, hay hotcakes, fruta, huevos revueltos, tocino y los chilaquiles son míos - dijo Guillermo con una sonrisa cuando vio a su esposo un poco desorientado y con el cabello revuelto - que si tú quieres te puedo convidar pero están algo picantes, ¿Quieres café? - el omega asintió y Memo le sirvió en una taza

- Nunca he probado los chilaquiles - mencionó tímidamente dándole un sorbo al café quemándose la lengua - ¡La concha de su madre! - frunció el ceño cuando su esposo se burló de él - creo que solo comeré los hotcakes

- Es tu karma por nunca haber comido chilaquiles, no puedo creer que nunca los hayas probado si llevas muchos años viviendo en México

- Normalmente desayuno un alfajor y un mate

- Eso explica porque la cocinera no sabía que te gusta comer, incluso mencionó que haces labores de limpieza - no desaprovechó en sacarlo al tema, era algo que le había sorprendido mucho

- Guille, tenía que ocupar mi tiempo libre en algo, al principio lo hacía por matar el tiempo pero después lo seguí haciendo por gusto ¿Te sorprende que el niño mimado haga ese tipo de actividades?

- Leo, yo siento mucho todo lo que ha pasado - soltó un profundo suspiro antes de continuar - no debí haber hecho todo lo que hice, debí darte el divorcio después de que le pague a Jorge pero estaba furioso con todo el mundo; contigo, con Manuel e incluso con mis padres...

- Guille hablemos de esto luego, seguís delicado - interrumpió el omega, no quería tener aún esta conversación

- No Lionel, no puedo seguir evadiendo este tema. Quiero disculparme contigo, yo sé que eso no va a remendar nada, no te va a devolver el tiempo que perdiste encerrado en esta casa y las humillaciones que te hice pasar pero te juro que realmente estoy arrepentido. No tengo ninguna justificación, lo sé . En este momento no quiero que te sientas obligado a estar aquí por mi condición, quiero que sepas que eres completamente libre de irte cuando quieras y te daré el divorcio para que empieces una nueva vida