Capitulo 7.

25.9K 1.5K 37
                                    

Lágrimas caían de mis ojos desconsoladamente, fui de inmediato hacia donde sé encontraba mi abuelo arrodillado y trate de levantarlo con ayuda de Maximiliano.

Mi abuelo tenía a su alrededor un charco enorme de sangre, no paraba de toser y de su boca no dejaba de salir sangre.

-Tenemos que llevarlo a un hospital, no sé puede morir sin haber intentado luchar por su vida.-Mi voz era entrecortada, ayude a Maximiliano a llevarlo hacia el auto.

Las caras que tenían Andrea y Maximiliano eran de sorpresa, mis abuelos fueron en la parte de atrás junto con Andrea.

Maximiliano encendió el auto y aceleró lo más que podía, le di indicaciones para llegar al hospital que prácticamente no quedaba tan lejos. Tenia la vista nublada a causa de las lágrimas que no quería derramar, quería demostrar que era fuerte aunque por dentro me estuviera muriendo.

Mire hacia atrás y me encontré con la mirada triste de mi abuelo, mi abuela lo tenía abrazado ella al igual que yo lloraba incontrolable.

Después de cinco minutos llegamos al hospital, bajamos a mi abuelo y entre al hospital gritando.

-¡Ayúdenme por favor! Mi abuelo se esta muriendo.-Grité lo más fuerte y de inmediato un doctor y dos enfermeras se llevaron a mi abuelo, con ellos también sé fue mi abuela.

En la sala de espera solo estábamos nosotros tres y un silencio sepulcral crecía cada vez en ese lugar, yo no tenía pensaba en nada mas salvo que mi abuelo estuviera bien.

¿Quieres un café o algo de comer?- Andrea sé encontraba mirándome con pena.

-No, gracias.-Mi voz era apenas audible, estaba completamente paralizada por el susto y el miedo de perderlo.

-Toma.- Maximiliano me tendió su chaqueta y hasta ahora me daba cuenta lo que apenas y traía puesto, con las prisas se me olvido cambiarme.

-Gracias. -Quise sonreír, pero pareció más una mueca.

-Se pondrá bien, ya lo verás.-Me agarro la mano afectuosamente y sentí un leve cosquilleo ante su contacto.

Tomo asiento a lado mío y nos dedicamos a esperar o que dieran señales de vida.

Una hora, dos horas....y seguía sin saber nada, mis párpados ya no podían mantenerse abiertos. Eran las cuatro de la madrugada y mas todo lo que lloré el cansancio se estaba apoderando de mi cuerpo.
Andrea sé encontraba en uno de los sofás ya dormida y aún mantenía a Maximiliano a lado, no me había soltado la mano y cada que podía lo miraba sin que el se diera cuenta.

De un momento a otro recargue la cabeza en la pared y trate de descansar un poco, mis párpados sé cerraban.

-Acomoda tu cabeza en mi hombro, tendrás una mejor postura para descansar.-Negué con la cabeza.-Anda.-Maximiliano tomo con cuidado mi mentón e hizo que recargará mi peso sobre el de él.

-Gracias.-Susurré mientras poco a poco iba hundiéndome en el sueño.
••••••

Unas caricias en mi cabeza y unos sollozos me despertaron, abrí los ojos y los cerré inmediatamente a causa de la luz. Volví abrirlos y me encontré con la mirada de Maximiliano, pero enseguida esos sollozos volvieron a tomar mi atención.

Me levante de un salto y me encontré a mi abuela sentada en el sofá mirando hacia el suelo y sollozando, fui hacia ella y me senté a su lado.

-¿Cómo está mi abuelo?- Le acaricie la espalda y prestó toda su atención en mi.

-Los doctores hicieron lo que pudieron, sin embargo tu abuelo ya tenía muy avanzada la enfermedad y cuando lo estaban operando su corazón dejo de latir.

-¡No!.-Exclamé y cubrí con mis manos mi cara mientras que de mis mejillas volvían a caer lágrimas.- Le dije que no me dejará, que era lo que yo más quería en este mundo.-Lloriquee, los labios me temblaban.- Ustedes me salvaron de pequeña, el soñaba con verme casada y con hijos y me prometió jamás irse, que el daría lo posible por quedarse.-Perder a un ser querido que tanto quieres es como si te estuvieran dando puñaladas en el corazón, era peor.

El era mi padre y siempre fueron un gran ejemplo para mi.

-Yo lo sé hija, pero solo dios sabe porque hace las cosas. Te aseguro que ahora tu abuelo esta mucho mejor allá arriba, es un ángel que desde aquí te cuidará.-Mi abuela trataba de hacerse la fuerte, pero se que a ella le dolía más que a mi puesto el fue su gran amor.

-Tendre que pedirle dinero a la señora Maite para cremarlo y llevarlo al cementerio.-Respiré tratando de calmar mis sollozos.-Mi abuelo merece estar en un lugar tranquilo y sabes que esos lugares suelen ser un poco caros.

-No se preocupen, yo puedo ayudarlas.-Maximiliano estaba al otro lado y nos miraba a las dos con tristeza.- Me encargaré de eso y hoy mismo tendrán todo listo, lo siento mucho.-Se fue hacia el otro extremo hacer unas llamadas.

Mi abuela y yo permanecimos abrazadas, yo le estaría eternamente agradecida a nis abuelos ellos si tenían corazón y jamás me dejaron desamparada, no como mis padres que ni siquiera me quisieron y me abandonaron por que sí.

•••••••••
¡Actualización Nocturna de nuevo! ¡Yeih!
Les aseguro que casi sé me salen las lágrimas al escribir este capítulo, esto es tan duro para Angelina y su abuela Melisa, sin embargo que pensará Maximiliano?
Dejen sus comentarios y lindos votos :)

Espero que les guste este capítulo aunque es un poco triste, tengo una nueva historia publicada que se llama "Pérdida" ya esta el prólogo y mañana subiré nuevo capítulo, espero que se den una vuelta y me digan su opinión.

Pronto todo en la vida de cada quien cambiará y el secreto de Angelina saldrá a la luz, besos.

Redes sociales : @wattpadvictoria.

Triunfo del Amor © (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora