Al día siguiente Angelina se levanto un poco tarde, pero aun exhausta; no era para menos, esas confesiones y emociones la cansaron mucho.
Se dio una ducha de agua caliente para relajarse un poco, al salir se colocó la toalla como un turbante en la cabeza y mientras se hidrato la piel, colocó una bata mientras decidía que ponerse. Opto por algo sencillo, pero elegante; hoy iría nuevamente a la empresa de Maximiliano para hablar.
Cuando termino ya de arreglarse bajo a desayunar, su abuela como era costumbre no estaba, pero le había dejado el desayuno hecho. Esa mujer siempre sería su madre, admiraba el como era y su radiante sonrisa apesar de todas las circunstancias. Tomó un taxi y le indicó la dirección de la empresa, en el trayecto ella se dedicó a admirar lo bello que era el lugar, personas caminando apuradas por ir al trabajo, mamás con niños para llevarlos a la escuela.
Sonrió con nostalgia, ella sería una de esas madres si tan solo tuviera a su hija. Al llegar a la empresa no quiso que la anunciarán, quería darle una sorpresa a Maximiliano.
Toco en su oficina y segundos después abrieron la puerta, enfrente de ella se encontraba él, la persona que le quitaba la respiración; Angelina se quedo observándolo un rato, sus labios, su barba y sus hermosos ojos.
" Vamos, admite que ya estás enamorada de él" su subconsciente hablo por ella y si lo cierto era que cada día que pasaba, sentía algo muy fuerte e imposible de ocultar por ese hombre.
Parpadeo rápidamente para salirse de sus pensamientos, se sonrojo al darse cuenta que paso un rato admirandolo.—Yo... lo siento, estoy un poco distraída.—Angelina le sonrió apenada.
Maximiliano ladeó la cabeza y formo una sonrisa.—No pasa nada, anda siéntate.
Angelina paso al interior y se sentó, él rodeó su escritorio y la observo aún de pie.
—Yo quería hablar de lo de ayer—Angelina miro sus manos y prosiguió.—Siento mucho haber escapado de esa forma de aquí, es solo que como ya sabes, haberme guardado mi pasado durante mucho tiempo me afecto y sé que pensarás que soy una cobarde que huye de sus sentimientos, pero......
Y ya no pudo hablar mas, Maximiliano sé había acercado a ella y la calló besándola, la colocó de pie y ahí en ese pequeño espacio unieron sus almas, sintió que una parte de su corazón por fin se estaba recuperando. Ella lo acerco más y colocó sus manos alrededor de su cuello, Maximiliano la abrazo por la cintura. Ninguno planeaba separarse y es que Angelina sentía como dentro de ella la emoción y cosquilleo la abundaba.
Se separaron por la falta de oxígeno, juntaron sus frentes y no quisieron soltarse; Maximiliano por miedo a que huyera de nuevo y Angelina por temer que fuera un sueño.
—No dejaré que vuelvas a huir de nuevo.—Él susurro a un centímetro de sus labios.
—Por favor, dime que esto no es un sueño, porque si es así no quiero despertar.—Maximiliano le respondió besándola de nuevo, demostrándole así que no era un sueño.
Angelina estaba temblando y sintiendo que caería de rodillas si no se agarraba bien de él, disfrutaba sus besos y eran como una droga para ella. Ya no ocultaría lo que por el sentía, se dejaría querer.
—Angelina estas temblando, ¿estás bien?— sé separaron, acortando ese momento tan mágico que habían vivido.
—Si, solo que aún no me creo que sea real.—Sonrieron los dos como unos niños, se sentían unos adolescentes encontrando a su amor.
Se mantuvieron abrazados un rato, Maximiliano absorbiendo su aroma, y Angelina sintiéndose amada y protegida por el.
—Vamos a sentarnos, parece que caerás en cualquier momento.
Ella asintió y tomaron asiento uno a lado del otro, el la mantenía pegada a él y ella se recargo en su pecho.
—Me duele un poco la cabeza y tengo calor, lo mejor será que me vaya a casa.—sé sentía cansada y débil.
—Tal vez pillaras un resfriado por la lluvia de ayer, vamos yo te llevo.
Angelina asintió, solo porque no quería alejarse de él, quería pasar mas tiempo a su lado. Salieron abrazados y fueron hacia el estacionamiento, Maximiliano le abrió la puerta de copiloto y ambos pusieron rumbo hacia la casa.
Se detuvieron en el semáforo y él la miro, ambos conectaron sus miradas, los ojos chispeantes y radiantes de Angelina. Eran gracias a el cariño que le proporcionaba y le regalaba.
—No te lo he preguntado yo, así que.... —comenzó hablar—¿Lo intentamos, cariño?
Ella al escuchar esas palabras, casi se derrite, no se lo creía; era mas que un sueño para ella.
—Claro que si.—Grito emocionada y Maximiliano no hizo más que reír por su expresión, parecían unos tórtolos.
Ahora era oficial, ellos dos mantenían desde ese precisamente momento una relación, que harían lo que fuera para que durará mucho tiempo; si era posible, por toda la vida.
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Dios sentí cada uno de los sentimientos que en este capítulo transmiten, perdonen la demora pero espero que el capítulo les guste tanto como a mi.Me da tanta emoción que ya este par tenga una relación, me muero de amor ❤ Las/ os quiero muchísimo.
Me emocionaría mucho saber que tal les esta pareciendo la historia, hace tiempo que no comentan nada y las extraño de verdad 😢 pero no las puedo obligar a nada.
Un beso y espero que todo este mejor en Ecuador, lamento mucho lo que paso, pero desde acá de México les mando mucha fuerza y bendiciones. Con todo mi cariño espero que todo se resuelva pronto 😘
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Triunfo del Amor © (Borrador)
RomanceAngelina es una mujer pobre y a vivido todos estos años con sus abuelos, sus papás la abandonaron cuando ella era pequeña, es un poco fría y seca, vive en un campo y la mayoría del tiempo la pasa sola. Maximiliano un hombre con mucho dinero pero co...