31 dias MaxLey

Cansado

Cansado, así era como se sentía en estos momentos Bradley. La razón: estaba acorralado, escuchando un discurso nivel sermón de iglesia por parte de su abuelo, quien se había presentado en la universidad como último recurso al no poder localizarlo tras su fuga de la casa en New Hampshire, donde había estado con su padre y sus amigos en la casa de la familia Goof. Ahora estaba atrapado en la oficina del decano, recibiendo el sermón más agotador de la historia. Pero regresemos un poco en el tiempo, justo a ese día en la mañana, antes de que todo esto ocurriera.

La mañana comenzó agradablemente, con el suave sonido de la radio despertador de Nathaniel encendiéndose a la hora indicada. La melodía de "Eye to Eye" de Powerline llenaba la habitación, marcando el inicio de un nuevo día.

Bradley abrió los ojos lentamente, sintiendo la vibración del bajo a través del colchón. Se estiró y se incorporó, viendo a Nathaniel y Adam ya en movimiento. Nathaniel estaba frente al espejo, asegurándose de que cada mechón de su rubio cabello estuviera en su lugar perfecto, mientras Adam terminaba de ponerse una camiseta y buscaba sus zapatillas.

-Buenos días, dormilón- dijo Nathaniel con una sonrisa burlona al ver a Bradley desperezarse.

-Buenos días- respondió Bradley, frotándose los ojos y sonriendo. -¿Cómo va la mañana?-

-Con energía, como siempre- respondió Adam, ajustándose los zapatos.

-Vamos, Brad, no te quedes atrás. Tenemos un día lleno de clases- Bradley asintió, sintiendo el ánimo de sus amigos contagiarse. Se levantó y comenzó su rutina matutina, empezando por una ducha rápida. El agua caliente lo ayudó a despejarse y a prepararse mentalmente para el día que tenía por delante.

Al salir del baño, encontró a Nathaniel revisando su agenda y a Adam preparando un par de batidos de proteínas en la pequeña cocina que compartían.

-¿Qué tenemos para hoy? ¿Compartimos clases?- preguntó Bradley, tomando uno de los batidos que Adam le ofreció, asomándose para ver la ordenada agenda de Nathaniel detallando los horarios de los tres.

-Historia Universal con el profesor Higgins, luego Literatura Inglesa y después la reunión del club de debates- respondió Nathaniel, sin levantar la vista de su agenda pero ladeando su cabeza para dejar un beso en la mejilla de Bradley que rió ligeramente avergonzado.

-No olvides la práctica con los de baloncesto por la tarde- añadió Adam, dando un sorbo a su batido.

-Tenemos que estar en forma para el próximo partido de exhibición, nuestra fraternidad va a arrasar en las exhibiciones para los nuevos- Bradley asintió, sintiéndose preparado para enfrentar el día. Mientras se vestía, escuchó la melodía pegajosa de Powerline seguir sonando en la radio, dándole un impulso adicional de energía. Se puso una camisa blanca, unos jeans negros y una chaqueta ligera, completando su look con un par de zapatillas cómodas.

Salieron del dormitorio juntos, charlando animadamente sobre sus planes y expectativas para el día. El campus estaba vivo con la actividad de los estudiantes, todos moviéndose de un lado a otro, preparándose para sus propias jornadas, se separaron en diferentes direcciones para comenzar su día escolar.

La primera clase juntos Historia Universal. El profesor Higgins, un hombre de mediana edad con una pasión evidente por su materia, comenzó la lección con entusiasmo, hablando sobre la influencia de la música en la cultura a lo largo de los siglos. Bradley tomó notas diligentemente, disfrutando del tema.

Después se separaron de nuevo para otras clases de sus propias especialidades, reencontrándose para su segunda clase juntos, se dirigieron a Literatura Inglesa, donde la profesora Mitchell les asignó un análisis de "Orgullo y Prejuicio". Bradley sonrió al recibir la tarea, ya que siempre había disfrutado de la literatura clásica. Nathaniel, por su parte, se mostró menos entusiasta, pero Adam le dio una palmada en la espalda, animándolo a ver el lado positivo.