True Love

Capítulo 15

- ¿Se encuentran cómodas? – Preguntó Azura a Elina y Mariposa.

- Mucho, le agradezco por permitirnos quedarnos en su hogar mientras esperamos.

- No es nada, no me sentiría cómoda dejándolas en ningún otro lugar, además, afortunadamente vivo justo dónde comienza la ciudad de las hadas, así que mañana podrán salir y explorar todo lo que gusten sin que corran el peligro de perderse, creo que eso sería algo de provecho para ambas, así podrías documentar todo lo que sea de tu interés ¿No te parece?

- Así es, espero con ansias conocer todo el encanto de esta ciudad, y evitar posibles mal entendidos o chismes una vez que regrese a Flutterfield.

- Hablando de eso – Dice Azura sentándose junto a ella – Sé que no había ninguna relación entre las hadas mariposa y nosotras, pero aún así, me gustaría ofrecerte una disculpa por no haberlas ayudado con la amenaza de los Skeezites, y entenderé perfectamente si no quisieras ayudarme ahora, pero me gustaría preguntarte algo.

- No tiene de que disculparse, como usted dijo, no había ninguna relación entre nuestros reinos, así que dígame ¿Qué necesita?

- Cuando Laverna atacó, sé que las aves de fuego debieron de haber llegado hasta tu reino y envenenado sus alas, sin embargo la cura no llego hasta allá, pues la hechicera no los visitó, y aun así pueden volar, ¿Cómo es eso posible?

- ¿Aves de fuego? Creo que si llegué a ver algo así hace un tiempo, cuando regresamos a Flutterfield encontramos algunas aves muertas, me parece que los Skeezites habían intentado comerlas en la época en la que pasaban hambre.

- Pero se supone que su piel no es tan sencilla de penetrar, ¿Los Skeezites son tan fuertes?

- Por desgracia así es, pero ¿Puedo saber por qué el interés?

- Por protección. Laverna ya fue derrotada, sin embargo no podemos arriesgarnos a que vuelva a atacarnos si es que llega a liberarse, y si las aves de fuego están a su servicio entonces tendremos que buscar una manera de neutralizarlos antes de que hagan más daño.

- Comprendo, pero con lo que he escuchado de la hechicera, no creo que le agrade la idea de acabar con las aves usando a los Skeezites, además que sería demasiado peligroso para cualquier hada confrontarlos.

- Tienes razón, me temo que esa no será una buena opción, la hechicera jamás pondría en riesgo a ninguna hada, y menos sabiendo lo que esas bestias le harían, aun así te agradezco esta información que me diste, al menos ahora sabemos que las aves pueden tener más debilidades de las que conocemos – Se levanta y le entrega una taza a cada una – Por favor, beban, las ayudara a conciliar el sueño y despertarán con más energías, si necesitan algo más no duden en llamarme.

- Que descanse – Azura sonríe y se va, dejando a Mariposa pensativa.

- ¿Dijo algo que te ofendió?

- ¿Qué? No, no es así, ¿Por qué lo preguntas?

- No lo sé, pareces inquieta.

- Es que creo tener una idea, pero no estoy segura de que la aprueben.

- ¿Quieres explicarme de que trata? – Preguntó atenta.

- Pues, en sí no estoy segura pero ¿Y si Henna les ayuda con el problema de las aves? Antes usó las alas de los Skeezites para un tipo de medicina, pero no pudo darle continuidad debido a su condición, pero ella conoce a los Skeezites más que nadie, y si los dientes de los Skeezites son capaces de atravesar la piel de las aves, entonces ella podría encontrar una manera de usarlos sin necesidad de hacer que ambas especies peleen.