Capítulo 16

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- Buenos días Azura – Dice Elina sonriente.

- Buenos días para ti también, ¿Tu amiga aún no despierta?

- No, y espero que no lo haga pronto, me parece que necesita tomar una larga siesta.

- Ya veo, si es así podría ponerle un trapo sumergido en una infusión de hierbas calmantes, eso la ayudaría a tener el sueño aún más profundo.

- Te lo agradecería mucho Azura, y estoy segura de que ella también.

- Entonces lo hare, pero dime, ¿Por qué tú estas despierta tan temprano? El sol aún no ha salido querida.

- Quiero ayudarla lo más que pueda, así que iré a explorar lo posible y escribiré sobre ello. Puede que no sea la descripción más precisa, pero yo tampoco conozco esta ciudad, y creo que el tener más de una perspectiva sobre el entorno puede hacer una gran diferencia.

- Que noble de tu parte Elina, quisiera invitarte a desayunar conmigo primero, pero asumo que no podré convencerte de ello ¿O me equivoco?

- No, estas en lo correcto, quiero aprovechar lo más que pueda este día, y no creo que haya mejor oportunidad para empezar que escribiendo sobre el momento exacto cuando salga el sol.

- Siendo así, entonces al menos permíteme entregarte algo de comida para que no te de hambre en el camino, y esta vez no aceptaré un no por respuesta – Antes de que Elina respondiera, Azura ya había ido por la comida, obligándola a esperar.

- De acuerdo, de todas formas no planeaba negarme.

En Shimmervale Catania y Henna se encontraban juntas haciendo un chequeo general, junto al médico real, para asegurarse de que todo estuviera bien en el embarazo.

- Todo esta bajo control, no encuentro ninguna anomalía con su bebé su majestad, no tiene de que preocuparse.

- ¿Está seguro? Anoche sentí un dolor más fuerte de lo normal.

- Majestad el bebé está comenzando a moverse, y eso puede causarle dolor, cada vez peor a los anteriores, es perfectamente normal.

- Henna, ¿Tú que opinas? – Pregunta nerviosa.

- Opino que debe escuchar al médico, yo solo tengo los conocimientos, pero él también cuenta con la experiencia, y le doy la razón, es completamente normal alteza.

- Ya te he dicho que no es necesario que me hables con tanta formalidad, somos amigas después de todo, y está bien, si tú lo dices entonces confió en que todo va bien con mi bebé.

- Así es, sin embargo su alteza, ya es hora de que comience a consumir alimentos que ayuden al desarrollo del bebé, pero me preocupa que la dieta de las hadas de cristal y las hadas mariposa durante un embarazo no es la misma – Henna golpea al médico con pie disimuladamente.

- Pero entre ambos encontraremos una dieta apropiada tanto para que el bebé como usted – Ante la mirada insistente de Catania, accede a tutearla sin más remedio – Corrijo, tanto tu bebé como tú, se encuentren en la mejor de las condiciones; pero debes dejar de estresarte por el más mínimo detalle, eso puede hacerle daño.

- Lo siento, es solo que no esperaba que fuera tan difícil lidiar con el embarazo sin la ayuda de mi padre – Dice con melancolía y pena – Él siempre soñó con el día en que se convirtiera en abuelo, y ahora... Ahora debo de mantener la calma por mi bebé, tal y cómo él quería ¿Verdad?

- Así es. Retírese y espere afuera, necesito que hablemos sobre la dieta de manera inmediata – Dice Henna refiriéndose al médico, quien acata sus órdenes con apuro – Pero eso no significa que tengas que retener tus emociones tampoco.

- No te preocupes, una vez que nazca el bebé tendré todo el tiempo disponible para permitirme sentir cómo necesito sin que afecte a mi hijo o hija – Acaricia su vientre con ternura, soltando una lagrima de felicidad y una radiante sonrisa al sentir como su bebé patea – Ya quiero saber que es esta bella criaturita que no me deja descansar, tal parece que heredo la impaciencia de su padre, o tal vez del mío.

- Y yo espero que solo sean reflejos y herede de usted todo su carácter y temperamento – Dice en voz baja, riéndose al notar que Catania la escucho – Ya, perdón, por cierto ¿Han elegido ya un nombre?

- No realmente, pensábamos que se podría llamar Marabela si es niña, o Regellius si es niño, pero ninguno de los dos está preparado para eso, así que solamente decidimos que esos nombres están descartados definitivamente.

- Pues deberían de darse prisa el elegir, parece una pequeña hada inquieta que ya quiere salir, y al ser de la realeza debe de nacer ya con un nombre.

- ¿Pequeña hada, crees que será una niña?

- Digamos que tengo una idea, entre las madres y parteras se han dado cuenta que el tamaño y forma de la panza puede ser un indicador del sexo del bebé, no es información segura ya que muchas veces falla, pero es una probabilidad.

- Ya veo, entonces me concentraré más en encontrar el nombre ideal para la futura princesa – Dice sonriente – Aunque creo que Mariposa podría ayudarme con esto, ¿Sabes cuando regresará?

- No, decidió quedarse unos días más con su amiga Elina – Respondió fríamente.

- ¿Aún siguen sin hablar tanto? – Preguntó preocupada.

- Ella decidió alejarse de mí, aunque no lo admita es más que evidente, y no la culpo, así que pienso respetar su decisión.

- Puedo asegurarte que no es así – Toma la mano de Henna con delicadeza como muestra de apoyo – Mariposa ha pasado por mucho, y por primera vez en mucho tiempo esta tomando un descanso, estoy segura de que apenas vuelva ustedes dos podrán hablar y entonces deberás expresar tu pena al sentir su ausencia.

- Se lo agradezco su alteza – Ante la formalidad, Catania hizo una mueca de desagrado – Lo lamento, pero cuanto más la conozco más puedo ver su lado sabio y amable, eso hace que la respete más y así no me siento cómoda tuteándola, sin embargo puedo asegurarle que pese a eso genuinamente la considero una gran amiga.

- De acuerdo, no quiero provocarte ningún tipo de incomodad, así que consiento que me llames por usted.

- Se lo agradezco su alteza, ahora por favor duerma un poco, necesita descansar; yo iré con el médico para planear su dieta – Antes de salir Henna haría una reverencia – Entonces, ¿Tiene alguna idea sobre que podríamos hacer para que la reina se encuentre en el estado más óptimo para su embarazo?

- Así es, no es algo común ni fácil de conseguir, pero hace poco se comenzó un estudio sobre las abejas, y encontré información interesante sobre la miel que producen y su polen, basándome en ello creo que sería una buena opción considerando el estado en el que se encuentra la reina y el bebé.

- Mande a alguno de sus ayudantes a mi biblioteca privada, junto a toda la información que posea de las abejas, quiero cerciorarme de que sea algo seguro. Si lo considero apropiado, yo misma me encargare de diseñar un plan de recolección de dichos alimentos para que se le entreguen a la reina.

- Cómo usted guste – El médico estaba apunto de retirarse, pero fue fuertemente sujetado del brazo por Henna, poniéndolo incómodo de inmediato – ¿Necesita algo más?

- Así es – Afirmo con frialdad, formando rápidamente un ambiente tenso – La reina es muy consciente de que su bebé es el producto de dos razas diferentes de hadas, no necesita que se le recuerde constantemente dicho hecho, eso solo podría afectar su salud mental, provocándole más estrés y angustia – Henna apretaría con mas fuerza el brazo del médico, provocándole dolor y una evidente marca – La próxima vez mide tus palabras cuando estes ante la reina.

El médico trago saliva, limitándose a asentir con la cabeza debido a la intimidante mirada de Henna; ante dicho acto ella lo soltaría, permitiéndole irse temblando levemente.

True LoveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora