Había pasado una semana, mi salida con a Jimin fue muy divertida, me sentía cómoda con él pero quise ser sincera, él es un chico realmente guapo, atractivo, simpático tiene todo lo que una chica quisiera, pero yo lo veo más como un amigo.
Me entendió y quedamos como buenos amigos, pensé que tal vez lo había dicho para no hacerme sentir mal, pero desde ese día nos llevamos aún mejor.
— Hola Jiminnie —sonreí.
— Hola Tn, ¿como dormiste?
— Bien ¿y tú?
— Dormí bien, pero creo que faltó mas por dormir.
Solo reí por lo que dijo y entramos al salón, vi a Taehyung sentado recargado en su banca, con razón no lo vi esta mañana.
— Tae ¿qué haces tan temprano? —preguntó Jimin.
— Nada, pasé a casa de Jennie —nos miró— Ya terminé con ella.
Ambos nos miramos pero no nos sorprendimos, anteriormente nos había contando que ya no se sentía a gusto en esa relación, y que ella comenzaba a ser muy tóxica y le reclamaba hasta por respirar.
— Fue lo mejor amigo, solo se hacían daño los dos.
— Pienso lo mismo que Jimin —dije.
— Lo sé, fue la mejor decisión que tomé —ahora me miró.
Poco a poco el salón se fue llenando y finalmente llegó el maestro.
Comenzó a explicarnos unos ejercicios que no terminó la clase pasada.
Las horas pasaban y yo ya moría de hambre, no desayuné en la mañana.
El timbre nunca me había alegrado tanto, los tres salimos del salón y fuimos a la cafetería, ahí nos encontramos a Jennie y sus amigas, pero Tae la ignoró.
Puesto que ella se estaba acercando a él para hablar.
— Pidamos nuestro almuerzo y comamos en las mesas del jardín.
Los dos asentimos y fuimos por nuestra comida.
Jimin me veía y yo veía a Jimin, queríamos decirnos mucho pero por respeto a Tae decidimos no hablar.
— Ay ya moría de hambre —dije cuando di el primer bocado.
— ¿No desayunaste? —preguntó Tae.
— No —hice un puchero.
— Traía una leche de banana ¿por qué no me pediste?
— No me gusta —reí.
— ¿Que? —ambos gritaron.
— ¿Te estás escuchando Tn? —dijo Jimin.
— ¿Que pasa?
— No puede no gustarte la leche de banana, es lo mejor que hay.
— Prefiero la de fresa —me alcé de hombros.
— Bien, a partir de mañana traeré una de fresa para Tn —dijo, mientras sacaba las dos leches de banana y le dio una a Tae quien recibió gustoso.
— ¿Que harás con la otra? —pregunté.
— No lo sé, yo ya estoy lleno, ¿y tú Tae?
— Ya no puedo con algo más —se rió.
— Niño, niño —le habló a un niño que estaba en la mesa de enfrente, estaba solito.
— ¿Me hablas a mi? —se señaló.
— Si, ¿quieres leche de banana?
— Eeh, si —sonrió y se paró a nuestra mesa para tomarla— Gracias.
— De nada.
— ¿Como te llamas? —pregunté
— Jungkook —sonrió.
— ¿Y por qué estás solito?, ven con nosotros —volví a hablar.
— Gracias.
Fue por sus cosas y se sentó con nosotros, nos contó que va en primer año, y no tenía amigos por qué era muy tímido y le costaba relacionarse con otros. Pero con nosotros habló muy bien, supongo que le generamos confianza.
— Genial, ahora traeré cuatro leches —dijo Jimin.
— No olvides que la mía es de fresa.
— Lo se pequeña, lo sé —revolvió mi cabello.
Entramos a nuestro salón para recibir las últimas clases, ya pido concentrarme mejor, no tenía hambre.
Al final nos despedimos de Jimin, y Tae esperó conmigo hasta que llegó mi hermano y ambos subimos al coche.
— ¿Les fue bien hoy?
— Si, supongo que mejor que otros días —dije.
Llegamos a casa y me despedí de Tae, quien cruzó la calle para ir a la suya.
Mamá estaba sentada en el sofá mientras leía algo en su celular.
— Ya llegamos mamá. —dijo mi hermano.
— Que bueno, vayan a lavarse las manos para comer.
Fuimos al baño de abajo y estábamos peleando por quien lavarse primero.
Al final gané yo, volvimos a la sala y mamá estaba sirviendo la comida, se veía preocupada, pero no quise preguntar.
— ¿Mamá que pasa? —creo que a mi hermano le ganó la curiosidad.
— Nada hijo, solo que tengo que viajar el viernes a Daegu.
— ¿A qué vas? —pregunté yo.
— Necesito ir a hacer unas cosas —miró a Yoongi.
— Mamá, yo tengo que viajar también el viernes, estaré el finde semana fuera —dijo mi hermano.
— ¿Y yo?, no me quiero quedar sola —bajé la mirada.
— Puedo cancelar el viaje —dijo Yoon— Pero perdería los puntos de la materia.
— No hijo, ve a ese viaje, creo que Tn puede quedarse con los Kim.
— Podría ser —dije y sonreí.
Solo a mi mente se vino la palabra "pijamada", una vez hicimos pijamada en la casa de Tae cuando éramos niños y recuerdo que esa noche nos divertimos mucho.
— Entonces hablaré mañana con los Kim, pero Tn, si ellos aceptan, no puedes salir de casa, no tienes permiso para salir a menos que sea con los padres de Tae o con Tae y que sea temprano.
— Si mamá.
— Bien, sigamos comiendo. —sonrió.
