Es misma noche Victoria había regresado a su casa antes de las once. Entró al edificio donde se hospedaba y se encontró a Marcus de brazos cruzados mirándola con seriedad.
–¿Todo bien? –. Preguntó confundida al ver la mirada seria del moreno.
–¿Dónde estabas? –. Interrogó el adulto agarrando los hombros de ella–. Un policía vino hoy y tu departamento estaba hecho un desastre, ¿Qué sucedió? ¿Pasó algo? ¿Estás herida?
–Tranquilo Marcus –. Sonrió con cariño–. No pasó nada grave.
–¿Nada grave? Mira tus brazos –. Dijo dejando de agarrar los hombros de ella–. ¿Por qué están vendados?
–Solo resbalé y caí por las escaleras, nada grave –. Contestó alejándose lentamente.
–¿Te caiste por las escaleras de incendios? –. Preguntó con seriedad y exigencia.
–Oh mira la hora, ya es tarde, voy a dormir.
–Mm...
Al otro día. El día había llegado. Todos estaban ansiosos. La pierna de Hannah no dejaba de moverse debajo del pupitre. Cleo daba leves golpeteos en la mesa con su lápiz. Eva golpeteaba la mesa con sus uñas, Dylan miraba el reloj cada cinco segundos y Victoria mordía el cuello de su remera suavemente.
Faltaban tres minutos para que la clase terminara y los cuatro observaban el reloj sin pestañear.
–Vayan guardando sus cosas así pueden salir –. Indicó la profesora de literatura.
Ellos fueron los primeros en guardar las cosas como si todo dependiera de ello. Agarrón sus mochilas y se levantaron rápidamente de sus asientos, sus demás compañeros salieron del salón y ellos parecía desesperados por salir.
Bajaron las escaleras y caminaron rápidamente por los pasillos. Los conserjes abrieron las puertas y salieron rápidamente encontrándose con Owen.
Se saludaron todos y se fueron al taller de Ryan.Mientras iban caminando hablaban nuevamente del plan. Tenían sus celulares con batería y lo más importante, estaban tranquilos, más o menos.
Dylan abrió la puerta para que entraran y vieron al azabache haciendo cosas de hackers en las computadoras.Los demás dejaron sus cosas cerca del escritorio y se prepararon mentalmente para lo siguiente.
–Aqui están lo comunicadores –. Entregó Ryan los pequeños micrófonos–. Para las chicas será más fácil ocultarlos por el hecho del cabello largo, pero de igual forma, nosotros no estaremos presentes en ese momento asi que no será problema, exepto por tí Victoria.
–No te preocupes, veré la forma de ocultar el micrófono –. Dijo sin problemas la castaña.
–¡Oh!, he visto que en algunas películas las chicas usan aretes conectados a los micrófonos para evitar que se los vean, ¿Qué dices? –. Sonrió Eva energéticamente.
–Suena bien, pero no uso aretes –. Comentó Victoria con una sonrisa divertida.
–Es cierto –. Chasqueo la lengua Eva.
–No importa, lo único importante aquí ahora es que ustedes vayan conmigo y que Sebastián no los vea.
–¿Podemos repasar el plan otra vez? –. Pidió Owen.
–Claro –. Asintió Victoria–. Iremos juntos hasta el bosque, una vez que estemos cerca del invernadero ustedes se separaran de mi e irán por detrás sin que Sebastián los vea. Yo seguiré mi camino y me encontraré con él cara a cara, los distraeré un momento mientras ustedes buscan a Matteo y luego nos vamos.
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El Hacker: Código de Rescate ©
RomanceAdéntrate en la emocionante aventura de "El hacker: código de rescate", donde nada es lo que parece y la confianza se convierte en el arma más poderosa. Sigue a Victoria, una joven valiente dispuesta a arriesgarlo todo para salvar a su hermano, mien...