CAPÍTULO VII - SOY UN DEMONIO

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Eran las cuatro de la mañana, en el corredor de las habitaciones se podía observar como al final del pasillo él como los dos últimos cuartos se encontraban con las luces encendidas. dentro de cada habitación podemos notar como cada uno daba su mejor esfuerzo para estar listos en la hora acordada.

Kai se encontraba cambiándose a toda velocidad, en cuestión de segundos se pusó su pantalón de compresión negro, un short del mismo color al igual que las calcetas y unos tenis blancos para correr, sin embargo a la hora de escoger su prenda superior entraba en un dilema sobre sobre la prenda superior, <¿Qué sudadera llevaré?>, se preguntaba.

Mientras que por su parte Maki se encontraba en una travesía escogiendo su ropa, miraba por sus conjuntos, hasta que se decidió por un conjunto, un short negro con mallones del mismo color, unos tenis blancos para correr con calcetas negras altas. Después de ponerse su top deportivo la chica tuvo un problema muy grande, <¿Qué sudadera llevaré?>.

Ambos, al mismo tiempo giraron en dirección a sus camas, donde una sudadera destacaba mucho más que las otras, era una sudadera verde oscura, la misma que a la chica le había gustado tanto.

-Será esta-, dijo cada uno desde dentro de su habitación.

Kai se colocó su pasamontañas, sus lentes y guantes, salió en dirección a la entrada de la escuela dado que ahí se verían con Maki.

La chica simplemente se colocó sus lentes y esperó a escuchar que la puerta de su compañero se abriera, para salir ella después que él.

Kai llegó al punto de encuentro y solo tuvo que esperar unos cuantos minutos para que la joven llegará, cuando ambos se vieron a lo lejos no pudieron evitar sentirse felices, sin embargo esa felicidad se transformó en vergüenza cuando se dieron cuenta que se habían vestido iguales.

-¡¿Me espiaste?!-, preguntaron el uno al otro al mismo tiempo.

Al darse cuenta de la reacción del otro los chicos entendieron que fue una simple casualidad, cosa que calmó las aguas...

-¿Esa fue la sorpresa?-, preguntó Kai señalando la sudadera de la chica, -¿Qué compraste otra igual?, porque me encanta-, dijo riendo un poco.

-Sí, algo así-, dijo la chica un poco apenada, -Aunque esto no estaba en mis planes-, dijo ella riendo con un poco de vergüenza.

-A veces las cosas no salen como lo planeas-, dijo el chico mientras ríe.

Después de ese momento rieron un poco más y el chico decidió preguntarle a su compañera sobre cuál sería el entrenamiento.

-Maki, ¿qué haremos hoy?-, preguntó el chico.

-Vamos a hacer algo parecido a un reto-, dijo la chica.

-Te escuchó-, dijo el muchacho.

-Bueno será algo así, iremos a la cima de la montaña-, dijo la chica mientras señalaba la cima, -Vez que el camino tiene seis curvas, ¿no?-.

-Sí-.

-Bueno, cada curva será un punto, el que llegué antes gana el punto-.

-¿Para qué sirve cada punto?-, preguntó el chico con curiosidad.

La joven tembló un poco pero le dijo la función de cada punto, -Un punto sirve para quitarle una prenda ropa o accesorio al otro-, dijo la chica tratando de evitar la mirada del joven.

El chico estaba temblando, <me quiere desnudar, sabe que no podría ganarle>, pensó el joven mientras veía horrorizado a su compañera, cambió su expresión mientras pensaba <Tendré que darlo todo>.

Me gustas. |MAKI x OC|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora