La biblioteca de Hogwarts estaba solitaria y en silencio. El mayor de los Riddle y la joven Zabini agradecieron aquel silencio y soledad para así aprovechar el tiempo juntos.
Tom se deshizo de la ropa de la mujer, dejándola solo en bragas de encaje negras. La observó desde abajo, pues esta estaba en su regazo, deleitándose con las caricias y los besos húmedos que Tom le dejaba en sus tetas y cuello, rozando los pezones de la morena con sus dientes para provocarla, sacándole varios jadeos al momento.
—Joder, qué tetas. —murmuró encantado, tomándolas a ambas entre sus manos para apretarlas y sacarle un gritito a Blair de dolor.
Pero como resultado, su coño se humedeció más. Y muchos más cuando Riddle se metió un pecho a la boca, y comenzó a chuparlo para darle placer a la mujer. Blair lo tomó de la nuca para atraerlo más a ella, en lo que dejaba caricias en las hebras del oscuro cabello de Tom. Gimiendo sin poder evitarlo, y jalando de vez en cuando los cabellos del chico en cuanto este mordiera su pezón con los dientes.
—Tom. —gimió adolorida jalando del cabello del nombrado.
Él sonrió contento. Y tomó la cintura de Blair para comenzar a moverla en su regazo, y que por fin su miembro erecto tuviera contacto con la húmeda entrada de Blair y gruñó contra su teta, llena de saliva. Blair se restregó contra el pantalón de Tom con rapidez para conseguir fricción. Ya su coño no podía aguantar más, palpitaba y quería que Tom la llenara con su polla para apagar el fuego que la quemaba por dentro.
Tom dejó un camino de saliva desde la tetas de Blair y subió por su cuello para dejar marcas. Siguió su camino hasta llegar a la boca de la morena, y besarla brutalmente con lengua y todo. Chupó con desde la lengua de Blair y luego la mantuvo de la nuca para follarla con la lengua. Blair gimió contra su boca.
—Abre. —ordenó seriamente tomando con fuerza el mentón de Blair. Ella abrió la boca como él se lo había pedido y Tom escupió en su boca. Su saliva se deslizó en la boca Blair y ella gustosa lo tragó—. Eso es, buena chica. —sonrió orgulloso atrayéndola hacia él para besar su mejilla.
Blair abrazó el cuello de Tom dejando que él la besara. Y entonces Tom, con su mano derecha bajo por su espalda y nalgueó con fuerza el trasero de la chica, provocándole un sobresalto. Tom rio y siguió con su trabajo. Hizo a un lado la braga de Blair, y metió su dedo corazón en el coño todo húmedo de Blair. Ella gimió ante la intrusión en su feminidad y se aferró a Tom; pegando su nariz contra la mejilla del chico para que pudiera oír mejor sus gemidos.
—Tom... oh. —respiro agitadamente ante las penetraciones de Tom con su dedo en entrepierna—. M—más rápido. ¡Ah!
El chico obedeció de inmediato agregando un dedo más a su cavidad vagina. La follo con los dedos sintiendo lo maravilloso que era que su estrecho coño se tragará con gusto sus dedos y como sus paredes gomosas los apretaban. Blair no quiso perder tiempo y comenzó a desabrochar la camisa de su chico. Se la quitó y de inmediato le desabrochó los pantalones y se los quitó junto a la ropa interior dejándolo expuesto. La polla de Tom salió de un brinco, pegándose a su abdomen. Blair se relamió los labios y se alejó de Tom. Se arrodilló frente a la polla de Riddle mayor y lo tomó entre sus manos, masajeándolo de arriba a abajo.
Tom se acomodó en el sillón de la biblioteca, abriendo las piernas para Blair. Tomó su pantalón y sacó del bolsillo un cigarro y un yesquero y los encendió. Se puso cómodo para ver cómo Blair le iba a comer toda la polla. El mero pensamiento de ella con su pene hasta el fondo de su garganta le creó un espasmo y sonrió apegándose al cigarro y escupiendo el humo al instante.
Blair observó con deseo la punta de la polla de Tom. Estaba roja, y tenía líquido preseminal que brotaba y se deslizaba por toda la longitud de Riddle, hasta gotear sobre la mano de Zabini. Ella pasó su lengua recogiendo el líquido y desgastó su sabor de inmediato. Tom se estremeció ante la calidad de la lengua de Blair y casi se ahoga con el humo del cigarro. Blair está vez beso húmedamente la punta de Tom. Este cerró sus ojos, maldiciendo en voz baja, echando la cabeza hacia atrás.
Blair sonrió ante la reacción de Tom y se lo llevó a la boca. Ahuecó las mejillas para mejor experiencia y pasó su lengua por el glande de Tom. Este suspiró dejándose llevar por las caricias de su morena.
Enamorado de su boca, por lo cálida que se sentía y como lo empapaba con su saliva. Casi se ahoga nuevamente con el humo pero supo controlarlo. Tom llevó su mano a la cabeza de Blair, para acariciar su cabello, y tomándola desprevenida la empujó con dureza para que se tragara toda su polla de una buena vez. Sin poder controlarlo, mantuvo la cabeza de la joven Ravenclaw en su lugar, para comenzar a mover sus caderas y dollar su boca a su antojo. Mordió con fuerza el cigarro con los dientes, gimiendo contra este ante la deliciosa cavidad de su boca.
Aceleró los movimientos de caderas, llegando hasta al fondo de la garganta de Blair, causándole arcadas y que sus ojos se cristalizaran. Fue cuestión de tiempo para que Tom se descargara en su boca. Blair como pudo, debido a que era una gran cantidad, se lo tragó.
—Bien, mi amor. Ven aquí. —palmeó su regazo, incitándole a que se sentara sobre él.
Ella relamiéndose los labios, saboreando el semen de Riddle. Blair se levantó y se sentó a horcadas sobre Tom y este de inmediato la beso, quitándole los restos de sus propios fluidos que caían por sus labios y mentón, saboreándose a sí mismo. El caso era que en cuanto ella estuvo sobre él, las bragas húmedas de Blair rozaron con el miembro expuesto de Tom y ambos gimieron contra los labios del otros.
Tom de inmediato tomó la braga de Blair y la bajó lentamente dejándola desnuda finalmente. Sin dejar de besarla y finalmente estando desnudos los dos, rozó la punta de su polla contra los pliegues húmedos de la entrada de Blair y ambos jadearon ante el contacto.
Y para mala suerte de Blair, Tom los volteó, dejándola sentada en el sillón de la biblioteca mientras él alzaba su pierna sobre su hombro y le besaba la pierna. Antes de que él pudiera embestirla, Blair lo detuvo.
—C—creí que yo podría...
—¿Estar arriba? —la miró desde arriba burlón—. No será hoy, muñeca. —hizo un falso puchero. Blair iba a replicar pero Tom metió su miembro en su agujero sacándole un grito de sorpresa y él jadeó—. Tan estrecha. —dejó caer su cabeza sobre la pierna de la morena.
No perdió tiempo y comenzó a embestirla con dureza y no se preocupó por lo altos gemidos que Blair soltaba. Folló su agujero sin cuidado y con rapidez.
—Tan deliciosa, muñeca. Como me encantas. —gruñó apretando su agarre en la cadera de la mujer.
—¡Tom! —chilló cerrando los ojos con fuerza debido al placer—. Voy a correrme.
—Yo igual. —contestó jadeando.
En poco tiempo, y después de un par de embestidas más, ambos se corrieron al mismo tiempo, compartiendo fluidos. Se besaron una última vez y se vistieron con velocidad, para irse a la habitación de la mujer a continuar lo previo.