♡̶ Pequeño Rayo De Sol﹙𝐉𝐞𝐟𝐟𝐁𝐚𝐫𝐜𝐨𝐝𝐞﹚🍀 ੭

~Capítulo:39~

Jeff llegó a la tienda, buscando a Barcode con ansiedad. Pero cuando entró, solo vio a un chico parado detrás del mostrador.

—Hola— saludó Jeff, observando toda la tienda, esperando ver a Barcode en algún lado. Pero no lo vio.

—¿Está Barcode?—preguntó Jeff, acercándose al chico. El chico negó con la cabeza.

—No, no está aquí. Hoy atiendo yo— respondió con una seriedad —¿Usted necesita algún traje?— preguntó el chico, intentando distraer a Jeff.

—No, no necesito un traje— respondió Jeff. —Solo quiero hablar con Barcode. ¿Puedo esperarlo?—pregunto El chico asintió con seriedad.

—Sí, puede esperarlo.—Dijo

El chico desapareció en la parte de atrás de la tienda y Jeff se quedó solo, esperando.

Barcode vio a Ta y sonrió vio que Jeff seguía ahí y se escondió no tenía gana de hablar con el se sentía mal todavía

— está ahí todavía—preguntó, refiriéndose a Jeff. Ta asintió

—si él está ahí todavía. Preguntó por ti, quiere hablar contigo.

Ta había oído a Barcode llorando en la parte de atrás de la tienda fue por un traje pero no había nadie entró después de oírlo barcode  estaba ahí Se habían sentado a hablar un momento Después de un rato Barcode le pidió un favor a Ta. Dijo "Por favor, Ta, atiende a Jeff. No le digas que estoy aquí" el solo dijo que "si"

Ta y Barcode estuvieron atrás un rato, hablando en voz baja y tratando de no hacer ruido. Hasta que de repente, Jeff llamó desde la parte delantera de la tienda.

—Hola Chico—hablo, Ta  se levantó y volvió con Jeff.

—Sí, estoy aquí. ¿Qué necesitas?—

—Puedes decirle a Barcode, si viene, que necesito verlo. Estaré en casa de Mile— dijo Jeff

—Bueno, se lo diré—dice él.

Jeff se dio la vuelta y se fue de la tienda, sin saber que Barcode estaba escondido en la parte de atrás, escuchando toda la conversación. Ta regresó con Barcode y le repitió lo que Jeff había dicho.

—Entonces Ya se fue, Jeff se fue. Me podrías dar mi traje, me tengo que ir—Barcode se levantó y fue a buscar el traje de Ta.—Ya te hice el favor, ahora me debes un favor—le dijo Barcode sonrió

—Sí, te debo un favor. Lo pagaré cuando quieras—Barcode le entregó el traje a Ta y se despidieron.

Barcode se sentó en una silla, con la mirada fija en la puerta de la tienda. Estaba sumido en sus pensamientos, recordando la conversación con Jeff y sintiendo una gran tristeza. Andaba deprimido, sin saber qué hacer ni cómo salir de ese estado.

Mientras miraba la puerta, comenzó a sentir sueño. Sus ojos se fueron cerrando poco a poco, sin que se diera cuenta. Su cabeza se inclinó hacia adelante y se quedó dormido, exhausto por la emoción y la tristeza.

Pasaron la hora y Barcode despertó poco a poco. Se dio cuenta de que había oscurecido y bostezó, recordando que no había dormido anoche. Se sentó derecho.

—Al fin despertaste— dijo una voz a su lado.

Barcode se asustó y miró hacia la voz. Se encontró con Jeff sentado a su lado, mirándolo con una sonrisa.

—¿Qué... qué estás haciendo aquí?— tartamudeó Barcode, sorprendido y confundido.

—Aun no me iba estaba afuera tratando de llamarte pero ví que ese chico se fué en su auto resultó que no trabaja aquí mire adentro estabas profundamente dormido.

—¿Qué hora son?—preguntó Barcode, todavía un poco confundido.

—Son las 8 de la noche—respondió Jeff.—No vino nadie porque puse el cartel de cerrado Quería verte.

—Amm, bueno, hablemos—dijo Barcode

—Necesitaba verte, saber cómo estás— dijo Jeff, mirándolo con preocupación. —No quiero irme sabiendo que estás triste.—Barcode se encogió de hombros.

—Aunque me dolío lo que me habías dicho, ya lo superaré. Estaré bien— dijo, sonriendo débilmente.

—Perdón por dejarte, pero sé que serás feliz. Te amo, Barcode. Ahora y siempre—dijo Jeff, con la voz quebrada por la emoción.

Barcode no le dirá nada pero siempre lo esperaría no se fijaría en nadie más siempre esperará a Jeff aunque no se lo dirá

—Igual te amó, Jeff. Siempre te voy a apoyar en todo, y si en tu nuevo hogar eres feliz, pues yo también—dijo Barcode, sonriendo a punto de llorar.

Pero fue Jeff quien no pudo evitar las lágrimas. Se abrazaron fuerte, ambos llorando por la tristeza de la despedida, pero también por la alegría de saber que su amor era eterno.

En ese abrazo, se prometieron que siempre estarían juntos, en el corazón y en el espíritu, sin importar la distancia o el tiempo que pasara.

Y así, Jeff se fue, sabiendo que dejaría una parte de su corazón con Barcode.