8.🍁

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Muy temprano por la mañana Seokjin miraba la carpeta amarilla que había sido dejada en su escritorio la noche anterior por el asistente de Taehyung, pero por más que quisiera concentrarse no lograba hacerlo, las palabras de ___ todavía siguen clavadas en su mente y aunque ha pasado una semana de lo sucedido no puede olvidarlo. Creyó que las cosas serían fáciles y tendría la oportunidad de estar con ella, pero se equivocó, ella no quería saber nada de él.

Le había dicho cosas muy injustas, que se fuera y no volviera jamás, no obstante, su fría manera e indiferencia al tratarlo. Aquello heria algo en el, pero a fin de cuentas tendría que aceptarlo.

Después de que fue dada de alta y se haya ido por cuenta propia en un taxi, no ha vuelto a pararse por hay, pues lo menos que pretende es incomodarla.

Seokjin mira la ciudad frente a él, pero realmente no lo hace, en su mente solo vaga la imagen de ___. Esta ansioso y como no hay nada que hacer respecto a su patética situación, decide sacar su móvil y mirar a la mujer de la foto.

Ella sonriendo y él simplemente no puede más que quedarse con esa imagen porque no había más por hacer. Sin embargo, algo dentro de él le hace saber que debería verla siquiera por última vez para poder soltarla y continuar con su camino.

De algún momento a otro, el pelínegro ya hacia conduciendo hacia el departamento de la castaña, sin importar las consecuencias que podría ocasionar si Ji-hyo llegase a verlo. Ya no le importaba ella, ni lo que pensara o diría, solo quería ver a ___ por última vez.

Al llegar todavía estaba mirando hacia la nada con el motor del auto aún encendido ya que la duda sobre si debería entrar a ese edificio lo atacó, pues no quería por nada del mundo que ella lo volviese a despreciar, pero el miedo no debía ser más grande que su anelacion por lo que bajo apresurado y coloco en seguro automático del auto, a prisa entro al enorme edificio.

- Buenos días, Señor.

Únicamente asintió en compañía de una reverencia cuando el guardia de seguridad lo saludo amablemente, dándole la bienvenida.

Al salir del elevador y estar lo suficientemente cerca de la puerta del departamento de la castaña, pudo darse cuenta que estaba entre abierta como si alguien estuviera a punto de salir y enseguida la voz de Ji-hyo se escuchó, al parecer estaba en medio de una discusión, pues estaba gritando..

~

La última vez que había mirado al pelínegro fue hace una semana, donde le dejo en claro que no quería volver a verlo o saber de él. Había sido egoísta, lo sabe, pero no iba a permitir que interfiriera en su vida y mucho menos en la de su bebé. Se notaba que era un hombre importante y por eso mismo, no quería que se involucrará con alguien tan simple y común como ella. Sabe que estuvo mal al no decirle que esta esperando un hijo suyo, pero era lo correcto. Además, no soportaría que su bebé no fuese aceptado por ser concebido a causa de una aventura y fuera del matrimonio, seguramente los padres del pelínegro jamás lo reconocerían.

Tampoco desea que ese hombre cargue con una responsabilidad que no quiere, quizás no estaba en sus planes ser padre y nunca lo estaría. A pesar de que tampoco ella se visualizo siendo madre, iba a sacar adelante a su bebé y lo protegería incluso de él mismo.

Con el pasar de los días pensaba en como hacerle saber a Ji-hyo sobre su embarazo, pues desde aquella discusión las cosas con ella no han ido nada bien. Lamenta lo sucedido y por más que le hacía saber que su intención nunca fue arruinar su cita con el pelínegro, ella simplemente no le creía nada.

Sin embargo, hoy después de llegar del super la pelirroja la atacó con palabras hirientes, exigiéndole explicaciones mientras sostenía los resultados de sus estudios que afirmaban su embarazo.

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⏰ Última actualización: Aug 05 ⏰

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ꜱᴇɴᴛɪᴍɪᴇɴᴛᴏꜱ ᴇɴᴄᴏɴᴛʀᴀᴅᴏꜱ.. [ Kim Seok Jin ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora