Olivia.
Estaba llegando de trotar cuando encontré una escena similar a la de la anterior vez, un camión con varias cajas de correspondencia y un sujeto a punto de tocar el timbre.
De inmediato me quité los audífonos y saludé al joven para que no tocara la puerta y despertara a todos en la casa.
Mi bombilla de ideas sobre mi cabeza se había encendido, pero también mis alarmas internas.
—¿Señorita Fernsby, Olivia? —asentí y me extendió su planilla y un lápiz—. ¿Tiene identificación?
Le mostré mi cédula de identidad que tenía siempre detrás de mi carcasa celular, firmé unas cosas y por poco pensé que eran equivocación hasta que vi una lámpara que había querido hace mucho.
—¿Seguro que no están equivocados? Es que yo no encargué nada, sin embargo tengo un amigo que ha estado enviándome cosas y...
—Ah, tranquila allí está lo demás —dijo ignorando mi comentario y respondiendo como si hubiera objetado que faltaban más cosas.
Me enteré que lo que estaba viendo no era la mitad de las cosas que traían, abrieron las puertas traseras de la van y sacaron el resto.
Piero, te voy a matar...
Cuando abrí la puerta, me ayudaron a subirlas con sumo cuidado y les pagué una propina por la confidencialidad.
Solo imagino todo lo que gastó incluso el pagó extra para que llegara tan rápido. No puede ser.
Cuando entré a mi habitación pude darme el lujo de colapsar, TODOS MIS ENCARGOS DE AMAZON que estaban en el carrito los tenía ahora en cajas en mi habitación.
¡Esto no es creíble!
**
—Buenos días. —Contestó Piero muy alegre al otro lado de la línea telefónica.Comencé a caminar histérica, dando círculos en mi habitación en el poco espacio que había.
—¿De verdad? ¿Lo hiciste otra vez? ¿Quién hace 23 pedidos y luego los manda a una casa? —iba a hablar pero continué regañandolo—. Mi madre podría ver.
—¿Y eso que tiene que ver?
—¿Qué tiene que ver Piero? Tiene que ver mucho, no estás pensando, mi mamá podría creer que estás cortejandome, y creería que somos novios.
—Oh...
—Sí, oh—, continúe hablando rápido—. Imagina lo que pasaría, tendrá los ojos en nosotros y luego cuando quiera salir no me dejara llegar tan tarde a casa, porque ya pensará que hay algo emocional entre nosotros —le hablé firme—, Así que si quieres seguir durmiendo conmigo, vas a tener que disimular más ¿ok?
Por un momento parecía loca por pensar precipitadamente todo, pero conocía a mis padres, no es lo mismo decir "saldré con mi amigo", a "saldré con mi novio", si es por mis padres aún pensaran que soy virgen, y que no hago estas cosas que ya de por sí hago.
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ENTRE TRES, ENTRE SÁBANAS. +18
Teen FictionTres jóvenes, un acuerdo nocturno, y un triángulo amoroso. +18