Capítulo 13

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Olivia

Me visto lo más rápido que puedo, reviso el reloj y justamente son las doce cuando me asomo los guardias se empiezan a retirar, me lanzó por el balcón y caigo haciendo el menor ruido posible corro hacia el gran portón y lo brinco como puedo, cuando caigo empiezo a correr sin mirar atrás.

No se cuanto tiempo llevo corriendo, siento mis piernas fallar pero no me rindo llego a un pequeño pueblo y me doy cuando de que estoy en Venezuela, me mezclo junto a la gente hasta que cruzó ese pueblo, de repente siento que me jalan y agradezco ya no estar en el pueblo, siento como algo atraviesa mi pierna derecha y me volteo golpeando a él hombre encapuchado como puedo le quito el arma y lo tumbó en el suelo y le doy un tiro en la frente.

Empiezo a correr pero no llego muy lejos por que mi pierna no lo permite, llego a una pequeña casita en el monte que parece que no hay nadie pero cuándo me acerco hay una chica como de mi edad me acerco hacia ella, se asusta pero en lo que ve mi pierna corre a ayudarme.

–Por dios niña, ¿que coño te paso?- me pregunta y como puedo me mete hacia la casa.

Me acuesta y ella me habla pero de repente ya no escucho nada y empiezo a ver todo negro.

Me levanto con la molestia en mi pierna pero alguien evita que me levante.

–Coño no te pares que te vas a lastimar nojoda- me dice la chica- te saque la bala pero perdiste mucha sangre me imagino que vienes saliendo de una situación no muy amigable.

Asiento y le hablo:

–¿Puedo estar segura aquí?- le pregunto.

–Si claro, tienes suerte de que digan que estoy loca- me dice con una sonrisa nostálgica.

–¿Por que te dicen así?- le pregunto y ella luce incómoda- perdón yo..

–Tranquila no te disculpes, ya te digo, cuando yo tenia mis diecinueve años tuve una pareja, estábamos bien pero salí embarazada los dos cuidamos el embarazo pero yo note que el cambiaba conmigo cuando el bebé nació yo me quedé inconsciente y cuando desperté mi bebé no estaba y yo me volví loca buscando pero todo el mundo decía que estaba loca y que nunca había estado embarazada por eso estoy apartada.

–Lo siento, disculpa no quise...- no terminó de hablar por que me interrumpe.

–Tranquila- me dice y me da una pequeña sonrisa de repente se escuchan voces allá afuera y me empiezo a poner nerviosa.

–Por favor ayudame te prometo que te ayudaré solo oculta me- le digo con ojos suplicantes mientras las voces se acerca.

Ella mueve lo más rápido que puede la cama y luego el papel que está en el piso y levanta el piso hay una mini habitación como para dos.

–Métete rápido que se acercan.

Entro lo más rápido que puedo y justamente ella termina de acomodar y tocan la puerta principal.

No se que pasa arriba pero escucho unas pisadas muy fuerte y lo escucho.

–¿No has visto a una chica alta delgada con los cabellos negros como la noche y largo?- le pregunta Víctor a la chica.

–No señor, yo tengo tiempo sin salir de aquí y sin ver a nadie solo estoy aquí con mi hija‐ dice.

–Si es verdad que hablo con una loca- y escucho las pisadas irse.

Después como de dos horas escucho como mueven todo y abren

–No te saque antes por que tenia que asegurarme para que se fueran- dice en un susurro- por cierto me llamo cataline.

–Lindo nombre yo soy Olivia- le digo- oye ¿no tienes un teléfono?- pregunto.

–Si tengo uno para casos de emergencia ya lo busco- y se va.

La venganza de la dama: Libro II de la dama de la mafiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora