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Pasaron 6 años después de lo ocurrido, y durante ese tiempo Sofía y cinco se volvieron a casar al ser mayores de edad, por el civil únicamente, vivían en un lindo departamento pero aún no tenía hijos. Según cinco porque no tenían suficiente estabilidad económica. Y resultaba que en esa línea de tiempo Sofía no era huérfana, resultó tener una joven y madre viva, el cual al verla se sorprendió y más cuando conoció a número 5, el cual a diferencia de Diego no se quejaba de su suegra, era una inmigrante rusa por lo que no era ni muy pintoresca pero tampoco tan aburrida. Algo súper extraño es que ella recordaba a su hija, como si nunca Reginald la hubiera quitado de su lado.

Cinco por su parte insistía en que le daba miedo tener hijos por su trabajo en la CIA y eso que ambos trabajan ahí, un día Sofía amaneció con muchos mareos, dolor en su vientre y grandes náuseas, al trabajar en el mismo lugar le pidió a cinco que les avisara que necesitaba el día libre. En total soledad y compañía de un klaus germofobico le hicieron la famosa prueba de embarazo en un hospital cercano. El cual dio positivo. Cinco cuando se enteró estaba emocionado y nervioso, por lo que no tardó tanto en ir a cursos de paternidad, leer muchos libros sobre embarazos, libros de cómo ser un buen padre y hacer cursos para atender un parto en caso de emergencia. Sofía siguió trabajando normal hasta que el embarazo se empezó a notar, le dieron un puesto mientras tanto en la parte administrativa, quería seguir trabajando pero no podía hacer esfuerzos como siempre, pero como ya tenía 37 semanas decidió darse un descanso, el bebé podría venir en cualquier momento.

Una mañana, completamente normal, sofia venia llegando de una de sus clases de yoga para embarazadas, estaba a punto de bañarse cuando escucho el teléfono sonar, era luther. Al caer la tarde ella se encontraba frente a el espejo arreglándose cuando escuchó la puerta abrirse para encontrarse a un cinco algo cansado.

Sofía: debemos ir al cumpleaños de la hija de diego.
Cinco: tienes que estar bromeando.
Sofía: no, y ya compré el regalo, así que prepárate que vamos a cumplir con nuestra sobrina.

Cinco rodó los ojos antes de meterse a bañar. Sofía se arregló en espejo, podría estar embarazada pero no iba a estar desarreglada. Cinco al salir de bañarse entró en la habitación para vestirse mientras sofia se arreglaba el cabello.

Sofía: ¿te enteraste que Ben salió de la cárcel?
Cinco: ¿en serio?
Sofía: si, luther llamó para recordarnos que debemos ir cumpleaños de Grace y para contarme la noticia.

Cinco se terminó de vestir y se acercó a su esposa con su corbata sin arreglar.
Sofía se puso de pie con algo de dificultad y agarró su corbata para poder hacerle el nudo.
Cinco: ¿le redujeron la condena?
Sofía: pues al parecer, me imagino que por buena conducta, es solo un estafador.

Al terminar de anudar su corbata le dio un beso corto en los labios antes de sentarse en la cama para que cinco la ayudara a colocarse sus zapatos.

Ambos se encaminaron a la fiesta y mientras caminaban por la entrada sofia muy emocionada miraba a los niños jugar.

Sofía: ¿ya tú te imaginas cuando el bebé ya esté celebrando su cumpleaños?
Cinco: ojalá no quiera celebrarlo aquí.

Cinco y Ben hablaban mientras bebían una cerveza, mientras sofia estaba junto a ellos bebiendo un poco de jugo. Cuando se cansó cinco la fue a llevar a un silla pero Diego al ver a cinco le pidió que lo acompañara a buscar jugos.

Diego: me recomendaron en la CIA, ¿no?

Cinco y Sofía se vieron incómodos, cinco tenía un poco de ganas de decirle la verdad pero Número 8 negó con la cabeza.

Sofía: están viendo tu curriculum, en cualquier momento te llaman.

Cuando llegó klaus Sofía lo miro estaba en crisis, por lo que se levantó con dificultad para ir a saludarlo.

Es amor u odio +18 (ocho y cinco) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora