Peter Parker, también conocido como Spider-man aprende a lo largo de su vida que un gran poder conlleva una gran responsabilidad y que el camino de los héroes nunca es tan fácil.
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El momento de la verdad había llegado, era momento de derrotar a Wilson Fisk, también conocido como el Kingpin.
Las elecciones serían en un par de horas, por ende debían actuar rápido. Si no todo lo que conocían podría cambiar para mal. Peter toma su traje recién reparado, un par de vendajes que aún cubrían sus heridas más recientes y rellena sus cartuchos de telaraña.
Gwen, por otro lado estaba tomando un bate de béisbol con el que su padre solía defender su casa, los lanza redes viejos de Peter y la placa de su padre. Estaba lista.
Unos minutos después, Spider-man llega balanceándose a un punto de encuentro con Gwen, era en el centro Rockefeller. Al llegar Peter abraza a Gwen y se levanta la máscara para darle un beso.
-Hola...- Peter se acomoda la máscara.- ¿Y los demás?
-Están abajo y ya están listos.- Gwen lo toma de la mano para llevarlo con los demás.
Llegan a la zona de las mesas en frente de la estatua más famosa del centro Rockefeller y aparentan que son desconocidos el uno del otro.
-Gracias a todos por venir, en serio se los agradezco pues será algo peligroso, sé que tengo una mala fama, tal vez no se fían de mí. Pero si no hacemos algo, si no trabajamos en equipo. La ciudad será mucho peor.- Peter empieza a hablar con sus invitados, personas que podrían ayudar, Flash y Liz Allen, sus compañeros de escuela.
-Sabemos que es un riesgo, pero conocemos la verdad...- Liz hablaba mientras veía a los demás.- Kingpin es el que coordina todo esto, sin el tal vez a mi no me hubieran...- Su voz se quiebra por el recuerdo del secuestro, Gwen le pone la mano en la espalda mostrando su apoyo.
-Spider-man, ¿Pero porque nos necesitas?- Preguntaba Flash emocionado por conocer al trepa muros.
-Esperaba que preguntaras, sus cuentas redes sociales son bastante grandes, pensaba que ustedes podrían ayudarnos a difundir la verdad.- Peter mira a sus compañeros.
-Bien, ¿pero quién dará el mensaje?- Liz pregunta curiosa. -Yo no conozco toda la verdad.
-Lo hará Gwen.- Peter mira a la joven mientras recargaba sus telarañas.- Digo... la rubia lo hará, mientras yo estaré buscando a Fisk en su edificio, y lo enfrentaré para una vez la gente sepa la verdad la policía no tendrá más que arrestarlo. Tengo un contacto ahí que no es corrupto, sin duda todo saldrá bien.
-Espera... ¿yo daré el mensaje?- Gwen lo mira con preocupación.- Soy terrible para hablar en público.
-No serán tantos- Peter la toma de los hombros para calmarla mientras se alejan un poco de los demás.
-¡Ya contacte al Bugle! ¡Lo transmitirán en su sitio web!- Liz emocionada da la noticia.- ¡Te verán miles de personas!
-Bueno, tal vez son un poco más de lo esperado, pero oye, tú puedes hacerlo, confío en ti. Me has inspirado a no dejar este caso.- Peter anima a Gwen.- Podemos hacerlo. Juntos.
