Luna Sangrienta

Capítulo 33

Tanjiro salio del ascensor apenas las puertas se abrieron, camino por el pasillo lleno de doctores y enfermeras hasta divisar a ciertas personas que buscaba. Camino hasta donde estaban Toko, Keizo, Ayame y Ume. La oji roja fue la primera en verlo llegar, luego Toko, Ume y al final Keizo. 

—¿Alguna novedad? —Pregunto una vez estuvo con ellos. 

—Nada, lo cual supongo que es buena señal —Keizo contesto, algo tranquilo y nervioso por la salud de su hija y nieto o nieta. 

—Gyutaro esta ahí dentro con una doctora y enfermeras —Anuncio Ume con confianza—Koyuki-chan y su hijo estaran bien, Gyutaro se estuvo preparando para esto.

—Si, lo se —Murmuro Keizo, pasando una mano por su cabello —Al menos le pedi que también grabe el nacimiento. 

—¿Comó paso esto? —Pregunto el pilar de la Luna, algo curioso. 

—Bueno, estabamos en casa de Koyuki-chan hablando de "asuntos" de mujeres cuando ella se agarro el vientre y su fuente se rompio —Explico Toko, algo nerviosa por mentirle a su superior de lo que enrealidad hablaron ellas. 

Tanjiro levanto una ceja ante la explicación de Toko, sin siquiera usar su olfato para darse cuenta de que ella no le decía toda la verdad. Miro a Ume, y la peliblanca se encogio de hombros, sin saber nada de lo que habia pasado antes. Luego miro a Ayame, quien tenia un rostro de poquer mientras le devolvia la mirada, los dos se quedaron mirando por lo que parecia un largo momento, donde el rojo volvio a encontrarse con el purpura, tal como aquella noche. 

El Tsugikuni se debatio entre usar su olfato en ella o no, pero se decidio de que no lo usara. Al final miro a Keizo, quien simplemente le dijo. 

—Cosas de mujeres son cosas de mujeres. Dejalo asi —Dijo sabiamente el hombre. Tanjiro asintio. 

En lo que los dos hombres se ponian a hablar sobre como si sera niño o niña, Ayame dijo que iria al baño, siendo vista por Toko y con sospecha por los ojos azules de Ume. La peliblanca podia notar que algo pasaba con su amiga, y ciertamente no era tonta para no darse cuenta. 

Cuando la oji roja llego al baño y se metio en un cubículo, se llevo sus manos hacia su rostro, el cual estaba que ardía por lo sonrojada que estaba. Podia sentir como su corazón latia rapido y fuerte en su pecho, haciendo que la temperatura se le suba por el cuerpo. 

—¿Qué me esta pasando? Solo lo mire a los ojos —Pensó Takahashi, confundida sobre lo que le pasaba —¿Porque sus ojos me parecieron hermosos?. 

La pelinegra estaba confundida, ¿porque se comportaba así cuando los ojos del pilar la miraban?, fue solo pura fuerza de voluntad en que ella pudo resisitir para no sonrojarse y pasar verguenza frente al pilar y Toko. 

¿Que le pasaba?. 

Desde que salio del hospital curada de sus heridas causadas en la misión del tren infinito, ella y Tsugikuni volvieron a entrenar, pero fue una noche donde comenzo a sentirse así cuando el estaba cerca. 

La noche donde se revelaron sus pasados. 

[.....]

—Hola.

—¿Eh?.

Tanjiro apareció de repente justo a su lado, sentándose y apoyándose en su brazo derecho mientras la miraba a la cara con una suave sonrisa. Su cara estaba a centímetros de la de ella, tan cerca que cada respiración silenciosa que tomaba ella podía sentir el aire entrando por su nariz.