Luna Sangrienta

Capítulo 19

El tiempo paso en japón y el otoño estaba por terminar. Tanjiro siguió haciendo sus misiones asignadas, sin toparse con demonios como los de shingu, algo que lo inquieto y expreso su preocupacion a Ubuyashiki.

—Entiendo tú preocupación, Tsugikuni-kun. He estado haciendo unas llamadas y preparandonos para lo inesperado —Dijo Kagaya, tomando poco de té.

—¿De verdad? ¿Y que ha estado planeando?.

—Por el momento no puedo revelarlo, te pido disculpas y paciencia —Se disculpo el hombre mayor—Tú y los demás lo sabrán a su respectivo tiempo.

—Entiendo. No sé preocupe —Tanjiro miro su té —Por cierto, ¿como va con eso de 'Kamado'.

—Aun estoy investigando, mi esposa reviso todos los archivos y escritos antiguos por si habia una pista —Contesto.

—¿Pero?.

—Como debes saber, tener una organización que transcendio muchos siglos hace que tengas tanta información como para llenar tres bibliotecas —

—Puedo entender eso.

—Pero bueno, ahora que estás aquí, ¿cómo te vá entrenando con Takahashi? —Pregunto, interesado —Supongo que nada fácil.

Tanjiro dió un suspiro largo y cansado. A su cabeza se le vino un recuerdo.

—Pues.....

[.....]

El cielo estaba cambiando de un color azul claro a un color anaranjado. Tanjiro salió victorioso e imperturbable. Tanjiro se ensució un poco, pero no recibió un rasguño, ya que el cuerpo de Ayame estaba tirado en el suelo derrotada, con algunos moretones en su cuerpo. Ayame estaba jadeando pesadamente en el suelo ya que apenas le había dado un golpe a su "maestro".

—Bien hecho. Lograste durar más que la última vez. Pero aún te queda un largo camino por recorrer —Le felicito.

—¡Rayos! ¡Incluso después de entrenar tres meses y medio, todavía no puedo darte un golpe! —Lo miro cansada mientras inclinaba su espalda hacia arriba.

—No te preocupes. Aún tienes tiempo para hacerte más fuerte. Y algún día, estoy seguro de que podrás superarme.

Ayame se sentó de espaldas.

—......¿De verdad lo crees?.

—Lo sé —El brillo y el glamour rodearon el rostro del Tsugikuni. Ofreció una mano para ayudarla a levantarse.

Ayame lo miro, con algo de vacilación, levantó su mano y tomo la de el. Se levantó y quitó el polvo de su uniforme.

—¿Aún quieres seguir?.

La oji roja asintió.

—Tú mismo dijiste, los demonios no me darán tiempo de pensar o descansar.

Tanjiro sonrio un poco. Levanto su espada de madera, mirandola con ojos serios.

—Adelante.

La oji roja estuvo frente a el de un solo parpadeo, con su espada de madera hacia atras. Moviendose rapido, Ayame movio sus manos, muñecas y brazos, haciendo que la espada apunte a su cuello. Lamentablemente, tuvo que voltear su cuerpo en el aire para esquivar una patada en su abdomen proveniente del pilar.

—Izquierda —Penso ella, moviendose hacia esa dirección para esquivar el ataque de la espada de madera de su oponente.

Takahashi se levanto y se lanzo como flecha hacia Tanjiro, quien permanecia de espaldas, justo cuando Ayame creyo que pudo darle un golpe, Tanjiro volteo su rostro, mirandola de reojo. Los ojos rojos de la pelinegra se encontraron con el purpura del pelirrojo. Ayame, por un momento, en lugar de ver un ojo purpura, vio un ojo rojo como la sangre con la pupila rasgada, mirandola.