El Ascenso de un Dios Egipcio (yo en bnha)

capitulo 12

POV ALEX:

Alex despertó temprano esa mañana, el sonido del despertador apenas necesario ya que había estado despierto gran parte de la noche, emocionado y ansioso por lo que estaba por venir. Se levantó de la cama y comenzó su rutina matutina, algo que había perfeccionado en los últimos años para mantener su mente y cuerpo en equilibrio. Primero, hizo una serie de ejercicios físicos, asegurándose de que cada movimiento fuera preciso y controlado. Luego, se dirigió al baño, donde se refrescó con una ducha fría para despejar cualquier rastro de somnolencia.

Después de vestirse, con el uniforme escolar que había estado preparado desde la noche anterior, Alex fue a la cocina para preparar su desayuno. Aunque los nervios del examen le habían reducido el apetito, sabía que necesitaba energía para enfrentar el día. Se sirvió un plato sencillo de tostadas y fruta, recordando los consejos de su tío Aizawa sobre la importancia de una buena alimentación antes de un evento importante.

Aizawa, ya despierto y listo para su día, lo esperaba en la mesa con una taza de café en la mano. La rutina matutina de ambos se había sincronizado perfectamente con el tiempo, y aunque las palabras entre ellos eran pocas, la comprensión mutua era profunda.

Shota:
Listo para el gran día, Alex?

preguntó Aizawa, con su tono usualmente calmado, pero con un destello de orgullo en sus ojos.

Alex asintió mientras terminaba de comer su desayuno.

Alex:
Sí, estoy listo. He entrenado para esto, y no voy a dejar que los nervios me detengan.

Aizawa hizo una pausa, como si estuviera considerando sus palabras antes de hablar. —

Shota:
Recuerda lo que hemos hablado. No es solo sobre pasar el examen, sino sobre mostrar quién eres realmente. Sé tú mismo y no intentes imitar a nadie más.

Alex apreció las palabras de su tío. Sabía que tenía grandes expectativas, pero también comprendía que Aizawa no quería que se sintiera presionado por ellas.

Alex:
Lo sé, Tío. Haré todo lo posible
.

Aizawa lo miró un momento más antes de asentir, como si hubiera llegado a una conclusión.

Ahora:
Estoy orgulloso de ti, sin importar el resultado. Ahora, ve y haz lo que sabes hacer.

Con esas palabras resonando en su mente, Alex se despidió y salió de la casa, su corazón latiendo con fuerza. Caminó hacia la estación de tren, repasando mentalmente todo lo que había aprendido y entrenado para el examen de ingreso a la Academia de Héroes de U.A. No podía evitar sentir una mezcla de emociones: emoción, miedo, esperanza... y un deseo profundo de demostrar que todo lo que había pasado, todo el dolor y el sufrimiento, no habían sido en vano.

El viaje en tren hacia U.A. fue un momento de tranquilidad, un respiro antes de enfrentar la tormenta. Cuando finalmente llegó, Alex se encontró parado frente a las imponentes puertas de la academia, junto a otros jóvenes aspirantes. Podía sentir la energía en el aire, una mezcla de ambición y nerviosismo que le resultaba casi tangible.

Alex entró a la academia de U.A., su corazón aún palpitando con fuerza por la emoción. El primer examen era escrito, algo que, aunque no era su punto fuerte, sabía que había estudiado lo suficiente como para estar preparado. Se dirigió a su asiento asignado en la sala de examen, rodeado de otros aspirantes que compartían la misma determinación y nerviosismo. El ambiente estaba cargado de tensión, y el silencio era casi palpable.

El examen comenzó, y Alex se concentró en cada pregunta, aplicando todo lo que había aprendido durante los últimos años. Las preguntas abarcaban desde conocimientos generales hasta temas específicos sobre héroes y villanos, así como la ética y el manejo de situaciones críticas. A pesar de algunos momentos de duda, se sintió relativamente confiado en sus respuestas y terminó justo a tiempo.