(Hawks y tú) Otros aires...

Capítulo 41

Un suave brillo inundó la habitación, mientras el suave aire se filtraba por los rincones y las voces y bullas de los inquilinos llenaban el lugar. Era una mañana fría, se podía ver a simple vista.

Estabas sobre el cuerpo de Hawks, mejilla contra mejilla, con los labios ligeramente abiertos y tu mano 'Esa mano' con ese hermoso anillo brillante estaba posado en su pecho y tus pezones duros por el frío chocaban contra su pecho, los ojos de Hawks fueron los primeros en abrirse lentamente y una suave sonrisa se formó en su rostro, al ver la cercanía y 'Oh diablos' tu pecho...

Lentamente bostezo un poco, antes de poner sus brazos al rededor de tu cintura y suavemente levantarte de encima de él, el anillo brillaba en tu dedo y una sonrisa burlona se asomaba en sus labios.

Lentamente se inclino encima de ti y descuidadamente dejó un tierno beso en tu nariz, mientras delicadamente apartaba el cabello de tu rostro.

Y las caricias finalmente te hicieron abrir los ojos Lentamente y con dificultad, mientras lo mirabas con curiosidad y una cansada sonrisa se formaba en tu rostro.

-Hawks...- murmuraste Tiernamente, mientras extendias 'Esa mano' hacia su rostro y lo acariciabas suavemente.

Notaste el anillo no fue un sueño, era real.

Así que tiernamente lo mirabas.

-Despertaste...- susurro él con la misma ternura y lentamente tomo tu mano en sus manos y la llevo hacía su boca, dejando un suave beso.

-Quiero dormir más- susurraste descuidadamente.

-Niña... Vamos. Tenemos que regresar a casa, lo recuerdas verdad?- dijo Hawks mientras se reía.

-Pero yo...- replicaste con las mejillas hinchadas por la frustración.

-Puedes dormir en el camino, bien?- dijo delicadamente.

No espero tu respuesta, si no que simplemente se levanto de la vieja cama y se estiró, podías admirar su cuerpo totalmente desnudo, cada detalle, marca, cicatriz, él era hermoso.

-Si te cambias rápido, podremos ir a algún lugar que te guste a comer- dijo Hawks, como un comentario para motivarte.

Y así fue, tus ojos se iluminaron y inmediatamente te sentaste en la cama, envuelta en las cobijas.

-Si tú lo dices...- dijiste riéndote.

-Apurate niña- dijo riéndose, mientras se comenzaba a vestir.

-No te vas a duchar?- preguntaste con curiosidad.

-Ya viste el baño, acaso?- respondió él con una pregunta.

Sí... El baño estaba un poco 'Descuidado' se miraba bastante asqueroso para ser sinceros.

-No quiero verlo- respondiste.

Te levantaste de la cama y vista de la maleta con sus cosas, sacaste un poco de ropa cómoda.

Te diste la vuelta y te comenzaste a vestir, mirabas regularmente el anillo ¿Esto era un sueño, no? Te decías a ti misma. Sentías algo lindo en tu interior, nunca pensaste que algo así pasaría, al menos no pronto. Cuando te terminaste de vestir, dirigiste tu mirada a el Alado, él ya estaba vestido, recogiendo la ropa que estaba tirada.

Suavemente lo abrazaste por detrás.

-Gracias- susurraste contra su espalda.

-Gracias a ti- dijo él, antes de darse la vuelta y abrazarte, dejandote un beso en la frente.

-Apurate- dijo suavemente.

-Por qué? No hay prisa- preguntaste viéndolo a los ojos.

-Solo quiero salir de acá... Siento que en cualquier momento esto se nos va a caer encima- dijo riéndose.

Tú te reiste y suavemente le diste un beso en la nariz, antes de agarrar la ropa que había recogido y comenzarla a empacar.

-Tiende la cama- le dijiste más como una orden.

Él se rio y comenzó a tender la cama.

...

Unas horas después ambos iban en camino a casa, al parecer Hawks lo había cumplido y habían pasado a comprar un par de hamburguesas.

El clima era bastante frío. Las ventanas estaban empañadas, solo se podía oír el ligero sonido del viento y tu voz.

-Bueno... Lo lamento Alex. Quería ir, pero algunas cosas me detuvieron- dijiste sonriendo para ti misma, mientras le dabas un mordisco a tu hamburguesa.

Le estabas tratando de explicar porque ambos faltaron, aunque aún no le querías decir que te acababan de proponer matrimonio.

-Pero espero que todo haya salido bien- dijiste suavemente.

El rubio estaba mirando el camino, mientras iba comiendo.

-Bien. Entonces hablamos un día de estos?- dijiste riéndote.

Hawks nunca había sentido esto, era casi instintivo, el querer protegerte, arroparte en su cama, el querer pegarte a él, el solo pensar que algo te pasará... Dios. Era casi demasiado.

Suavemente te volteo a ver, era casi íntima la escena, tú, ahí, con el cabello algo desordenado, tus labios ligeramente abriéndose para hablar, tus dedos envolviendo la hamburguesa, y ese anillo brillando.

La sensación crecía en su pecho...

Era difícil llegar a sentir otra cosa similar por otra persona.

He vueltooo JAJEKKEKK

CORTO Y UN POCO FLOJO, lo sé, pero trate de escribir más :b

Espero les guste <3