Idílico (Libro Completo)

Capítulo 29

Mason

El hombre que ha estado vigilando a Ivy en estos últimos cuatro meses me llamó para informarme que tal vez el plan no seguirá como quiero, haciendo estallar mi furia. Tomé un vuelo a New York utilizando una identificación falsa.

Llegué a la ciudad que tuve que abandonar hace varios meses por culpa de Asher e Ivy.

Me resguardé en mi casa estos últimos días la cual se encuentra desalojada, pero por ahora me funciona porque estaré temporalmente.

Tocan la puerta haciéndome voltear y sacándome de la nube de pensamientos en la que me encontraba.

—Jefe—saluda.

Asiento dándole a entender que hable.

—La chica se está desmoronando, no creo que sea capaz de continuar con el plan.

Suelto el puro y la molestia me palpa la sien.

—Creo que está al borde de matarse—sigue hablando.

Yo no voy a dejar que esa estúpida se mate y tome el camino fácil, no me conviene y mucho menos es lo que quiero.

—Bien, dejaremos por olvidado lo que seguía e iremos al grano. Que Asher se entere de que Ivy lo ha traicionado.

Me doy media vuelta y me voy.

Obviamente esto no era lo que quería, la tortura no llego a los niveles que esperaba, prácticamente les deje el camino fácil y para mí, nada de esto es suficiente, al contrario, es poco, no es nada, mejor dicho, no podré lograr destruirlo como quería pero removeré algo en su vida y por muy poco que sea, me conformo. No voy a permitir que la tonta de Ivy me joda los planes. Que se mate después de lo de mañana, no antes.

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Actualidad

Asher

Hace una semana Ivy estaba teniendo una crisis en mi departamento y hoy... Hoy descubrí eso que tanto me estaba ocultando, me estuvo mintiendo, me usó, me vio la cara de idiota.

Presiono más el acelerador sin que me importe que me pueda matar porque hace unos minutos lo acababan de hacer. Hoy Mason apareció y a pesar de que Ivy y yo hemos estado separados desde hace dos semanas, la defendí, seguía confiando en ella porque la distancia no me había quitado lo que sentía, al contrario, me hizo extrañarla, pero ya no más.

Me vi y me sentí como un ridículo confiando y metiendo mis manos al fuego por ella, cuando ella y Mason se han estado burlando de mí todo este tiempo.

Empiezo a recordar la primera vez que vi a Ivy, desde ahí inició el plan, ella y Mason jugaron conmigo desde un principio.

Mi cerebro empieza a acertar las opciones y suposiciones que surgen. Ivy no me ama, simulo hacerlo, jugo sucio. Quería enamorarme para hacerme daño junto a Mason. Ella sacó a relucir un lado de mí que nunca había mostrado, me hizo vulnerable para clavarme el cuchillo cuando menos me lo esperaba. Podría haber esperado esto de todos menos de ella, pero es mi culpa. Mi error fue confiar en ella, creer que era buena y pensar que me amaba y me sería leal.

La odio, pero me odio más a mí por haber permitido que esto pasara, por haber bajado la guardia y mostrarme indefenso.

Terminé con ella y aun así fui tan imbécil de defenderla.

Ojalá no hubiese leído ese mensaje.

Flashback

Hoy en la mañana

Estoy en la oficina concluyendo con unos documentos y mi teléfono no ha dejado de sonar, lo tomo y son mensajes de más y más trabajo, pero un mensaje llama mi atención.

—Descubrirás la verdad, ven a esta dirección a las ocho.

¿Qué verdad?

¿Capaz es lo que Ivy me ha estado ocultando?

No debería de interesarme porque ella y yo ya no somos nada, pero no soy un cobarde que no es capaz de enfrentarse a la realidad...

Elimino el recuerdo de esta mañana y sigo apretando el volante.

Una parte de mí no quisiera haber ido, pero por otra parte, descubrí quien es Ivy Albon y me recordé una vez más la porquería que es Mason Bardeen.

Llego a mi departamento y me encuentro con Lucas pero no soy capaz de controlar la ira. Empiezo a destruir todo lo que se me atraviesa. Lucas habla a mis espaldas, mas no escucho nada, quiero destruir y romper todo lo que tengo a mi vista así como ella lo hizo conmigo.

—¡Es una mentirosa!—Grito.

Luego de varios minutos, trato de tranquilizarme pero mi respiración está tan acelerada que siento que soy capaz de matar a alguien. Observo mi departamento y se convirtió en un mierdero, todo está roto, la mesa, las sillas están volteadas, la licorera está en el piso, los pedazos de vidrios sobresalen y en vez de parecer un departamento parece una escena de un huracán que avasallo con lo que era mi hogar.

—¿Qué sucede?—Pregunta a mis espaldas Lucas.

—Nada.

—Tu <<nada>> no tiene sentido con lo que presencié.

—Vete.

Lucas no refuta porque sabe que lo mejor que puede hacer es dejarme solo. Solo es como siempre he tenido que estar. Esto me pasó por ser un imbécil y crearme expectativas sobre alguien que no fue capaz de cumplirlas, es mi culpa sentirme como me siento porque yo me deje joder.

Yo solo tenía que venir a New York a vengarme de Mason y largarme, pero no, me enamoré de una estúpida mentirosa y aquí estoy sufriendo las consecuencias.

Nadie me ha pisado el orgullo ni la dignidad en mis 25 años de vida, pero Ivy Albon lo hizo, y eso es algo que jamás olvidaré ni perdonaré.