El Síndrome del Amor

Paseo al atardecer

Ethan se despertó esa mañana con una sensación diferente. Después de todo lo que había sucedido, sentía que finalmente estaban dando pasos hacia una nueva oportunidad. Se levantó, se vistió con calma y decidió que quería hacer algo especial para Chloe ese día, algo sencillo, pero significativo. Tomó su teléfono y le envió un mensaje.

-"Hola, Chloe. ¿Te gustaría salir a caminar esta tarde? Hay un par de lugares que me gustaría mostrarte."

Chloe leyó el mensaje y sonrió. Sentía una mezcla de alivio y emoción al ver que Ethan estaba dispuesto a pasar tiempo con ella. Había temido que las cosas fueran incómodas entre ellos, pero esa invitación la hacía sentir que todo estaba volviendo a un ritmo más natural.

-"Me encantaría, Ethan. ¿A qué hora?"

-"¿A las cinco te parece bien?"

-"Perfecto. Nos vemos entonces."

El día pasó lentamente para ambos, con los nervios y la anticipación creciendo a medida que se acercaba la tarde. A las cinco en punto, Ethan cruzó la calle para recoger a Chloe. Ella lo esperaba en la puerta, con una sonrisa nerviosa.

-Hola -dijo Chloe suavemente.

-Hola -respondió Ethan, devolviéndole la sonrisa-. ¿Lista para el paseo?

-Sí, vamos.

Comenzaron a caminar en silencio, pero no era un silencio incómodo. Ambos estaban disfrutando del simple hecho de estar juntos. Se dirigieron hacia un parque cercano, un lugar donde solían ir cuando eran más jóvenes. A medida que caminaban, el sol comenzó a bajar, pintando el cielo de tonos cálidos y dorados.

-Este lugar siempre ha sido bonito, pero no recuerdo que fuese tan tranquilo -comentó Chloe mientras miraba a su alrededor.

-Sí, siempre lo he encontrado un buen lugar para pensar -dijo Ethan-. A veces venía aquí solo, especialmente en los últimos meses.

Chloe asintió, sintiendo un pequeño nudo en la garganta. Sabía que habían pasado por mucho, y que el tiempo a solas para Ethan había sido necesario, aunque doloroso.

-Gracias por invitarme a salir hoy -dijo Chloe, rompiendo el silencio-. Realmente necesitaba esto.

Ethan la miró y sonrió suavemente.

-Yo también lo necesitaba, Chloe. Quiero que sigamos avanzando, y creo que momentos como estos pueden ayudarnos a hacerlo.

Chloe lo miró, sintiendo una mezcla de emociones que no podía describir. Habían pasado por tanto, pero aún estaban ahí, caminando juntos, intentando encontrar un camino de regreso el uno al otro.

El paseo continuó hasta que el sol se escondió completamente. Decidieron regresar a casa, ambos sintiéndose un poco más ligeros, con la esperanza de que, tal vez, podían reconstruir lo que se había roto.

-Nos vemos mañana, Chloe -dijo Ethan, cuando llegaron a la puerta de su casa.

-Sí, hasta mañana -respondió Chloe, con una sonrisa sincera.

Se despidieron, y aunque el abrazo fue breve, ambos sintieron que era un paso importante hacia la reconciliación.