martina
☆ ☆ ☆parte dos
Ori me mira sonriendo mientras yo no entiendo y le pregunto que le pasa y que me va a preguntar aunque ya asumo que va a ser sobre cierto.
–Obviamente, yo que amo el amor, necesito que hablemos de...
–Enzo —asiento sonriendo—. Que lo dejamos en Londres solo y nos vinimos a Roma.
–¿Vos sentías que era él cuando lo conociste?
–Siendo sincera... a mí primero me entró por los ojos, me encantó todo él y dije este te debe matar la psiquis y es esos que te quieren chamuyar siempre.... o sea, era mi tipo.
Y si era así, porque él ya te chamuya con la sonrisa y la mirada. Sin hacer nada ya te tiene a sus pies y me hierve la sangre de pensar con cuántas habrá estado antes de estar conmigo, obvio en su derecho pero igual me da bronca.
–Pero cuando lo conocí mi cabeza estaba en otro lado, estaba en el viaje a Qatar y no quería saber nada de hombres.
–¿Vos lo conociste a Enzo en el mundial? Pará —asiento y ella me mira sin entender—. Yo no sabía, pensé que se conocian hace más.
–Lo conocí el día de la cena en casa, vos estabas... yo no sabía quién era, me acuerdo que llegó último y nadie le abrió así que fui yo.
Que recuerdos, yo yendo a abrir la puerta sin saber que del otro lado me esperaban las dos personas que más me iban a amar y que me iban a cambiar la vida completamente.
–Me acuerdo que esa noche vos saliste.
–Yo no quería saber nada con estar ahí pero me obligaron... todos los días me pregunto que hubiese pasado si esa noche yo no estaba en mi casa por ende no conocía a Enzo...
–Si no hubiese sido esa noche, hubiese sido otra... obviamente. ¿En la previa ya hablaban ustedes? O sea, las semanas previas a qué empiece el mundial.
–No, él me empezó a hablar el día que yo llegué a Qatar y desde ese momento hablamos todo el tiempo hasta el día que nos vimos.
–Nadie sabe esto pero en una de las primeras visitas en el mundial, un día que ellos podían salir, yo fui a buscar a Paulo y estacioné al lado de un auto cualquiera, Paulo quería ver con quién se iba Enzo y abre la puerta del auto.
Como olvidar ese momento en el que me pusieron tan nerviosa que manejaba por las calles de Qatar como si fuese Toretto.
–Ay no, ese día quise matarlo... él abrió la puerta de una.
–Y yo totalmente inocente te dije que tu papá ya se había ido —me señala riendo.
–Y yo con cara de... justo a mi papá no vine a buscar —niego con la cabeza de la misma forma—. Pobre mi papá, de todo esto se está enterando ahora.
–¡¿No sabía?!
–Si sabe la historia por arriba, pero tampoco sabe tanto... que esta parte se la saltee y no escuche nada porque le da algo sabiendo lo que hacía cuando no iba con él.
–¿Ahí conociste a su familia?
–Si... y a Oli también, o sea pasé tiempo con ella porque obviamente ya la conocía desde antes.
–Me acuerdo que durante el mundial vos subiste una foto con ella y ahí le dije a Paulo, es obvio que estos dos están viéndose por favor averiguame que quiero saber.
–¿Y por qué no me preguntabas a mi? —la miro riendo y ella se encoje de hombros—. No lo sabía tanta gente igual, yo me escapaba para verlo.
–¿Tu mamá tampoco?
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iconic ; enzo fernandez
Fiksi Penggemar☆ y me pueden decir diez mil cosa' de ti pero yo pongo mi alma en el fuego por ti nadie sabe, lo que yo haría no saben que ni con cien mencione' van a hacernos mal que tengan envidia se me hace normal porque saben, porque to' el mundo lo sabe ☆