Masochistic [Minsung]

26

Al día siguiente Hyunjin y Jeongin llegaron a la universidad, ambos tomados de la mano con una gran sonrisa, Jeongin llevaba en su mano libre un pequeño ramo de flores, cortesía de su novio.

Jeongin se puso a preguntar sobre lo que había escuchado en cuanto su novio llegó el día anterior con una sonrisa a la puerta de su casa, Hyunjin lo trató tan bien, le dijo muchas cosas lindas, lo besaba, abrazaba e incluso tuvieron intimidad.

Y hoy por la mañana paso por él a su casa con un ramo de flores pequeño, tenía un girasol al centro y tulipanes. Jeongin se sentía muy feliz por las acciones de su novio.

Por otro lado Hyunjin se sentía aún culpable, pero ver la sonrisa en el rostro de su novio lo hacía sonreír a él también, sonrisa que duró poco menos de lo planeado, cuando fue a dejar a Jeongin a su salón se toparon en la entrada con Felix.

El rubio lucía un poco decaído, pero le sonrió a Jeongin, su mirada fija estaba en Jeongin y el pequeño ramo de flores que traía consigo.

Saludo a Jeongin, ambos se saludaron y Felix ni siquiera se molestó en saludar a Hyunjin, simplemente hizo como si no estuviera ahí.

Felix se quedó en la puerta esperando a Jeongin, mientras este mismo se despedía de su novio, con un casto beso en los labios.

Se separó de él y entro al aula junto con Felix, se sentaron juntos y en cuestión de segundos Jeongin ya le estaba contando todo lo que había pasado con Hyunjin ayer.

Felix se limitaba a asentir y sonreír mientras escuchaba todo, los recuerdos de ayer regresaron a su cabeza y por unos segundos sintió lastima por él, tan enamorado que se veía y su novio le ponía el cuerno descaradamente.

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Por otro lado, a pesar de ser muy temprano, ambos habían acordado llegar antes para hablar y ajustar algunas cosas sobre la "relación" que llevaban hasta ahorita.

Cosa que no pasó, fue cuestión de segundos de cuando se vieron que comenzaron a besarse, se besaban con tanta urgencia y necesidad.

Las manos del mayor acariciaban la espalda del contrario bajo la playera que llevaba, arañando un poco y dejando uno que otro pellizco lo que sacaba pequeños jadeos al menor.

Minho bajo sus manos hasta sus caderas y las apretó con fuerza enterrando sus dedos en la suave piel.

Se separaron del beso, bajo sus labios a su cuello dónde dejo pequeñas lamidas y mordidas en el.

El menor jalaba suavemente el pelo de la nuca de Minho, mientras soltaba suspiros pesados contra su oído.

By-. Hdlrfh
Me trago la tierra. 🤗