Familia, Deber y Honor

VIII

Aguas dulces

Al fin dulce hogar luego de esta campaña me di cuenta de algo, ya cumplí mi mayoría de edad así que ya puedo casarme. Ya lo decidí, como futuro señor voy a cambiar la religión a los dioses antiguos, al menos la de mi casa y los demás tendrán una libre elección. No me importa lo que diga la fe de 7.

Me llega a la punta del pit* lo que piensen, además la fe de los dioses antiguos debe ser restaurada, incluso así Eddar Stark creerá más en mi historia. Pero como iba diciendo voy a tener un cardumen de descendientes, hablando de eso donde está Eiza. La verdad amo a esa mujer no solo por su belleza es inteligente, amable, cariñosa, empática, solidaria..........

Media hora más tarde.....

Creo que me desvíe un poco, como iba diciendo ella es perfecta a mis ojos, además me llevo muy bien con Lord Jason Mallister, pero antes debo  preguntarselo a ella que tal no quiere casarse y tener hijos. Tal vez si los quiera pero más adelante, pero si me rechaza se acabara lo nuestro me niego a que eso pase, eso me pone nervioso o tal vez no los quiera o peor no quiere casarse y seguir otro camino, mierd* me va explotar la cabeza. Vamos se hombre y pregunta, después de todo no es adivina debes hablar para eso tienes una boca!!!

Cómo sea ni me di cuenta que ya estaba en la puerta de su habitación, que debería decir pasaron muchos meses desde que nos vimos, tal vez piensa diferente ahora, que le digo entonces.

Demonios decirlo es fácil pero proponerlo es muy diferente y amo a esa chica demasiado, vamos respira solo toca la puerta y pregunta si puedes pasar después de todo es de noche. Creo que es un buen ambiente para hablar, aaaa máximo esfuerzo.

*Toc *Toc *Toc

Puede pasar.-dijo con una voz melodiosa.

Emmm hola Eiza soy yo.-dije "En serio así voy a iniciar, es que estoy bien pendejo*."

Eiza al verlo después de tanto y sobretodo después de una guerra, solo lo miro y se levantó. Camino tranquilamente hacia Medgar y dijo

Bienvenido Med.-dijo cariñosamente acercandose cada vez más al rostro de Medgar.

Eiza yo te extrañ..-Siendo interrumpido por los suaves labios de Eiza

No pudo acabar de decir nada por qué ella empezó a besarlo con pasión, sin dejar lugar a las palabras, era obvio que ella lo había extrañado tanto como el o incluso más.

Dejando así las palabras de un lado, concentrándose asi en ella y ella en el. Mientras aún tenían sus labios junto al otro, se desvestian poco a poco llegando a la cama. Medgar se recostó en la cama mientras ella se subía encima suyo, montandolo sin parar hasta que ella llegó al clímax en esa poción pero, Medgar apenas había comenzado la recostó en la cama así tomando el mando. Alzando sus piernas mientras ella aún se recuperaba de su orgasmo, fue cuando Medgar empezó a penetrarla una y otra vez, Eiza solo mordía las sábanas para que todo el castillo no la oyera gemir, mientras Medgar se acercaba cada vez más al climas, soltando su carga una y otra vez dentro de Eiza con ella tratando de que no la oyeran gemir de placer. Así estuvieron por lo que quedaba de la noche poniéndola en diferentes posiciones que conocía de su mundo y ella con los del suyo se tomaron mutuamente una y otra vez, hasta que los rayos del sol alumbraron la habitación.