Capítulo 15.

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🔞🔞¡¡ATENCIÓN!!🔞🔞

Empieza a haber momentos íntimos en este capítulo. 

Si no son de su agrado, por favor sigan de largo. 


El viernes por la mañana, se despertó congelado.

La calefacción del piso debía de haberse apagado en algún momento de la noche, cosa que hacía de vez en cuando. No fue un consuelo para Minho.

Se removió debajo del nórdico, frotando sus pies en un intento de calentarlos porque odiaba dormir con calcetines. Debía haber tenido el calorcito de alguno de sus gatos al final de la cama, pero los muy listillos se habían hecho bolita a cada lado de su cabeza sobre la almohada.

Sonrió al techo, sintiéndose feliz genuinamente, considerando las circunstancias de que tenía que coger un avión en menos de cinco horas y pasar la navidad en familia. En cierto modo se sentía menos... ¿culpable?

Después de su cita en la bolera, Jisung lo había llevado a casa, bajándose del coche para acompañarlo a la puerta y darle un dulce beso de despedida.

Habían estado hablando toda la semana, y a veces, Jisung aparecía en su oficina con un café tras escabullirse de su departamento para presentarse allí. Cuando se iba, Minho suspiraba, pasando sus ojos de la puerta a su escritorio, mirando el cubo transparente que tenía el copo de nieve que él le había regalado.

De verdad que estaba feliz.

Sus padres debieron notar algo, pues después de recibirlo en el aeropuerto, señalaron lo bien que se veía.

–Te veo diferente, hijo –Le había dicho su padre, mirándolo por el espejo retrovisor en el coche de camino a la casa.

Él se encogió de hombros.

–Puede que este año esté sintiendo más el espíritu navideño.

Su madre podía verlo, aunque no dijo nada.

Los días pasaron en una agradable tranquilidad

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Los días pasaron en una agradable tranquilidad. Caminar por su ciudad en navidad le daba una sensación de nostalgia inmensa de forma positiva. Algo que le hacía darse cuenta de cómo habían cambiado las cosas. De cómo había cambiado él, para mejor.

Envió a Jisung una miríada de fotos de los escaparates que más le gustaban, de las luces colgando entre las farolas, de los árboles decorados en las esquinas de las calles. Él respondía casi inmediatamente, haciendo comentarios que alentaban a que Minho siguiera sacando más fotos.

El día antes de Nochebuena, Jisung subió un nuevo vídeo a su Instagram.

Se le cayó la mandíbula al escuchar los treinta segundos de la familiar canción. No era necesariamente navideña, pero era una que siempre hacía que Minho se sintiera extrañamente pequeño. Extrañamente apabullado.

Chasing the light ~ MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora