El siguiente capítulo contiene descripciones de drogas y sustancias, y trata temas relacionados con el uso y abuso de estas sustancias. La representación de estas situaciones tiene el único propósito de servir a la narrativa de la historia. Cualquier coincidencia con eventos, personas o situaciones reales es pura casualidad.
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Patricio está sentado en el suelo con la espalda apoyada sobre el costado de una cama, Mell lo reconoció inmediatamente y corrió a él mientras cerraba la puerta a sus espaldas.
Pato tiene los ojos semiabiertos y la cabeza tirada para atrás, alrededor de la habitación hay rastros de polvo blanco, tarjetas de créditos usadas de separador y muchos vasos con diferentes bebidas. Mell se arrodilla al lado y toma su pulso, y lo siente, pero no deja de preocuparse, no está del todo consciente.
-Pato, Pato háblame- le dice mientras lo toma de la cara intentado que la mire , las pupilas de Pato dilatadas, por un momento la miran pero vuelven a ponerse en blanco- hay negro, quédate conmigo- le dice a su amigo y busca su teléfono y empieza a llamar a Guido- Lo encontré- le dice ella sin siquiera saludar- lo encontré, estamos en la segunda habitación de la planta de arriba, cerca del baño- no lo deja ni hablar, porque sabe que va estar aun mas enojado, y le corta. Encuentra una botella de agua y moja los labios de Pato, le agarra la mano y se aprieta mientras espera que por la puerta entre Guido.
Cuando este por fin llega, Mell larga un sollozo de susto, este le hace una mueca y se arrodilla donde está ella.
-Tranquila, va estar todo bien- le dice tomando su cara y besando su frente- ayúdame a ponerle esa campera- Mell se repone rápidamente y entre los dos visten a Pato que es solo un peso muerto en este momento.
-está muy frío Guido- le dice ella preocupada por la temperatura corporal de Pato, entonces el rubio desarma la cama que tienen al lado y le saca una frazada y lo envuelve a su hermano, cuando está listo lo alza.
-necesito que vayas al frente haciendo espacio entre la gente- ella le asiente- Mell, no mires a nadie, camina directo a la puerta y al auto- ella asiente de nuevo y salen de la habitación, la rubia se enfoca en buscar la salida rápidamente, mientras pide permiso y se abre paso entre la gente, mira que Guido venga por detrás de ella. Cuando logran salir de la casa, van directo al auto y Mell revisa a su chico para darle la llave del auto y abre atras, ella se mete primero y le recibe a Patricio apoyándolo sobre su torso y dejando su piernas estiradas.
-Pato, no te duermas, quédate conmigo- le dice ella cacheteando suavemente en la mejilla del morocho
Guido observa la imagen por el espejo retrovisor del auto y trata de manejar tranquilo, pero por sobre todas las cosas, no puedo dejar de pensar que si Mell no estuviera en este momento con él, todo sería el triple de difícil, aunque ya haya estado varias veces solo en la misma situación.
Al cabo de un rato llegan a un sanatorio y Guido se baja del auto alzando de vuelta a su hermano e ingresan con Mell siguiéndolo por detrás. Cuando llega a recepción un médico lo reconoce y le dice que lo siga y ingresan directamente a urgencias, y apoya a Pato en una cama.