12. Stand by you

82 8 0
                                    

El bullicio lo mareaba, había suficiente gente como para pasar un poco desapercibido en la multitud. Toda la familia Lee estaba presente para celebrar el cumpleaños de su abuela, también había amigos de la familia y de sus abuelos que conocieron a lo largo de su relación. Y por supuesto, la hija única de la señora Jung con su marido y su único nieto, Wooyoung. Se sentía pequeño en esa familia numerosa, extrañaba a su abuelo. Extrañaba a San.
El mayor había dicho que llegaría algo tarde porque surgió un trabajo inesperado con su padre.

Por lo que ahí estaba solo, escuchando la animada charla de sus padres con sus tíos, o al menos su madre era la que no paraba de hablar y pavonear sobre cosas sin sentido, su padre solo asentía y sonreía bebiendo de su vaso de soju de vez en cuando comiendo las botanas, lo mismo hacía Wooyoung. Tal vez por eso se llevaba tan bien con su padre y se entendían el uno al otro, eran muy iguales.

Mientras su madre seguía hablado sobre algún curso nuevo que tomó en ese tiempo, un mensaje entró en su teléfono, tomándolo con rapidez al ver de quien era. Se levantó de su lugar y cruzó todo el salón para llegar a la entrada y salir del lugar. San bajaba de su auto a lo lejos, bien vestido y arreglado, si no estuviera tan nervioso se hubiera lanzado a sus brazos para besarlo.

-Hola, amor-. Un abrazo acogedor fue lo que recibió, cerró sus ojos sintiéndose algo más tranquilo al tenerlo ahí, y se apartó mirándolo ansioso.
-Traje un regalo para tu abuela-. Wooyoung sonrió tomando la bolsa bien decorada.
-Y haré lo que me pidas esta noche. Si quieres que me presente como un amigo, lo haré-.

Nuevamente Wooyoung lo miró sin saber que decir. La ansiedad lo estaba consumiendo en esos momentos. Quería presentarlo como su novio, como lo hizo con todos, pero al mismo tiempo temía cómo reaccionaría su padres, no quería ser egoísta, no quería dañar los sentimientos de San; este aguardaba pacientemente a la respuesta del menor, quien estaba en su debate interno de que hacer.

-Entremos-. Fue lo que logró decir, dándose la vuelta para entrar con San detrás de él.

Conforme iban entrando San saludaba a los familiares con amabilidad, ya todos lo conocían así que lo recibían con brazos abiertos. Fueron en busca de su abuela quien charlaba con sus amigos; cuando vio a su nieto acercarse con su novio se levantó de inmediato con entusiasmo.

-San, cariño. Que bueno que si viniste-. La mujer lo abrazó fuertemente. Wooyoung los miró enternecido, podría asegurar que su abuela estaba enamorada de su lindo novio en secreto, y no lo quería admitir.

-Tuve un altercado, abuela. Pero no me perdería su cumpleaños por nada-. Se separó de la mujer y sonriéndo le extendió su regalo. Esta lo acepto diciendo que no si hubiera molestado. Y después prosiguió a presentarlo con sus amigos. Un grupo también de hombres y mujeres mayores de edad.

-Miren, este es San, el novio de mi nieto-. El grupo lo saludó con amabilidad y San hacía una reverencia.
Después de eso, lo dejo ir y Wooyoung lo miraba con los ojos entrecerrados y una sonrisa traviesa.

-Sigo creyendo que le gustas más a mi abuela que yo-. San negó riendo y lo siguió. Se dirigían a la mesa donde estaban sus padres. Lo sabía porque había visto fotos de ellos. Los nervios crecieron en ambos. Llegaron a la mesa con las miradas curiosas de ambos adultos sobre él.

-San, por fin llegas, muchacho-. El tío de Wooyoung se levantó de su asiento ya que era el que estaba en la orilla. Era uno de los tíos con los que mejor se llevaba Wooyoung y San. Este lo saludo con un abrazo como siempre y después se giraron a sus padres.
-Es la primera vez que conocen a San, ¿no?-. Los nervios de Wooyoung aumentaron temiendo que a su tío se le saliera algo que no debía. Ambos adultos se miraron entre sí.

-no tenemos el placer-. Habló su madre levantándose de su lugar alisando su vestido. Por un momento San se sintió intimidado por la pequeña mujer que lo analizaba de pies a cabeza, pero necesitaba verse relajado para que Wooyoung también lo estuviera pues veía que su chico apretaba con dureza su rostro y forzaba su sonrisa.

-Un gusto conocerla señora Jung. Mi nombre es Choi San-. Extendió su mano y sonrió con amabilidad. La mujer lo examinó con rapidez, y correspondió el saludo.

-Jung Umji. Un gusto-. Las manos de la mujer eran frías, o quizás fue su aura la que le envió un escalofrío por su espina dorsal.

El padre de Wooyoung veía la escena junto a su hijo, sabía que algo pasaba pues lo conocía y veía esa expresión característica que tenía Wooyoung cuando ocultaba algo a su madre e iba en busca de él para que le ayudara. El hombre mostró su mejor sonrisa y le extendió su mano al joven frente a él.

-Yo soy Jung Chanwook. Un gusto el conocerte, San-.

-El gusto es mío, señor-.

-¿es uno de tus amigos, hijo?-.
La boca de Wooyoung se secó por el tono de voz de su madre al hacer esa pregunta y nuevamente sintió la sangre írsele a los pies. Tuvo un día entero para planear que decir, pero jamás supo cómo.

Los adultos lo miraban, San a su lado parecía mantenerse tranquilo, pero sabía que estaba igual de nervioso, y expectante por lo que diría el menor.

No iba a ser egoísta; cuando él conoció a la familia de San, no dudó ni un segundo en decir que era su novio, él no debía avergonzarse, si su madre reaccionaba mal era su problema, total, le encantaba fingir ser perfecta frente a los demás, así que si iba a explotar, lo haría en privado llegando a casa y no frente a muchas personas quienes si habían aceptado a San en la familia.

Miró a su padre, claro que este lo apoyaría, estaba seguro, y más por la forma en que lo miraba; conocía a Wooyoung, así que sabía como transmitirle seguridad.

-Si, nos conocimos un mes después de que llegara a Namhae-.

¿Debía dolerle? Pensó San. No quiera, no debía sentir esa pequeña decepción pero lo hizo. Miró hacia abajo y luego al menor a su lado, quien no lo veía, mantenía su mirada en sus padres.

-y en realidad... comenzamos a salir en Septiembre. San es mi novio y quería presentárselos en persona y no por mensaje o llamada-. Ahí estaba. Lo dijo directo.

Los rostro de los dos adultos reflejaban sorpresa de formas distintas, pero eso parecía importarle poco a Wooyoung ahora que veía a San a su lado, tratando de no sonreír de más o abrazarlo y llenarlo de besos.

-En ese caso, es mucho más el gusto de conocerte San. Espero cuides bien de mi hijo-. Su padre al rescate como siempre, no dejaría que la noche se arruinara, así que señaló el asiento vacío a su lado. -Wooyoung, siéntense acá para que cenen. Bienvenido San-. El mencionado hizo una reverencia agradeciendo, Wooyoung tomó su mano y rodearon la mesa para sentarse juntos, Wooyoung a un lado de su padre poniendo una barrera entre él y su madre.

Sabía lo que le esperaba llegando a casa, pero no le importaba porque tenía a un San a su lado radiante de felicidad, mirándolo con emoción. Y eso lo valía.






•••

Somebody in Namhae (WooSan)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora