Somebody in Namhae (WooSan)

14. ¿Dónde me quedo?

Ese fin de semana pareció eterno. Lo último que San supo de Wooyoung desde la noche del viernes fue un solo mensaje:
"Las cosas se complicaron con mamá. Yo te llamaré".
Podría sonar exagerado pero, estaba muy preocupado ya que era domingo en la noche y Wooyoung no había contestado sus mensajes, lo llamó solo un par de veces ese día pero en ninguna atendió, por lo que si estaba claramente preocupado, pero no quería entrometerse en los problemas con su madre; y como no, si la primera impresión que tuvo de ella fue muy intimidante.

Así que ahí estaba, en su habitación mirando el techo pensando en cómo debería estar Wooyoung, como se sentiría, y si estaba bien.

•••

Abrió sus ojos con lentitud, la habitación estaba obscura, debió haber dormido toda la tarde y ahora había anochecido. Estiró su brazo para revisar la hora en su teléfono. 12:20am. Talló sus ojos y se incorporó quedando sentado.

"Sannie- 5 llamadas perdidas"
"Sannie- 10 mensajes"

El pecho se le comprimió y sintió las ganas de llorar de nuevo como lo había hecho durante esos dos días.

Después de la pelea con su madre, fue lo único que hizo, y ella no se dignó a ir y disculparse con él, con su propio hijo quien estaba completamente herido; su padre y su abuela fueron un par de veces, trataron de convencerlo de que su madre realmente no quiso decir eso sobre él, que fue la ira hablando, pero Wooyoung ya no podía creerles, ya no podía dejar que ni su padre ni su abuela fueran los que arreglaran las cosas que su madre estropeaba, así que él intento hablar con ella, pero lo único que recibió fue el mismo rechazo.
Le dolía, le dolía como nunca antes.
Y ahora cada que pensaba en San, las ganas de llorar volvían; ¿Cómo podía ser que amar alguien causara un repudio de parte de otra persona a la que también amaba? No lo entendía; amaba a San, amaba a su madre a pesar de la relación que tenían; y ahora amarlos le dolía, se comenzó a cuestionar si realmente era correcto estar con San.

Enterró su rostro en el edredón afelpado y ahogó su llanto una vez más, dejando salir todo nuevamente; fueron unos minutos así tratando de calmarse hasta que los hipidos se detuvieron y ya no hubo más lágrimas.

Cuando creyó estar más relajado, tomó su teléfono y una sudadera de su armario, se puso sus tenis y salió de su habitación con sigilo; con cuidado de no hacer ruido bajo a la puerta trasera y salió de ahí. Nunca había salido de madrugada, si su madre se enterara lo castigaría y regañaría diciendo que era muy peligroso, pero conocía lo suficientemente bien la ciudad y sabía que no era peligrosa.

Sus pies caminaban en automático a su destino; conforme se acercaba, más sentía un pesar en su pecho, pero no se detenía.

Estaba ya frente a la casa de San, no se atrevió a tocar porque era ya la 1:15 de la madrugada y no quería despertar a los señores Choi; estuvo en un debate sobre que debería hacer, tampoco quería llamar a San porque creyó que ya dormía, así que se alejó de la puerta y a pasos lentos salió del pórtico quedando en la calle inmóvil sin saber a donde más ir.

Cuando pensó que era mejor volver a casa, la puerta principal fue abierta haciéndolo girar; San estaba parado ahí, parecía agitado como si acabara de correr o visto un fantasma.

-Wooyoung-. Corrió hacia él mientras el menor lo miraba confundido.
-Amor, me tenías preocupado-.
San lo sostuvo de los hombros para inspeccionarlo mejor, preocupándose al ver sus ojos rojos y cristalinos, había rastros de lágrimas en sus mejillas juntamente con una expresión triste en su rostro.

-¿cómo supiste que estaba aquí?-. Su voz sonaba algo ronca pues llevaba sin hablar casi dos días enteros y llorando sin parar.
San sintió una punzada en su pecho al verlo así, no tenía idea de que había pasado, pero necesitaba consolarlo.

Negó y acarició su rostro y cabello.-No podía dormir, estaba viendo por la ventana desde hace una hora cuando te vi llegar, pensé que lo imaginé-. Las caricias en su cabello no cesaron, aún lo inspeccionaba con detenimiento, dándose cuenta que Wooyoung evitaba su mirada, veía a todos lados menos a sus ojos.-amor, ¿que fue lo qué pasó?-. Preguntó con cuidado cuando esté fijo su mirada en el suelo.

Wooyoung no lo soporto mas y rompió en llanto nuevamente; sin dudarlo San lo rodeó abrazándolo con fuerza; era la primera vez que lo veía así de mal.
No dijo nada, solo se dedicó a acariciar su espalda en espera de que se relajara, y si él quería decir algo.
-esta bien, todo estará bien-.

•••