Cheerleader- adap RODRIVAN!

14

Dentro del recinto estaba lleno de diferentes uniformes coloridos que conformaba cada escuela. Rodrigo se sintió levemente abrumado entre la marea de personas, tratando de mantenerse en vista a su equipo, casi sosteniendo el brazo de Sebastián para mantenerse a su lado.

—Hay demasiada gente- confesó el mayor en un tono bajo, mostrando su sorpresa.

—Siempre es así por aquí, nunca logras acostumbrarte- murmuró el castaño con una sonrisa, mostrándose amigable ante las personas con las que se encontraba de frente.

—Ya eres la voz de la experiencia aquí.

—Créeme que no, aún hay mucho camino por recorrer- con un suspiro, siguieron caminando hasta quedar en los pequeños espacios para que cada equipo se preparara.

Detrás del telón se escondía cada escuadra para perfeccionar sus rutinas, hacer los últimos cambios necesarios y terminar de arreglar sus vestuarios para la presentación. Toda la escuadra se encontraba calentando, Rodrigo ayudaba a Edward con algunos estiramientos cuando una voz aclarándose detrás suyo le llamó la atención, girándose para ver a Abril y a su antigua escuadra justo delante suyo.

—¿Por qué se desgastan estirando? Todos sabemos que ni siquiera podrán clasificar- el tono de voz de Abril le provocó dolor de cabeza a Rodrigo.

—¿Tanto te preocupa que te quitemos tu lugar como para que vengas a molestar?- cuestionó cruzándose de brazos.

—Cariño, ustedes no presentan ningún problema para nosotros. Pero está bien si quieres creer eso, a final de cuentas nosotros éramos tu antiguo equipo y no me sorprendería si aún tienes un estándar muy alto, solo espero que no hagan el ridículo haya afuera.

—Créeme, más ridículo del que tú estás haciendo en este momento, nadie podrá superarlo.

—Rómpanse una pierna, lo necesitarán- observando a toda la escuadra contraria, Abril dio media vuelta y se dirigió a su espacio asignado.

Rodrigo observó a sus amigos y les sonrió, deseándoles buena suerte mientras Alexis señalaba a Abril y gesticulaba "está loca", para luego ser empujado por Rubén, haciendo reír a los tres. El castaño pasó una mano por detrás de su cuello, sintiéndose repentinamente cansado y sin siquiera empezar la presentación, pidiendo una botella de agua cuando Edward se acercó a él.

—¿Estás bien? No te miras muy bien en este momento- cuestionó el mayor, entregándole la botella.

Asintió, dando un trago—Estoy bien, simplemente necesito un respiro.

—Aún faltan un par de escuadras delante de nosotros para pasar, por si quieres salir un rato.

—Todo está bien, ya se me pasará.

Iván observó el intercambio desde la distancia, sin saber muy bien si era una buena idea interferir o quedarse en su lugar. Cerró los ojos mientras se giraba de vuelta al escenario, donde una mujer subió y los aplausos se hicieron notar, las cámaras y reflectores dirigiéndose al centro del escenario.

—Hola, mi nombre es Mía y seré su anfitriona esta noche- cuando los aplausos se hicieron notar una vez más, sonrió al público antes de hablar nuevamente—Espero que estén tan emocionados como yo esta noche para recibir a todos nuestros equipos en sus presentaciones. La dinámica que tenemos es que cada escuela estará presentando su rutina frente al jurado que se encuentra en la parte de enfrente. Una vez que tengamos los resultados de la primera ronda, los tres primeros equipos con mayor puntuación regresarán a presentar una segunda rutina para definir los tres primeros puestos que se llevaran la corona este año, ¿Entendido? Recordando el premio de un cheque y mantenimiento al inmobiliario de la escuela ganadora, ¿Están listos?- escuchando el grito de todos, asintió—Entonces, damos inicio a la primera ronda.