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- Buen trabajo

El día de hoy, Pete se tomó un descanso de la galería y pasó un tiempo en la tienda de masajes reservada por la directora Ji. Cuando se levantó del masaje, definitivamente se sentía ligero y fresco.

Por esto es que la gente recibe masajes. Abrió el vestuario para cambiarse de ropa, mientras pensaba eso, sonó su celular. La persona que llamaba era su madre.

- Sí, Mamá

- ¿En dónde estás, Pete?

- Oh, estoy fuera ahora mismo. ¿Pasó algo?

- ¿Oh, no estás en tu trabajo? ¿Puedes venir a casa hoy?

- ¿A casa?… ¿Pasó algo?

- Todo está bien. Ha pasado mucho tiempo desde que hice Japchae y me recordó a ti… Si no te importa, ¿por qué no cenamos juntos? Sería buena idea traer al gerente general también

¿Una invitación repentina para ir a casa? Han pasado meses desde que su madre regresó a Corea después de cuidar a Hansa, pero no había contactado mucho a Pete excepto por algunas llamadas para saludarlo. Ni siquiera lo había invitado antes a casa. Es por eso que se siente como una invitación forzada. No está contento con ese tipo de invitación. Tengo miedo de lo que está pasando en esa casa.

- No creo que él pueda, porque está ocupado. Iré solo

- Está bien, te esperaré

La voz de su madre era oscura. Pero está tratando de no pensar tan mal. Como dijo su madre, ella podría haberlo invitado porque pensó en él después de ver el Japchae. Pete se cambió de ropa y salió del vestuario. Todavía estaba brillante el sol afuera cuando salía de la tienda.

- Mamá, estoy aquí

- ¡Pete! - Cuando Pete entró a la casa, su madre, que corrió a su encuentro y lo abrazó con fuerza. Ahora que estaba de visita, fue abrazado más de lo habitual.

En los brazos de su madre, Pete se contuvo porque pensó que lloraría sin darse cuenta. Los echaba de menos y el estar familiarizado con el aroma de esa casa de la que siempre había querido huir. No esperaba que hubiera un peor infierno que ese lugar…

- ¿Cómo estás?, Déjame ver tu cara

Las lágrimas brotaron de los ojos de su madre. Pete le secó las lágrimas para evitar que llorara, pero sus ojos débiles aún se humedecen. Cuando vio a su madre tocándole su mejilla, acariciando su cabello y llamándolo por su nombre varias veces, sintió que se había vuelto mucho más pequeño.

- ¿Qué estás haciendo ahí? Sin decirle que entre.

Una voz pesada que provenía de la sala de estar, quería que Pete entrara… No sabía que su padre estaría allí. La madre pronto juntó las manos y miró a su hijo con expresión de disculpa.

- Tu padre te extraño mucho

¿Esa persona de la que no he recibido una llamada telefónica durante año y medio? ¿Ni siquiera lo llamó una vez para saludarlo? ¿Acaso nunca sintió curiosidad por saber cómo vive su hijo? Pete se movió pesadamente hacia la sala de estar con un profundo suspiro.

- Padre, ha pasado mucho tiempo desde que nos vimos

- Realmente eres una persona sin corazón ¿Ni siquiera querías saber cómo ha estado viviendo tu padre?

- Lo siento

- Dime qué has estado haciendo. Vamos, siéntate

- Pete, quédate con tu padre mientras mamá prepara la comida ¿está bien?

Divorce to twilight [ADAPTACIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora