¿Sabes que Te Odio? (Gay)

Capítulo 3 "¡¿Entonces que quieres que hagamos?!"

Espero que les guste. 

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–Noche de viernes, James esta como para una mamada.– Mencionaba el mismo James, mientras se acomodaba en el asiento del auto de Chris, aunque este no era el que manejaba, no, como tenía planeado beber hasta por la nariz, decidió decirle a el conductor de su familia que los llevase a todos y que del mismo modo, los recogiese.

Él se había comprometido a llevarlos a la fiesta, así no se preocupaban de autos o de quien tendría que conducir, todo esto, obviamente con un único objetivo. Emborracharse como si no hubiese mañana, a pesar de tener enterrado en sus costillas el codo de Calvin y de que no fuesen exactamente muy cómodos, la meta era divertirse.

Esta semana había sido toda una proeza, realmente Chris estaba sorprendido de lo confortable que era el pasar el tiempo con aquellos chicos que no le agradaban en un comienzo. Ellos siempre buscaban la forma de integrarlo al grupo, en especial Andrew, él estaba empeñado en que fuese parte de este. Y el ojiazul aún no entendía porque aun siendo una persona desagradable con los demás seres humanos, ellos querían seguir a su alrededor, como las moscas con la mierda, por más que las espantes ellas siempre vuelven. Y eso era desconcertante para aquel chico de cierto modo.

Sus almuerzos estaban llenos de bromas por parte de Jack, quien después de una breve presentación, no había tenido problemas en "aceptarlo" como parte del grupo. También sus clases se volvieron un poco más divertidas debido a que las compartía con alguno de los chicos, y esto solo significaba una cosa, burlarse de sus maestros y compañeros sin parar.

¿Quién lo diría? Chris, una persona que prefería que le clavasen unas tijeras en los ojos, antes de compartir tanto tiempo con otros seres vivos, ahora era él quien iba hacia su mesa sin ser llamado y se sentaba junto a ellos sin sentirse incómodo.

–Llegamos queridos compañeros. –Dijo Calvin, trayendo de nuevo a la realidad a Chris, quien estaba sumido en sus pensamientos. Andrew fue quien abrió la puerta, saliendo rápidamente para respirar aire fresco, ya que según él, todos estaban invadiendo su espacio personal.

–¡AIRE! ¡POR FIN PUEDO RESPIRAR! –Continuó gritando Andrew, subiendo su tono de voz, hasta tal punto que algunas personas que estaban ya ingresando a la enorme casa de Cassie se giraron en su dirección.

–Ya cálmate, joder. –Calvin golpeó la cabeza de Andrew para que este ya dejase de gritar como un desquiciado. –Mejor entremos, sí.

–Te enviaré un mensaje para que nos vengas a recoger, ¿Bueno? –Chris se giró en dirección al conductor, quien se había bajado del auto, para recibir instrucciones.

–Está bien, joven. –Mencionó regresando al auto, para después irse.

–¡Vamos Chris! –Gritó Jack, desde la puerta, esperándolo antes de entrar. –La noche es joven, compañero. – Pasó uno de sus brazos sobre los hombros del ojiazul, atrayéndolo, antes de entrar por las amplias puertas de aquella casa.

[...]

–¡Salud! –Gritó Jack, brindando con sus compañeros, o bueno, los que quedaban. Llevaban ya varios tragos encima y aun no tenían la intención de parar. Calvin ya se había separado del grupo y se había ido con alguna chica y Andrew se había perdido una vez dentro de la casa; así que solo quedaban Ed, quien gracias al alcohol había dejado de ser ese chico tímido que generalmente era y ahora estaba bailando con todo lo que se moviese; James, que estaba sentado en el sofá con una chica sobre su regazo; Jack, que los obligaba a beber a todos, con la excusa de que brindasen por la buena noche que estaban pasando; y Chris, que estaba sentado junto a Cassie, esta última lo había buscado y cuando lo encontró, no se le había separado para nada, manteniéndose entre sus brazo cual koala.