¿Sabes que Te Odio? (Gay)

Capítulo 13 "¡¿Tú trabajas aquí?!"

Holaa, yo de nuevo. Aquí está el nuevo capítulo, espero les guste y lo disfruten.

No olviden comentar, en serio quiero saber lo que piensan sobre la novela. Y votar.

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Pequeños rayos de luz se filtraban por los ojos de Christopher, quien no sabía dónde se encontraba, sentía su cuerpo adolorido y una aguja punzando su brazo.

—¡Enfermera! ¡ENFERMERA! ¡Robert llama a la enfermera, a un médico, lo que sea! ¡ROBERT! —Chris solo escuchaba como gente a su alrededor gritaba, él ni siquiera sabía dónde estaba, ni que le había ocurrido. Un fuerte dolor de cabeza lo invadía, impidiendo que pudiese abrir sus ojos fácilmente, debido a que, la luz incandescente aumentaba el dolor.

—Hola, Christopher, trata de abrir tus ojos suavemente. —Le decía un hombre con bata blanca que claramente no conocía.

—¿Dónde estoy? ¿Quién es usted? —Christopher se estaba alterando al no saber que ocurría, sin embargo, un dolor punzante en su pecho le impidió seguir moviéndose.

—Cálmate soy el doctor Harris, estás en el Hospital Central, tuviste un accidente automovilístico en la madrugada. —Volvió a hablar el hombre con bata blanca.

—¡¿Tuve un qué?! ¡¿Qué me pasó?! —Su respiración y su ritmo cardíaco se aceleraron a tal punto que el monitor del ritmo cardíaco empezó a aumentar, generando un sonido bastante desagradable para todos en la habitación.

—Tienes que tranquilizarte o tendremos que aplicarte un calmante. —Esto logró que Chris se calmara un poco. —Te dejaré con tus padres para que te expliquen lo ocurrido. Si necesitan algo, me avisan.

—¿En qué estabas pensando? El nivel de alcohol en tu sangre era absurdo, te tuvieron que hacer un lavado estomacal, Christopher. Estoy cansada de esta situación. —Su madre comenzó a hablar justo después de que el doctor abandono la habitación. Estaba enojada, se notaba en su voz, sin embargo, no lo gritaba porque no quería hacer un escándalo.

—¡¿Usted quién es?! ¡¿QUIENES SON USTEDES?!

—Robert, llama al doctor. —Elizabeth estaba bastante asustada, no sabía que le ocurría a su hijo, ni tampoco porque no la reconocía.

—Chris, amor, soy tu madre. —Su voz se dulcifico completamente, acariciando suavemente su brazo. —Tuviste un accidente en tu auto, estabas conduciendo ebrio, te chocaste contra un árbol, tu auto fue pérdida total. ¿Cielo recuerdas algo? Chris, háblame.

—¡¿Qué mi auto que?! ¡Mi hermoso auto destruido!

—¡CHRISTOPHER ADAMS ESTABAS FINGIENDO! ¡ESTO ES EL COLMO! ¡ME CANSE! ¡DESDE ESTE MOMENTO OLVIDATE DE TODOS TUS LUJOS! ¡YA COLMASTE MI PACIENCIA! —Y su madre abandono la habitación, el ojiazul sabía que había sido una broma muy pesada el fingir amnesia, pero quería evitar los regaños de su madre lo cual había salido notablemente mal.

Sus padres no volvieron a la habitación, ni siquiera cuando el doctor fue a su habitación a darle de alta, no había sido nada grave, solo tenía una herida en la frente y tenía bastante lastimado su torso y piernas, pero no había fracturas ni lesiones, por ello le dejaron salir. Encontró a sus padres en la recepción pagando la cuenta del hospital y ni siquiera allí le hablaron simplemente se fueron al estacionamiento con un Christopher caminando con dificultad tras ellos.

El camino a casa fue mucho más tortuoso, sus padres no mencionaban palabra alguna y eso estaba haciendo el ambiente aún más incómodo. Al llegar Chris se fue a su habitación, lo único que quería era dormir toda la semana si pudiese, se sentía agotado, no esperaba que una fiesta en la que la había pasado tan bien, terminara de esa forma. "¡Mierda la fiesta! ¡TAYLOR!", pensó, hasta ese momento no había recordado lo que había pasado en esa fiesta, lo que había hecho con Taylor. Estuvo pensando en eso hasta que el sueño lo invadió, sin embargo, su paz fue interrumpida por una empleada, quien lo despertó para pedirle que bajase a la cocina, debido a que, sus padres lo estaban llamando, de muy mala gana se levantó, el dolor en su cuerpo se había incrementado, ya que, los calmantes ya no le hacían efecto.