Es verdad lo que se dice, el tiempo avanza rápido y jamás suele detenerse, ni siquiera a pensar un momento en lo acelerado que es vivir sin un descanso, el tiempo avanza y avanza, te arrastra y jamás se detiene, no se detiene a ver si estas bien, ni siquiera te deja ponerte de rodillas, ni mucho menos hacer el intento de levantarte, si tú caes, si tú te dejas vencer, el tiempo hace de las suyas y ya no vuelves jamas a ser quien fuiste.
Lo acelerado de los días es algo de lo que no somos conscientes en lo absoluto, no paramos, avanzamos y avanzamos hasta el punto de ya no saber dónde frenar, ni como hacerlo, ni donde y cuando miramos atrás y vemos los vestigios de nuestro paso, queremos inútilmente encontrar la fórmula secreta para ir al pasado, supongo que por eso muchas veces no sabemos dejar atrás, viviendo del pasado por siempre. Aunque bueno, que trabajo es abandonar el pasado, más aún cuando vivimos entre recuerdos y añoranzas, más aún cuando no sabemos avanzar del todo sin la carga de lo que vivimos antes, vivir pendiente de lo que fuimos, es algo que no superamos fácil, pero en si la vida no es fácil para nada.
El tiempo pasa y pasa, y como nunca se detiene nos invita a no sentir siquiera los días, te pone día tras otro y no lo sientes para nada, un dia es enero y al siguiente ya puede ser diciembre en solo un abrir y cerrar los ojos, la vida en si es rápida, Pero más aún cuando tu vida es tan atareada que no te detienes a pensar en lo absoluto, porque el tiempo no te rinde para hacerlo. Seo Changbin era una persona que constantemente vivía acelerado, su horario era apretado, entre ensayos, grabaciones, constantes viajes, entrevistas, sesiones de fotos y en total una vida de famoso, y por supuesto, algo que no debemos olvidar es su gira mundial que parecía no acabar nunca, estaba agotado, se sentía cansando y cada noche sin querer, su mente lamentable lo llevaba a aquella navidad en un país que nunca habia visitado antes de esa vez.
A veces le gustaba soñar con aquellos recuerdos de noches acaloradas y fiestas que parecían interminables, a veces, aún se soñaba entre lo cálidos brazos y suaves caricias de Chan, era como un fantasma que habitaba su mente, que se paseaba de un lado al otro y se negaba a dejar el espacio que habitaba, un fantasma, un espectro, un recuerdo, eso era Chan. Chan, Chan, Chan, él y su sonrisa, él y su humor poco convencional, el y su forma de ser, con tanto carisma y familiaridad, Chan era distinto, un hombre que le hacía flaquear las piernas y le calentaba el corazón de una forma inexplicable, Bang era alguien que su presencia planteaba un honor, Changbin lo sabía muy bien y es por eso que su corazón, muy tonto, lo atesoraba como alguien tan valioso que no tenía un precio.
Lamentablemente eso no parecía muy bueno en ese momento, no cuando llevaba unos meses sin saber de él, no cuando llevaba enamorado de un recuerdo de alguien con quién no vivió algo que podría nombrar, Chan fue alguien en su vida que realmente marcó algo, y ese algo era molesto, no lo dejaba continuar, ni pensar, ni escribir, ni soñar, Chan estaba en todas partes, menos en su vida diaria.
Habían pasado cuatro meses, llevaba todo ese tiempo sin saber nada de él, ni una llamada, ni una carta, siquiera una señal de humo, Bang Chan había desaparecido de su vida de la misma forma en que entró, tan rápido que parecía un rayo, tan rápido llegó como se fue, así, dejando huella, dejando una pisada, una marca para luego desaparecer en su paso. Era gracioso, pues realmente quien llegó y se fue, fue Changbin, él llegó a un país extraño, él lo conoció y le permitió entrar, fue Changbin quien se fue con solo una nota ridículamente larga y fue el auien no dejo siquiera una pizca de él mismo en ese lugar, él era el verdadero culpable.
Sin embargo, a pesar de que sentía él la perdida de algo, no dolía, no era como abandonar al amor de tu vida al otro lado del mundo, no dolía, de verdad que no, Pero quizá Chan era ese tipo de persona que simplemente dejaba huella aunque el tiempo fuera muy corto, quizá era eso o Changbin había enloquecido completamente al pensar en escenarios ficticios con alguien con quién jamás tuvo algo.
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El Secreto De Las Flores Del Jardín. (Binchan)
HumorPorque las flores guardan secretos, promesas y recuerdos. La flores del jardín presidencial tampoco eran la excepción. Inicio: 12 junio 2024