La culpa me carcome por dentro,
una serpiente que me aprieta la garganta.
¿Hice algo mal?
¿Fui yo la causa de tu partida?
Las dudas me atormentan,
me llenan de remordimiento y desesperación.
Revivo cada momento, cada palabra,
buscando una explicación, un error que corregir.
Pero la culpa se aferra a mí,
un peso que no puedo soportar.