Capítulo 16

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Harry se encuentra en el despacho de su padre, Severus lo mira tranquilamente pero Harry puede detectar un ligero tormento en sus ojos, Harry esta ojeroso, cansado y muy triste.

-Se que no fue tu culpa papá.
-Lo siento mucho, no pude evitarlo, quizá debimos ser más específicos con la orden, quizá...
-El basilisco no tiene manera de saber quién es quién papá, aunque le hubiéramos pedido que no lastimara a Hermione no hubiera tenido manera de saber quién es ella, la serpiente solo busca rumores y ataca a los hijos de muggles que son molestados o señalados por alguien.- el rostro de Harry se ensombreció.- alguien debió haberle dicho algo con respecto a su origen como para que la bestia fuera tras ella.

Severus levanto el rostro ante lo que su hijo decía, tenía razón, alguien debió haberla estado molestando como para que el basilisco se diera cuenta de que ella era hija de muggles.

-Entonces buscamos a quien sea que la haya molestado.- Harry volteo a mirarlo.
-Se que hemos aprendido de los errores pasados y que matar a las personas ya no es la mejor manera de lidiar con las cosas, pero si te pido que destruyas la solvencia económica de quien la haya molestado ¿Lo harías?
-Si, lo haría.- dijo sin titubear.
-¿Así de sencillo?- pregunto el niño confundido.
-Esa niña es tu mejor amiga, hasta ahora tu única amiga verdadera, fuera de la familia, te ha defendido y ha estado contigo y sobre todo, te escucha, ella es importante para ti, y mi deber es proteger a tus seres queridos también hasta que puedas hacerlo tú mismo, así que si, si alguien la ha estado molestando por su origen, es mejor que vayamos viendo como detenerlo.
-Gracias papá.- dijo el niño con un nudo en la garganta y lágrimas en sus ojos.

Severus suspiró y se levantó, se acercó a su hijo y se agacho para quedar a su altura, no le dijo nada más solo envolvió sus brazos alrededor de él y le acaricio su cabello, a veces era fácil olvidad que solo era un niño de 12 años.

-Tranquilo hijo, tu abuelo vendrá con el antídoto en cuanto le mande a llamar, Hermione no se quedará así por los tres meses que dijo Dumbledore.
-¿De verdad?- susurro el pelinegro.
-De verdad. Así que no te preocupes, por lo pronto, hablé con los Granger, nadie aquí les aviso del incidente pero les dije que personalmente estaba trabajando en la cura, querían venir obviamente pero no pueden, así que tu madre y Dudley se ofrecieron a venir a hacerle compañía.- Harry se sorprendió.
-¿Por qué harían eso?- Severus le sonrió a su hijo.
-¿No conoces a tu madre? Al ver el dolor de la pobre señora Granger no pudo hacer otra cosa más que ofrecerse a venir personalmente a cuidarla, además, ella sabe que ella es importante para ti.
-Gracias papá.

Cuando padre e hijo finalmente salen del despacho ambos se dirigen directamente a la enfermería, cuando entran Lily, Dudley, Neville e incluso Luna ya están ahí, Lily se levanta rápidamente y envuelve en un abrazo a Harry mientras que Dudley solo le da palmadas en la espalda.

-Oh querido lamento tanto que las cosas hayan resultado así.
-No te preocupes mamá, estaré bien en cuanto ella despierte- luego susurro.- papá dice que el abuelo va a intervenir para que sea más temprano que tarde.
-Eso es bueno, queríamos venir a ver en que podíamos ayudar para darle más comodidad a tu amiga, es una señorita encantadora y nos ha caído muy bien, además sus pobres padres, tenía que darles alguna garantía de que ella estaría atendida, no sé qué hubiera sido de mi si no pudiera venir a verte.
-Por cierto, ¿Cómo hicieron que Dudley viniera? Él es un muggle.
-Bueno, le dimos un poco de mi magia en un brazalete que trae puesto, esto solo es posible porque somos familiares de sangre, si quisiéramos algo para los Granger tendría que ser Hermione quien se los diera pero...
-Así petrificada no es posible...
-Así es.

Harry se sentó en su lugar de siempre acariciando la mano que tenía el papel, deseando que los planes de su abuelo se movieran rápidamente, pedirle perdón a Hermione y sobre todo, para averiguar quién seguía molestándola, no le gustaba pensar que estaba en la oscuridad.

LA LLAMADA DEL LADO OSCURODonde viven las historias. Descúbrelo ahora